trece

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mientras frederick subía
al cuarto de freddie, su padre;
el irlandés y la rubia seguían parados ahí
desde la entrada y vista al jardín, platicando.

― mary, por favor yo no puedo decirle eso. frederick es un niño.

― y crecerá como cualquier niño, tendrá una vida más tranquila.

jim estaba preocupado
mientras que mary no mucho,
sonreía desde sus adentros
mientras el pelinegro insistió:

― apenas se enteró de lo que le sucedió con freddie, es mucho para él...

― él necesita una madre hutton, no puedes llevártelo.

― pero...

― tengo la tutela... ¡frederick y los gatos se quedan!

no pudo decir más,
apretó su puño escondido en su bolsillo.
no podría hacer más,
bajó su mirada y fue al jardín
mirando las cosas regadas
en el césped que dejó el pequeño.

― haces mucha falta cariño...

finalizó de recogerlas
mirando aquél balcón de la ventana
de quien fue su habitación.

1991Donde viven las historias. Descúbrelo ahora