Capítulo 3

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Mire a todas direcciones y algunos Aurores estaba hincados, los estudiantes de afuera se despedían, yo mire a Daphne, está tenía sus ojos cerrados mientras balbuceaba alguna especie de plegaria.

Brutus, Natalia y Aryam corrían por todo el pasillo donde habían llegado y se encontraron con varios estudiantes sentados llorando, otros rogando por sus vidas y algunos corrían de un lado a otro, entraron a un pasillo lleno de personas invadidas por el pánico, Natalia sujetó muy fuerte a Aryam pero Brutus se separó del camino para encontrar a sus hermanos, los dos chicos corrieron en su dirección para alcanzarlo aunque no podían muy bien ya que la multitud era numerosa y no podían pasar muy bien, era uno de los pasillos más "transitados".

Hermione estaba en la cámara de los secretos junto a Ron, los dos se acercaron al cadáver del Basilisco para tomar un colmillo. Ron logro sacar uno y se lo paso a Hermione.

— Hazlo tú— dijo, ella lo miro a los ojos un poco nerviosa— confío en ti, sé que puedes hacerlo— Hermione asintió. Puso la copa de Helga Hufflepuff en el suelo, tomo vuelo y sin dudarlo golpeó el colmillo con la copa, de la nada todo el agua comenzó a levantarse, Ron tomo a Hermione del brazo y corrieron hacia la salida pero el agua fue más rápida que ellos así que los baño por completo, estos sonrieron felices y soltaron algunas risas nerviosas, Ron la tomo de las mejillas y le depósito un beso el cuál Hermione correspondió pero abrió poco sus ojos y miro a Draco quien la besaba, esto provoco que se separara

— no puedo... Lo siento— dijo ella

— está bien, no te preocupes

Mi mirada se reflejaba en los hechizos que chocaban contra el escudo pero de repente todo se tranquilizó, no había más. Una luz encandiló a todos los que se encontraban afuera seguido de otra explosión más grande la cuál retumbó por todos los rincones, el escudo estaba desapareciendo rápidamente.

— mi señor...

— ¡Avada Kedavra!— grito Voldemort con furia hacia uno de sus seguidores, este cayó muerto— ven Nagini, debo ponerte a salvó— dicho esto, desapareció

Mi corazón se aceleró cada vez más, mire a Daphne y ella tenía una expresión de horror, le dije que nos fuéramos de ahí pero ella quiso quedarse, se oían los gritos de los gigantes y Mortífagos, en un abrir de ojos todo el patio comenzó a estallar.

— ¡Daphne vámonos!— las dos corríamos mientras los Mortífagos lanzaban hechizos hacia nosotros, mire como un Auror era consumido por las llamas, todo el patio era una zona de explosiones, las torres tampoco se salvaron

— ¡Todos adentro!, ¡Cúbranse!— grito McGonagall

Abraxas

Todos en los jardines miramos como Hogwarts era destruido poco a poco, tome mi varita y estaba listo para la pelea, pero no lo haría en tierra firme.

— ¡Esto no será un juego!, ¡Tenemos que defender Hogwarts!— grito la profesora Hooch— ¡Suerte a todos!, ¡Ahora...!— algunos estudiantes emprendieron vuelo en sus escobas para pelear con los Mortífagos que estaban en vuelo, yo me dirigí hacia el castillo con otros tres

Una chica había sido derribada de su escoba cayendo de varios metros de altura, yo esquivé algunos hechizos, mire detrás de mí y había tres siguiéndome por lo que tuve que pelear.

— ¡Bombarda!— mi hechizo se dirigió hacia ellos pero lo esquivaron, ellos comenzaron a lanzar hechizos, las explosiones daban contra las columnas del colegio

Aradia

Corría escaleras arriba mientras todos gritaban, me detuve un segundo y me di cuenta de que ya estaban peleando algunos, los Mortífagos habían entrado a Hogwarts, sujete fuertemente mi varita.

— ¡Desmaius!— Harry derribo un Mortífago que volaba por las escaleras

Me dirigí hacia el Gran Comedor para tener un buen espacio ya que los duelos se me daban fatal pero no podía dejarme caer en este momento, aquí no habrá segundas oportunidades, es matar o morir. Al entrar ya habían maestros, Aurores y estudiantes peleando, mire a una chica que había sido desarmada y estaba a punto de morir por lo que tuve que ayudar.

— ¡Expulso!— el Mortífago salió volando, la chica me miro y me agradeció pero reconocí al Mortífago... En qué lío me metí, Rodolphus Lestrange volvió a la batalla, sin piedad me lanzó hechizos sin detenerse, yo muy apenas podía cubrirme

Natalia corría despavorida por todo el castillo, había perdido de vista a Brutus y Aryam fue en busca de Aradia, ella estaba sola en ese momento tan crítico, en un pasillo miro a su madre y su padre peleando por salvar su vida, tomo su varita y corrió hacia ellos.

— ¡Expelliarmus!— Remus fue desarmado por Antonin Dolohov— ¡Avada Kedavra!

— ¡No Remus...!— grito Tonks sin poner atención a Bellatrix

— ¡Avada Kedavra!— dos maleficios chocaron uniéndose entre si con una fuerte explosión electrizante, Natalia lo había salvado

— ¡Desmaius!— Bellatrix hizo volar a Tonks— ¡Avada...AHAHAH!— Bella cayó al piso con un fuerte golpe

— No se te ocurra Lestrange— Andrómeda apareció para ayudar a su hija

Brutus corría por los pasillos desesperadamente entre el fuego, cadáveres, explosiones y peleas solo para encontrar a su familia, mientras corría miro a Fred, pero no supo si era George, él no los sabía diferenciar.

— ¡Percy!— grito este muy asustado de que su hermano fuera a morir

— ¡Fred!— Brutus corrió hacia él, miro por una ventana y un Mortífago estaba a punto llegar hacia ellos— ¡Lo siento!, ¡Expulso!— él sabía que no llegaría a tiempo por lo que optó por la segunda opción, Fred no logro cubrirse del ataque por lo que salió disparado del lugar, la explosión hizo que una roca gigante chocará contra un muro haciéndose en mil pedazos, esa roca mataría a Fred

Athenea

Daphne cayó al piso, la Mortífaga era hábil con la varita pero ella no se dió por vencido, se levantó del piso y con heridas graves peleó contra ella.

— ¡Tú puedes Daphne!— grite con todas mis fuerzas, ella no dejo de lanzar hechizos, en uno de ellos lanzó una distracción, su Patronus, el unicornio corrió alrededor de la mujer cegando su visión

— ¡Avada Kedavra!— grito Daphne y la Mortífaga cayó muerta, Daphne por causa del dolor de las heridas también cayó al piso quedando inconsciente

Luna me ayudó contra un Mortífago en lo que yo iba en su ayuda pero antes de llegar salí volando del lugar, atareada trate de buscar al causante.

— Que grata sorpresa— Delphini, se acercó a mí— ya te comenzaba a extrañar

— ¡Maldita Perra!, ¡Avada...!

— ¡Sectumsempra!, Ahora quien es la perra, buena suerte Malfoy— Delphini desapareció

Harry, Hermione y Ron salieron de la sala de Menesteres junto a Draco, Blaise y Goyle, Vincent Crabbe había sido consumido por las llamas del fuego maldito, Hermione le pasó el colmillo de Basilisco a Harry quien a su vez destruyó la diadema de Rowena Ravenclaw, el humo espeso salió de esta, Ron la pateó hacia el fuego dónde apareció la cara de Voldemort gritando de dolor mientras las puertas se cerraban.

Los tres chicos se tomaron un descanso pero Draco y sus amigos escaparon del lugar.

— Solo nos queda un Horrocrux más— dijo Harry

— Mira en su mente, debemos saber dónde está— dijo Ron, Harry se concentró y de pronto miro a Voldemort, este veía a Lucius junto a Nagini

— señor, no sería más prudente... Detener el ataque y buscar al muchacho usted mismo— hablo Lucius con voz temblorosa

— el vendrá a mi ¡Que no lo entiendes!— Voldemort le dio una bofetada— mírame, ¿Cómo puedes vivir a si Lucius?

— lo sé

— tráeme a Severus, que venga ante mí

— ya sé dónde está— dijo Harry tembloroso

Sacrificios y PrejuiciosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora