𝘕𝘰 𝘦𝘴 𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘪𝘮𝘢𝘨𝘪𝘯𝘢𝘴

Capitulo 6: Secuestro parte 2

Felix despertó en su cama, no, mentía, abrió los ojos en su cama, ya que no había podido consiliar el sueño en ningún momento, sus párpados pesaban, sus pestañas se enredaban, sus labios estaban secos y rasposos, su garganta picaba internamente, su nariz estaba enrojecida por sollozar, su mente no dejaba de dar vueltas, intentando unir puntos que no tenían conexión alguna, sus mejillas ardían con lágrimas secas pegadas en ellas, sus manos estaban frías, sentía que sus dedos podrían quebrarse o caerse en cualquier momento, su abdomen dolía por la presión, su columna se contraía por la mala posición, su cabello había perdido los débiles rizos, transformándose en un negro opaco, lacio y puntiagudo, siendo un desorden completo, su cadera estaba dura por la presión de estar de costado en el sofá, sus piernas pesaban y se sentían pegadas entre ellas, sus rodillas hacían un sonido de quiebre cada vez que intentaba moverlas, sus tobillos estaban hinchados por falta de circulación de sangre, y sus pies estaban adormecidos y helados, sentía un cosquilleo constante, como si estuviera parado sobre piedras, y era un dolor enorme cada vez que movía un mísero dedo, la temperatura había bajado, se podría decir que tenía hielos atados en todo su cuerpo, no entendía que le pasaba

Nunca había pasado por un estado así, se sentía deprimido, asustado, frágil, débil, como una delicada copa de cristal, que puede romperse con cualquier toque. Creía que debía ser valiente y fuerte, era el detective Félix Murphy, se podría decir que estaba a cargo del caso, que se había hecho conocido mundialmente

Porque si, todo el mundo era consciente de este asesino, salía en las noticias, se encontraba con periodistas, eran un dúo ahora, eran el equipo que investigaba a un posible asesino serial, pero no podía hacerlo solo

Sentía que este asesino lo conocía, sabía sus puntos débiles, y claramente parecía burlarse de él constantemente, jugando con su mente, y volviéndolo loco con cada acción

Nunca debió dejar a Ragnar entrar en su vida, con su cálida sonrisa, su apoyo constante, sus abrazos, su tranquilizadora voz, su cabello castaño, sus ojos miel.. todo él era un problema

Desde el principio supo que era un error, en cuanto rescate al castaño lo sacaría de su vida, necesitaba trabajar solo, no podía poner en riesgo a ese chico que solo intentaba ayudarlo, porque no se perdonaría nunca que algo le pasase, no podía darse el lujo de tener un punto débil frente a un asesino serial que juega con él

Quizás haga sus valijas y lo mande en un avión a Sulawesi en Indonesia, donde se aseguraría de no volver a verlo, y que estará a salvo a menos que toque una planta venenosa, que conociéndolo..  la tocaría definitivamente

Pensó que debería apagar el televisor, las hipótesis absurdas que creaban los reporteros y noticieros lo sacaban de sus casillas, insinuaban que Félix había secuestrado a Ragnar para ganar publicidad cuando descubra donde se encuentra

¿Eran idiotas? Desearía no estar pasando por el estado en el que estaba, se sentía un maldito estupido

Apago el televisor y se puso de pie, se lavó la cara, se acomodó el cabello, se puso su usual ropa de trabajo, unos jeans, camiseta color nude, y un sobretodo, con sus botas Chelsea, obviamente. Estaba listo

Como si lo vigilaran, automáticamente llegó un mensaje a su móvil

Buenos días corazón, el reloj se activará denuevo, encontrarás el acertijo en: Tiene un buen lecho y no duerme en él, que lo utiliza para correr

Bien, le dan un acertijo para encontrar otro acertijo, maldición. Tiene un lecho.. y no duerme en él.. y lo utiliza para correr.. que corre y tiene lecho? Un caballo? No, es un lugar de la ciudad