Capitulo 8

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El par de rubios y el pelinegro se miró con cierto nerviosismo antes de salir de la cabaña, rápidamente sus miradas se enfocaron en el castaño, quien miraba a todos con seriedad.

—Ya lo sabe —susurró Alec hacia los líderes de respaldo.

—¿Quien se lo dijo? —susurró de vuelta Alice, caminando a paso lento hacia el castaño.

—Logan —un bufido escapó de los labios de Alice al escuchar dicho nombre, seriamente, empezaba a aborrecer a ese chico.

—¿Alguien resultó herido? —fue lo primero que preguntó Pan al estar frente al trío, Alce simplemente se alejó un poco, pues él no pintaba nada ahí, dejando que la mirada fulminante de Pan cayera solo en Felix y Alice.

—Una daga fue lanzada en dirección a la cabeza de Kaleb, pero logré atraparla a tiempo —la rubia le tendió la daga a Peter, quien la aceptó con el ceño levemente fruncido.

—¿Te hiciste daño? —preguntó, mirando la mano derecha de la joven, en la que se veía un pequeño y ya seco rastro de sangre; la rubia soltó una pequeña risa nerviosa, mirando su mano, había estado tan distraída que olvidó completamente curarse.

—Lo curare y limpiare luego, no hay nada de que preocuparse —se encogió de hombros con cierta indiferencia, pues la herida ni siquiera le dolía.

—Esto estaba junto a la daga —Felix hurgó en los bolsillos de su pantalón hasta encontrar el pequeño papel, entregándoselo a Pan quien, luego de leerlo, llamó rápidamente a todo el campamento, quienes rápidamente se acercaron hacia donde se encontraba su líder.

—¡Hoy atacaron el campamento! —dijo lo obvio, Alice casi soltó un comentario irónico ante eso, pero se contuvo al ver la seriedad que emanaba Pan —¡no fue hace mucho que volví de la muerte, por lo que la isla aún no está completamente en condiciones, por eso aún es necesario que yo haga los viajes que hago! —explicó —¡se que estamos ahora bajo ataque, pero si la isla no revive completamente yo no seré lo suficientemente capaz de defenderlos, por lo que deberé seguir haciendo estos viajes, aunque no serán mucho, pues solo me queda una zona! —su mirada esmeralda cayó sobre la única mujer —¡tal vez esa es la zona en donde se encuentran los agresores, por lo que puede que tengamos una ventaja si consigo su ubicación!

Nadie dijo nada, pues más de uno se encontraba con miedo, si Pan no estaba, ¿como se defenderían? Pan era su líder, y aunque algunos no lo quisieran admitir (Alice) lo necesitaban.

—¡Mientras no estoy, como ya sabrán, los que quedarán a cargo son Felix y Alice! —nadie se quejó, pues ya se lo esperaban —¡no quiero quejas, ni problemas, ni peleas, ni nada que perjudique al campamento! ¿Esta claro? —Pan recibió la respuesta afirmativa de todo el campamento, algunos con determinación y otros con fastidio —¡perfecto! Alice Felix, se los dejó... iré s hacer cosas de rey —y con un guiño hacia Alice, desapareció de sus vistas, logrando que Alice rodara los ojos, empezando a caminar junto a Peter.

—Tan presumido —renegó, escuchando la suave risa de Felix.

—Pero bien que tienes un crush con el —ante eso, Alice golpeó el brazo de su alto amigo.

—No quiero saber que le mencionaste eso a alguien —amenazo —si lo haces te mato.

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