VIRALES - [Tu vida arruinada con un solo clic]

CAPÍTULO CUATRO

CAPÍTULO CUATRO

14 días antes.

6 de marzo del 2014

Nueva York, Estados Unidos.

06:30 AM

Hoy es otro día, aunque el chisme mediático de un controversial video sexual, en donde nuestra protagonista no es nadie más ni menos, que Ada Carvajal.

Pero, recuerden mi promesa, desenmascare a cada uno y los haré viral en el proceso.

El video sexual de Ada es el inicio a mi venganza que involucra a ocho compañeros declase con muchos secretos que ocultar que dejaré a la luz, para ustedes, para que conozcan realmente quienes son cada uno de ellos, así que... ¿Cuál es el siguiente?

Les dejaré una pista:

En la siguiente actualización desenmascaré a dos personas de este grupo que además de ser casi familia, son infieles.

Muy infieles, traicioneros y sucios, ¿quién se mete con la novia de su mejor amigo?

JULIO.

Ada Carvajal, la chica de mi mejor amigo, que usualmente es mía, que, en realidad, es mía, que he deseado desde hace tanto tiempo, que he amado desde pequeño, pero que siempre tuvo él.

Es jodido porque bueno... Él. Siempre ha sido en él, porque Paolo siempre obtuvo todo, desde la atención de la chica más bonita hasta todas las coronas de Rey del Baile, durante todos estos años junto al aclamado puesto de capitán del equipo de futbol, solo por ser uno de los chicos más ricos de Nueva York, por ser un rubio bonito, adinerado, de ojos verdes, billetera desbordante, atlético y carismático pero lleno de problemas causados por la ausencia de sus padres en su niñez. Siempre estuve con él, siempre lo he apoyado, pero aquí me encuentro, abrazando a su novia que usualmente me encargo de follar cuando quiera y donde quiera porque es mía, aunque tengamos parejas, aunque sea el novio de su mejor amiga y aunque ella sea la novia del mío.

La única diferencia es que hoy, Ada y yo estamos saliendo de un motel, a las seis y media de la mañana y vamos al hospital.

No a la casa de Pitter a seguir una fiesta, no a su casa (la que comparte con Paolo), ni la de sus padres. Vamos al hospital porque Paolo se agarró a golpes con Pitter, según lo que me cuenta Alejandra, mi novia.

Llegamos al estacionamiento y...

—¿Crees que él ya sepa...? — pregunta Ada y meneo la cabeza.

—No lo sé. — soy sincero.

—¿Alejandra te mencionó algo?

—No.

Abro la puerta para que entre a la camioneta.

—¿Crees que dirán algo en el grupo sobre lo de «nosotros»? Ya sabes, lo que tenemos y el resto de las cosas que nos involucran...— pregunta solo montando una de las piernas dentro de la camioneta y...

—Prácticamente, dijeron nuestros nombres, pero puede ser otra cosa. — digo, mintiéndole en la cara, porque la verdad es que es muy evidente.

—¿Qué haremos si eso llega a suceder, Julio? — inquiere, con mucha tensión en la voz.