CAPITULO 4: CRUDOS RECUERDOS

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La noche termino para el albino en pequeñas risas, a leer tantos planes que tenían para capturar a ese tal Warren. –nunca cambien muchachos, ojala nunca cambien. Antes de ir al baño, el peliblanco recibió una llamada a su celular, al ver quien era sabía que le esperaba una gran reprimenda. –que hay hermano. El campirano no tardo ni unos segundos en hacer notar su descontento. –hablaremos por mensajes más tarde.

Era claro que su mejor amigo estaba molesto, pero el peliblanco no tenía ganas de hablar de eso así que de una manera rápida y algo amistosa le dijo. –ven al parque a las 9:00 am ahí hablaremos.

El albino ya se esperaba lo que iba a pasar mañana, él tendría que ser un poco más astuto y le diría todo lo que paso, aunque conociendo a su amigo de corazón blando, eso tal vez no lo justifique, pero al albino le daba igual ya que no le importaba perder una amistad con tal de salvar a sus hermanas.

La noche llego y todo el mundo se fue a dormir, mientras que en otro cuarto una castaña mantenía una conversación algo traviesa con un viejo amor. –lista para nuestro viaje corazón. La comediante se sonrojaba cada vez que el la llamaba de esa forma. –si Benny, aunque te recuerdo que es un viaje escolar. El castaño esbozo una ligera sonrisa. –deja que ellos se la pasen cepillando piedras, nosotros descubriremos los límites del amor.

Luan no paraba de sonreír con cada palabra que le decía su amado, pensar que volvería con su antiguo amor lo veía algo improbable y más cuando mantenía una relación algo cercana con su amiga Maggie, es decir ella ya experimento esos sentimiento, pero al final no era algo que le llame la atención, además del comportamiento de sus padres que hizo que matara cualquier sentimiento y relación hacia ella, claro cualquier tipo que no sea de amistad.

Ambos se la pasaron hablando un buen rato, Luan notaba que su pareja no cambio en nada, solo que se volvió más lanzado y menos tímido, pero de ahí seguía siendo ese mismo chico, el muchacho artístico que robo su alocado corazón.

Amaneció en la casa Loud, una pareja ya algo longeva se preparaban para ir al trabajo, tanto el Sr. Loud como su esposa desayunaron juntos y fueron tomados de la mano al Vanzilla, para ir directo al restaurante, todo esto pasaba mientras sus hijos los observaban por la ventana como la pareja partía hacia el trabajo. – ¿no han notado últimamente que mamá está más apegada a papá? Pregunto la reina de belleza. –hermanita creo olvidaste que en esta semana nuestros padres celebran su aniversario. Le respondió la comediante con claras ojeras.

Tanto la deportista como Lincoln recordaban bien por qué sus padres estaban más unidos que nunca. –y pensar que papá actuó igual que mi conejito, se dijo en sus adentros mientras recordaba todo lo que paso.

FLASHBACKS

No era un día común, ya que la matriarca de la casa llego algo triste, saludo a sus hijos y fue directo a su cuarto, todos pensaron que algo malo le paso en el trabajo. –niños ustedes terminen de cenar, yo iré a ver que paso con su madre.

Los hijos sestaban pensativos, pero las mayores ya intuían que algo muy malo paso. Ya entrando en el cuarto, el Sr. Loud pudo ver como su esposa estaba sentada en su cama, mientras con las manos tapaba su rostro. – ¿amor todo está bien? Pregunto su esposo, pero ella ya no pudo contenerse y se lanzó a sus brazos, mientras dejaba escapar todo el dolor, que tenía guardado en un amargo llanto.

El castaño solo pudo abrazar y consolarla, Ella lo vio con una sonrisa falsa, pero en sus ojos era claro que estuvo llorando. –me encantaría decir que todo está bien Lynn, pero no lo está. Una vez dicho la matriarca de la casa no pudo más y dio rienda suelta a su sufrimiento, con un llanto desgarrador que denotaba un gran dolor.

La castaña quien estaba en los ductos, escuchaba cada palabra y se le partía el corazón con cada palabra que decía su madre. –amor el hecho que esos idiotas no supieron valorarte, no quiere decir que tú seas una inútil. Su esposa quien lagrimeaba apoyada en el regazo de su esposo, se sentía un poco mejor. –Rita siempre nos caeremos o equivocaremos, puede que cometamos graves errores e incluso perdamos más de lo que podemos dar, pero eso no significa que es el fin del mundo mi amor.

Ella es mía. (Lynncoln)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora