Perdóname 《K I M T A E H Y U N G》

29.

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Alice alistaba su toga y la extendía sobre su cama, su virrete se encontraba al lado.

Debajo llevaría un lindo y elegante vestido y se había esforzado mucho en su maquillaje.

Era el día de su graduación, quería verse y sentirse bien.

Abrieron la puerta de su habitación de un momento a otro, dándole un pequeño susto.

—Hmm ¿Quien es esa princesa?—dijo mirando a Alice de pies a cabeza.

—Jimin, te he dicho cientos de veces que toques antes de entrar—dijo Alice riendo.

Jimin se acercó a ella y colocó sus manos en su cintura—Estás hermosa—.

Alice sonrio y besó a Jimin, quien sin dudar apegó su cuerpo al de ella para luego apretar su trasero.

—Ahora no, llegaremos tarde—Dijo Alice y alejó a Jimin para continuar arreglandose.

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Taehyung llegó a la oficina de la empresa y encontró a James metiendo unos papeles rapidamente en su maletín—¿Por qué tan apurado?—.

—Hoy es la graduación de Alice, no me puedo perder la ceremonía—Dijo nervioso mientras buscaba su celular en su desordenado escritorio.

—Tenemos reunión en una hora—renegó.

—Dile a mi asistente que la cancele, nos vemos mañana—dijo James y al encontrar su celular, salió rapidamente.

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Después de la ceremonia Alice se había juntado con sus padres en los jardines del campus, querían tomarse buenas fotos.

La toga de Alice constantemente se enredaba entre sus piernas y la hacía tropezar, James se había burlado un par de veces cuando casi caía al suelo.

También se tomaron algunas fotos con Raven y Jimin.

Hally, la madre de Alice se la había pasado llorando de felicidad toda la graduación así que James insistió en que siguieran la celebración en casa.

—Pensaba tomar algo con Jimin y Raven, después iremos a casa—dijo Alice y a sus padres no les quedó de otra que asentir.

Una vez que Hally y James subieron a su auto, Alice y los chicos empezaron a planear a donde irían.

—Deberíamos de ir a una discoteca—Dijo Raven mientras daba algunos pasitos en su mismo sitio.

—Son las 4 de la tarde, no hay discotecas abiertas—se burló Jimin.

Los tres rieron al mismo tiempo.

Alice y Raven se quitaron las togas para doblarlas y colgarlas en sus brazos, no saldrían con eso puesto.

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Ya en la noche, Alice llegaba en taxi a su casa, sus padres debían de estarla esperando para continuar celebrando.

El taxi se detuvo unos metros antes de la entrada.

—Señor, es más adelante—Dijo Alice amablemente y señaló su pórtico.

—La camioneta de adelante no permite señorita—Respondió el taxista.

Era cierto, había una camioneta obstruyendo la entrada, así que Alice le pagó al señor y después de dar las gracias se bajó del auto.

Caminó muy lento por la calle, sus zapatos ya habían empezado a dolerle y justo antes de ingresar a su jardín, la bocina de aquella camioneta sonó y le dió un pequeño susto.