peachless. - fayne [wayne mccullough x five hargreeves]

im sick and im tired too

— Entonces. . .
— ¿Entonces qué, Joven McCullough? ¿Tiene alguna duda?
— ¿Me darán los resultados en estos días?
— Así es, usted vendrá y ya le diremos sus resultados.
— Me parece bien, muchas gracias.

Wayne se despidió y se retiró de aquel lugar para después dirigirse a su casa, con esperanza o eso creía.

Pasaron esos días y él ya había ido a ese lugar nuevamente con resultados. Ahora estaba decaído y no quería hacer nada más que llorar, desde hace días ya no salía de la cama y no comía, Toni y Gerard se percataron de eso y les preocupó. Toni ya le había dicho a Five y él ahora era el preocupado, pero por varios asuntos no podía ir a la casa de su novio hasta un viernes, y ese viernes ya había llegado.

Cuando llegó a la casa de su novio tocó la puerta y Toni lo dejó pasar.

— ¡Toni, hola!
— Hey, mi querido Five. Me alegra verte por aquí.
— ¿Ya le preguntaron qué le sucede? Por cierto, hola Ge.
— ¡Five, hola!
— Si, le preguntamos pero no nos dio respuesta.
— ¿En dónde está?
— En su habitación.

Five rápidamente fue a la habitación del chico y tocó la puerta una vez.

— ¿Wayne, amor? ¿Puedo pasar?

No hubo respuesta, así que Five volvió a tocar y nuevamente, nada. Así que decidió pasar y ahí estaba su novio acostado en la cama.

— Mi amor, ¿estás bien?

Se acercó a su novio y se sentó en la cama para después acariciarle su cabello.

— Voy a morir.
— No, no digas tonterías.
— Voy a morir.
— No, amor. No es cierto.
— Tengo cáncer, Five.

Five se quedó en silencio al escuchar eso, se había quedado sin palabras, en shook y sin saber cómo responder.

— ¿¡Qué tienes qué!?

En eso, entró Toni ya que había estado detrás de la puerta todo este tiempo junto con Gerard.

— N-No es una broma, ¿c-cierto?
— N-No. . .

Y Wayne volvió a romper en llanto al igual que Five, Toni y Gerard.

— Bebé, mira. . . no vas a morir, ¿si?

Había dicho Toni mientras tomaba las mejillas de su hijo y trataba de no seguir llorando.

— Estoy seguro de que si. . .
— No pienses así, mi niño. Te vas a curar.

Five se acercó a su novio y le sonrió, acarició su cabello y besó su frente.

— Yo también pienso que te salvarás, mi amor.
— Y yo.

Esa última voz era la de Gerard. Todos estaban esperanzados y eso le daba un poco de esperanza a Wayne. Nadie estaba seguro de lo que pasaba.

Llegó la noche y Wayne ya estaba dormido, había dormido en toda la tarde y Five lo había estado cuidando. Ya era muy tarde y tenia qué irse, hasta que Toni entró a la habitación con cuidado.

— Cariño, quédate que por mi no hay problema, ni para Gerard.
— ¿De verdad?

Por lógica, estaban hablando susurrando, no querían despertar al chico.

— Si, cariño. Quédate.
— Está bien, me quedaré. Gracias.
— No agradezcas.

Toni le dio una pijama al chico y se retiró.

Five dejó a un lado un libro que estaba leyendo y se puso su pijama, dobló su propia ropa y apagó las luces y se acostó alado de su novio, estaba tan dormido y tan relajado en ese momento. Five acarició el cabello de su pareja y las lágrimas se volvieron a ser presentes en ese momento.

— Tienes que pelear y tener esperanzas. . .

Nuevamente estaba susurrando, se sentía muy triste y adolorido en ese momento.

— Por favor, pelea. . . no te vayas, no me dejes, no te quiero perder. . . eres el amor de mi vida, vamos a casarnos y estaremos juntos toda la vida pero por favor por lo que más quieras, no te vayas, no quiero dejarte, te quiero conmigo, eres el único que me apoyó y me buscó, fui un idiota y te dejé ir varias veces por favor, no dejes que te deje ir, no puedo hacerlo. . .

Five rompió en llanto, pero era un llanto silencioso y triste, tan profundo que no se percató cuando estaba abrazando a su amado y con fuerza pero sin lastimarlo.

No quería perderlo.

Nunca.

— Fin, capítulo 19.