METANOIA

Capítulo XI

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A finales de año, Martin Lodge se encontraba sentado a un lado de Mario Henry Hernandez, ambos estaban charlando frente a la obra de Pieter Bruegel apodado 'El viejo', dicha imagen venía del siglo XVI, titulada 'El triunfo de la muerte', se reflejaba las importantes causas de mortandad para el momento, una imagen borrosa a decir verdad, habían espadas, hambre, peste y fieras dentro de la imagen.

Martin extendió la botella de whisky escocés a su compañero, se acomodaron en los respaldos de sus asientos y Mario fue el primero en hablar. —¿Cómo justificaríamos esto?

—Los avances médicos redujeron las tasas de mortalidad, hablamos de vacunas, dinero por donde lo veas. —explicó el hombre. —Cuando Edward Jenner inventó la primera vacuna, no sabia la cantidad de dinero que iba a poder hacer o quizá sí.

—Vamos a crear la enfermedad. —levantó su ceja.

—Y la cura de la misma, ¿No crees que es increíble?

—Sigo sin comprender cómo vas a asesinar a más de la mitad de la población mundial.

—Encarguémonos de lo principal, convencimiento, solo debemos ser convincentes y conseguir país a país. —movió el hielo en su vaso, chupó su dedo y sonrió. —Mira esta obra de arte, haremos una obra maestra y nos lo agradecerán.

—¿Y qué pasa con lo otro? —pregunta Mario.

—Lo otro viene después pero va a ser la primera propuesta. Imagínalo así. —se levantó del sofá individual, aún sosteniendo el vaso. Levantó su mano vacía. —El ser humano y su poderío, como transformar a un imbécil en un habilidoso sujeto. —sonríe. —Se estima que para el año, los países desarrollados no incrementarán su tasa de natalidad y los que están en desarrollo sí, detendremos la natalidad mundial, aumentaremos la mortalidad y dejaremos que el mundo se adapte a ello.

—¿Qué pasa con los trastornos mentales? Asesinaremos a miles.

—Seremos como Hitler pero más inteligentes. —bebió de su trago. —Tú y yo, mucho más inteligentes, la amnesia hará que el ser humano disfrute de ser nuestro y de nuestro régimen.

—Suena fantasioso. —se encogió de hombros.

—Sabemos que es posible, Mario. —apretó su hombro. —Solo debemos ilustrárselo a los representantes de la mejor manera posible.

—¿Y eso es posible? —se ríe levemente.

—Todo es posible.

Si la población terrestre continuase duplicando su número de habitantes cada cierto periodo de tiempo, no dará basto, se habla de una población de 9.300 millones de personas para el año 2050, pero en el año 2015 la población rozaba los 7.300 millones de personas a pesar de la baja fertilidad de los países desarrollados. En evidencia clara el ser humano no puede poblar al mundo, no puede crecer de manera abismal, esto no es nada favorable de ningún modo, el medio ambiente sufre cargos grandes y los suministros básicos para la vida escasearían, como escasean en cierta cantidad de países en desarrollo.

Lo que proponía Martin era la despoblación, un pensamiento cínico y aliado, si hay quienes alucinan con la emigración a otro planeta, Martin alucinaba con la idea de convertir la tierra en otro planeta, convertir al ser humano en otra cosa y hacerse con la suya. Ahora, piensen en China, el país asiático donde estuvo prohibido por ley tener más de un hijo por pareja con el fin de controlar la natalidad, aunque dicha ley se abolió en las grandes ciudades, en las zonas rurales sigue siendo obligatoria en ocasiones. Dicha ley, ¿Qué causa? Abortos repetidos, niños indocumentados los cuales nacen siendo un secreto para la nación y son negados a los derechos humanos, ya que para el gobierno dichos niños no existen y a su vez un problema potencial, asesinatos a bebés del sexo femenino, sí porque en el país asiático las niñas están menos valoradas.