CAPITULO III: FILO-SOFIA.

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Despierto, rayos  de luz alumbran mi rostro, con los ojos entreabiertos logró divisar que estoy en mi habitación y que la ventana que da al jardín delantero está abierta. Siento el cuerpo demasiado cansado y la boca reseca, a cómo puedo me levanto de la cama para lograr ponerme en pie. Últimamente no he dormido muy bien, estuve pensando demasiado el hecho de que veria a mi madre, pasaba horas pensando hasta que me daban las 4 am... ya una semana de todo esto, y bastante tiempo de no dormir por miedo a la oscuridad.

Una vez de pie, estiro mi cuerpo y me dispongo a salir, llevo la misma ropa de ayer, así que me urge tomar una ducha, sin embargo, con el rabillo de mi ojo derecho capto un objeto cuadrado puesto sobre mi escritorio. Me detengo, doy unos cuantos pasos hacia el  y con curiosidad lo abro.

Es una pulsera, cubierta con pequeñas perlas turquesas.

Cierro la pequeña caja algo confundida y me dirijo a la cocina. Una vez ahí, veo a papá algo frustrado intentando abrir la puerta del horno, observo completamente el lugar y lo desordenado que se encuentra, empaques de harina abiertos y regados por el suelo, una botella plástica goteando leche por un pequeño orificio... Papá, ¿Qué se supone que estás haciendo?

-Buenos días princesa.- exclama.

Vaya, así que ya es otro día...

Me percato que tiene manchas de harina en las mejillas y no puedo evitar reír.
-Esto es raro, despertaste sonriendo.- dice al notar mi gesto.- Me gusta.

A pesar que noto cierta hostilidad en él, le doy una pequeña sonrisa,y pregunto-¿ En que momento me quede dormida?

Papá responde:- Después de hablar con tú madre.

Vaya, también había olvidado ese detalle...

-Salimos del cementerio- continúa el- entramos al auto y cuando estábamos a mitad de camino me percaté que estabas dormida.

Toma un vaso y sirve algo de jugo de naranja hasta alargarlo hacia mi.- Ten, también hay bizcochos por si gustas.

Acepto el vaso y me siento en una de las sillas que están en el desayunador.- Gracias.- exclamo.- pero esta bien con el jugo papá.

Mientras se despoja del delantal a cuadros, veo por la ventana que da directo a la sala, que hay algo que llama mi atención , unas bolsas de equipaje color rojo,  algunas cajas y un estuche de violín. Papá se percata y ve en la misma dirección
- ¿Te vas de viaje?- pregunto señalando con mi dedo índice.

Niega con la cabeza, rodea el desayunador para quedar frente a mi y me observa severamente- ¿Cuándo pensabas decirme?- el tono de su voz cambio, ahora es serio y se que debo decirle la verdad. Pero... ¿Qué verdad?

-No se de que me hablas- inquiri

-La propietaria de esos equipajes es una pequeña peli roja mala y manipuladora - papá arrastra esos adjetivos calificativos con un notorio desprecio.

¡Oh, demonios!

-Tampoco tienes que faltarle el respeto.- refute y papá rio sarcásticamente.- De todos modos, ¿Cuál es el maldito problema?

-No me hables así Marissa.- dice molesto.-Tenías que haberme dicho, por si no lo recuerdas, querida hija,  yo soy el dueño de esta casa.-empuñó las manos enojada y me sorprendo al sentir la pequeña caja, mientras que el prosigue todavía sin perder la compostura.- Por lo tanto, yo decido quien es bienvenido en ella.-dice alzando un poco la voz..

-Es mi abuela.- logró responder, mis palabras sonaron entrecortadas.- Y mientras yo este aquí,  ella será bienvenida.

No estoy segura si la expresión que hizopapá fue de decepción o tristeza, pero no puedo seguir con eso. Decidí volver a empezar y ella es parte de todo.

