PETRO EL INDIGENTE (En Pausa)

CAPÍTULO 1- A LA DERIVA

"Narra Petro"

—¡No te acerques a él! ¡Es un vago! ¡Huele muy mal y hasta ladrón puede ser! —escuchaba a la gente susurrar de mi horrible realidad.

—¡Oye tú... aléjate de aquí! ¡Este no es lugar para tí! —me gritaba un don, sin la menor idea del porqué.

—¡Sí! ¡Vete de aquí que contaminas el aire! ¡Además hueles asqueroso! —gritaba un friki de la sociedad.

—¡Alejandro! ¡Deja al muchacho en paz! ¡Solo recoje para sobrevivir! —una señora en mi defensa salió.

—¡Sobrevivir! ¡Debería morirse ya! Así deja de sufrir y de estorbar —respondió tan duramente con aquellas palabras, que cada día me hacían invisible por las calles de la soledad.

—¡Papá! ¡No puedo creer esa actitud contra este jovencito! ¿En qué clase de hombre te has convertido tú? ¡Todos tenemos derecho a una oportunidad! —escuché decir a una simpática jovencita acerca de mí.

Pero, no fue su defensa la que me llamó la atención, sino la palabra que declaró. "OPORTUNIDAD". ¿Realmente merecía una oportunidad yo?

—¡Si supiera quién soy y lo que hice no sé expresaría de mí así y mucho menos saldría en mi defensa juntamente con la señora! ¡Yo soy un animal! ¡No merezco vivir!

Pero cuando me miró, aquella mirada me transmitía amor, paz y confianza. Era tan penetrante que por instante quedé paralizado ante aquella mirada de compasión.

Salí corriendo porque tenía miedo. ¡Nadie me había visto así! Yo, quien algunos consideraban un estorbo, desperdicio en la sociedad, y que además debía morir.

Me consideraba tan basura e inmerecedor de una oportunidad, que cuando escuché esas palabras realmente sacudieron todo mi ser.

Llegué al lugar solitario, frente aquella inmensidad de agua, esperando el valor para lanzarme desde 80 metros de distancia, solo que nunca el "Don Valor" llegó.

------------------------------†††††---------------------------