Baby I'm Yours

[5: Uncle Miles]

A L L I E

Alice está como loca esta mañana, y eso solo hace que yo me ponga igual, incluso peor.

Ethan no deja de meter todos los juguetes habidos y por haber en su mochila, a pesar de que le dije que solo lleve un par y mi mejor amiga no deja de tomar té gracias a los nervios, a pesar de que le he dicho que no beba tanto porque va a hincharse.

Hoy era la última prueba del vestido de novia de Alice. Una de las tantas cosas que tienen preocupada a la pelirroja, pues toda la semana anterior hemos estado ocupados en los últimos detalles de la boda que es este sábado.

La ceremonia y fiesta se llevarán a cabo en el Club de Campo de Mountain Gate, ya que Miles es una especie de socio en ese lugar y desde que decidieron que querían que su boda sea al aire libre lo escogieron sin dudar.

Terminó de vestirme y voy hasta la habitación de Ethan, en cuanto entro lo veo metiendo un sinfín de juguetes en su pequeña mochila, a pesar de que ya no caben más.

-Cariño, te dije que lleves un par, no toda tu habitación. -digo arrodillándome junto a él.

-Pero quiero llevarlos todos. -dice haciendo un puchero.

-El tío Miles me ha dicho que tiene preparado una tarde de películas, así que no vas a necesitar tantos. -saco todos los muñecos de la mochila- A ver, descartemos. Escoge dos para que te acompañen hoy.

-Mmmm...-el pequeño examina la situación por unos segundos, pero finalmente escoge a dos- ¡Buzz y Woody!

-Listo, ellos dos entonces. -los meto en la mochila y me la coloco sobre el hombro- Cuando vuelvas ordenaremos este pequeño desastre, eh.

-¡Vamos, vamos, vamos! -exclama con emoción mientras jala de mi mano.

-Bien, bien. Con cuidado al bajar las escaleras. -los dos bajamos y encuentro a Alice aún en la cocina bebiendo de su taza- ¡Alice, te dije que dejes de beber té! Ya van a ser las nueve y media, se supone que debimos haber salido hace diez minutos.

Mientras digo todo eso, busco como desquiciada en dónde diablos fue que dejé mi bolso. Ethan no deja de insistir en que ya vayamos, mi teléfono no deja de sonar, esto es un completo lío. ¡Necesito unas vacaciones urgentemente!

El timbre suena y Ethan se desprende de mi mano para ir a abrir, mientras yo por fin encuentro el bolso entre todo el alboroto de la sala.

-¡Tío Jace! -exclama mi hijo saltando para abrazar a mi mejor amigo.

-Pero a quién veo aquí. El niño más terrible del mundo entero. -se abrazan y él ingresa.

-Gracias al cielo que llegaste. ¡Parece como si tuviera dos hijos! Ayúdame a alejar a Alice de esa taza de té y sácala de una vez, ya deberíamos de estar en camino. - digo y asiente.

-Tú vienes conmigo. - dice sacando a la pelirroja de casa.

Tomo de la mano otra vez al pequeño y cierto la puerta en lo que contesto la llamada del trabajo. Bajamos por el ascensor y entramos en el auto de Jace, quien conduciría hasta la casa de Miles.

En el transcurso Alice nos dice la agenda del día, la cual es larga. Unos veinticinco minutos después, llegamos hasta la residencia de Kane, a la cual solamente pasaremos para dejar a Ethan, pues Miles se ofreció a cuidarlo.

Jace dice que nos esperará en el auto, mientras que nosotros tres bajamos. Miles abre la puerta para recibirnos.

-Hola, cariño. - Alice es la primera en acercarse a saludarlo, se dan un beso en los labios seguido de un abrazo.