-Te comprendo si, lo hago.- digo acercándome a él- Pero todo paso muy rápido, ella llamo ayer por la tarde antes de ir donde mamá, iba a decírtelo pero al final lo olvidé.- tomo su rostro entre mis manos y lo veo fijamente a los ojos.-Necesito de tu apoyo.

Antes de hablar, toma unas cuantas respiraciones y Ya un poco más  calmado, asiente levemente y me envuelve en un fuerte abrazo.-Qué quede claro que lo hago por ti.-le devuelvo el gesto y una vez separados, el nota la cajita entre mi manos.-Asi que ya lo viste eh.- agrega sonriente.-Es un regalo de mi parte, es muy especial así que cuídalo mucho princesa.

Asiento viendo el objeto entre mis manos y me abstengo de preguntar.- Su vuelo estará a las 6:30pm.- digo repentinamente; papá pasa impaciente su mano entre su cabello

-Esta bien- dice resignado.

suspiro aliviada y doy la vuelta para regresar a mi habitación y tomar una ducha.

Le prometí a Ber que hoy nos veríamos y la pasaríamos genial, cómo antes, y para el encuentro tengo aproximadamente 4 horas, aunque, hay que tomar en cuenta que no es uno de los seres más pacientes que existen sobre la faz de la tierra, así que tengo en total, 2 horas.

-Marissa.- llama papá antes de que logré subir las escaleras.- Sofía Callaghan...- sonrió levantando brevemente la comisura de mis labios

-Tranquilo, saldrá bien.- Intento calmar las cosas, pero no es algo que esté dispuesta a promete, a pesar de que así me gustaría que fuera.

-¿Sabes?- dice algo pensativo recostado levemente en el desayunador- Es una mujer muy sabia e inteligente, algo digno de reconocer en una persona de su edad, con tantas experiencias...- cruzó los brazos sobre mi pecho esperando el contraste de esas palabras.- Pero esa mujer es un arma de doble filo y no sabes en que momento estará dispuesta a dar todo por ti...- posando sus ojos en mi, los cuales  hace unos minutos estaban en alguna parte de la casa, termina la frase.- o por hundirte

No entiendo porque pensará eso,  conmigo no ha demostrado ser una persona malvada y cínica, siempre ha sido real y completamente sincera. Pero eso no quiere decir que lo que dice papá sea una mentira...

¡Si que te ensañaste con mi familia singularidad!

-No voy a contradecir lo que acabas de decir- digo lentamente- Tus motivos los desconozco, y aunque lo haga, seguirán ahí- Papá asiente- Además, la conoces mejor que yo. Es tu ex-suegra después de todo.

Ríe acercándose a mi, me da un beso en la frente y replica- La única que he tenido, y Dios no fue muy benevolente conmigo.

Después de la pequeña charla en la cocina, papá se despidió de mí. Había tomado un pequeño descanso entre comidas  del trabajo por que quería pasar a verme, ya que estuve dormida aproximadamente 14 horas, lo cual no creí posible, pero el me explico que tuvo que parte en eso, hace semanas se percato de mis pronunciadas ojeras, y que actualmente duermo solo 5 horas diarias. Antes de irse, mencionó el asunto de las clases, aparentemente hoy lo hablaremos y sinceramente no quiero hacerlo.

Será complicado...

Suspiro lentamente y me digo a mi misma.-Solamente tengo que acoplarme de nuevo,volver a ser Marissa, volver a recuperar la parte de mi que hace falta, la parte que perdí hace tiempo, necesito encontrarla, la necesito desesperadamente.... ¿Podré hacerlo?.-su recuerdo invade mi mente- Confía Marissa, confía. Por ahora mantendré altas esperanzas, quiero vivir.

Hey! La familia no puede estar completa sin tus abuelos, ¿no creen?. Bueno, estoy casi segura que Sofía será de su agrado.
Muchassss gracias por leer.
✨💛-moon.

Relatos al Viento.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora