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Los próximos días van pasando rápido. La prensa se ha hecho eco con el tema de que cada día voy en compañía de ________ al hospital y ya estan haciendo miles de suposiciones: Que si estoy enfermo, que si _______ tiene un embarazo riesgoso y por eso venimos con tanta frecuencia. Y miles más. A veces me sorprende hasta donde es capaz de llegar sus imaginaciones. ¿Qué si es molesto? Es jodido, mucho. Porque lo único que quiero es estar con mi chica en los momentos tan duros que pasa allí y con el acoso de ellos no puedo. Porque me dan ganas de reventarles la cara por lo que dicen- y no duden que ya he tenido alguna discusión con alguno-. Y porque preocupan a mis Beliebers.
Aunque no he estado muy pendiente de las redes sociales ni de ellas, desgraciadamente, si que me he enterado de que andan revolucionadas con todo el tema de mi separación con Alice y repentino regreso con _______, de cómo he rechazado ciertos propuestas en el espectáculo y sigo en Canadá. Y ahora le agregamos que la prensa cada día les llena la cabeza diciéndoles que yo podría estar enfermo o ________ embarazada. Así que la guerra que me encontré en Twitter hace unos días, no es poca.
He dejado varios mensajes de agradecimiento para ellas, y les he dicho que no hagan caso a los comentarios. Yo estoy perfecto y _______ también. Y eso parece haberlas tranquilizado. También les conté que tengo preparado una sorpresa y es cierto. Estoy escribiendo una canción. Para ellas, para mi más grande familia, diciendo como a ellas les debo todo y como nunca las olvidaré, básicamente. Y mientras la releo se siente como si fuese una despedida, pero son los sentimientos que me han salido. Y quizás, también es lo que es. Lo último que escriba para ellas. Lo último que escriba definitivamente en el momento que todo acabe. Que yo desaparezca también.
Aquella mañana me había quedado en casa, _______ se negó a que yo la acompañase porque dice que no quiere prensa, ayer en la noche la vi mal así que estoy demasiado preocupado y no me separo del teléfono por si algo pasa o necesita. Y justo en este momento suena.
- Hola, nena ¿paso algo?- pregunto apresurado y escucho esa risa inconfundible
- ¿Qué pasa contigo, bro? Si no te llamo te olvidas que existo- le escucho reclamar a Alfredo por el otro lado de la línea y sonrío
- No seas marica que te llame hace dos días. ¿Tanto me extrañas?- me burlo
- Uy, no sabes cuanto mi amor- dice fingiendo voz de mujer y soltamos los dos una gran carcajada
- ¿Cómo te va? ¿Qué se cuece por allí?
- Bueno, ya sabes. Lo mismo de siempre, aquí estamos todos bien aunque estamos pensando seriamente si buscarnos otra gente con la cual trabajar- bromea- Scooter nos dijo que no contáramos contigo durante un tiempo, ¿Qué pasa?
- Bueno- digo suspirando- básicamente, aquí tengo cosas muchos más importantes que atender
- Oh- exclama con una mujer- ¡me estas diciendo que no soy importante!- me reclama y río
- Tú eres mi amante, tranquila baby- le sigo la corriente
- Venga tío, cuéntamelo
- Es difícil de explicar- resoplo- han pasado muchas cosas. Sólo sé que ahora no debo ni puedo, ni quiero marcharme.
- ¿Quieres que vaya por allí?
- Eso estaría bien, tenemos muchas cosas que hablar
- Si, bro. Ya tu sabes- dice intentando imitar a Pitbull y río
- ¿Cuándo vendrás, nena?- le digo morboso
- Cuando tú quieras, papi- y volvemos a reír- intentaré estar allí en dos semanas. - dice cuando logra parar de reír
- Esta bien, te esperaré aquí.
- Si, en dos semanas me tendrás por allí. Quiero ver a ________también, no quiero ni imaginar como logró convencerte para quedarte. Esa enana tiene poder sobre ti- dice burlón
- Si que lo tiene, si- murmuro más para mi mismo
- Nos vemos en dos semanas, bro
- Lo estoy deseando- le respondo y después de unas cuantas bromas más, ambos colgamos.
En dos semanas. Quizás demasiado tarde.
*La última frase esta narrada por la escritora.*
