El Último Año En Hogwarts*

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-No compraremos nada, muchas gracias- Le informo el chico de cabello pelirojo, a la bruja que vendía dulces a lo largo del Expreso de Hogwarts.

-Yo quería una rana de chocolate, Ron- se quejo Harry al ver como Ron le decía a la bruja que no querían nada y cerraba la puerta de compartimento.

Ron ignoro las quejas de Harry y se sento viendo con interés a Harry que parecía que estaba algo pensativo.

El tren iba rumbo ha Hogwarts, llevando al trio de oro a su último año en el Colegio, el cual fue donde se produjo la Segunda Guerra Mágica y donde al fin murió Lord Voldemort.

En la batalla pasaron muchas cosas, Hermione Granger destrulló el horocrux de la copa, Ronald Weasley hablo pársel, Neville Longbottom destrullo la serpiente Nagini con la espada de gryffindor. Y Harry Potter logro porfin vencer al Quien-no-debe-ser-Nombrado el 2 de mayo de 1998.

Ahora era septiembre y Harry Potter decidió acabar el Colegio junto a sus amigos en Hogwarts, ya que la directora McGonagall les concedio a todos la oportunidad de poder finalizar sus estudios, lo único que quería Harry es poder tener un año tranquilo en Hogwarts sin que alguien lo quisiera matar.

-¡Harry! ¿Estas bien?- Al escuchar la voz preocupada de Hermione, Harry salió de sus pensamientos y miro a Hermione.-Te traje una rana de chocolate.

-Gracias Hermione- Abrió la caja y la rana dio un salto hacia Ron, que con un rápido movimiento consiguió atraparla. Al mirar el cromo izo una mueca de rabia.

-¡Escuchad! Harry James Potter -empezó a leer a sus amigos- Harry Potter es la única persona que ha sobrevivido a un Avada Kedavra y es el Salvador del Mundo Mágico, puesto que el 2 de mayo de 1998 derrotó a Lord Voldemort en la Batalla de Hogwarts.

-Impresionante lo rápido que hacen estos cromos, solo han pasado unos meses y ya estoy en un cromo- dijo con rabia, ya que el no había sido el único que había estado luchando para poder ganar y solo decian "Genial, Ganó" como si hubiera sido fácil.

-Harry no pasa nada, solo hacen su trabajo- le dejo Hermione que sabía perfectamente que Harry estaba bastante frustrado. Mientras intentaba acercar su mano al hombro de Harry para tranquilizarlo pero el moreno logro evitarla y se puso a un lado de la ventana.

Ron quiso hablar del tema pero Hermione le echo una mirada y lo único que llego ha decir fue.

-Parece que tenemos que irnos ya, amigo no le des tanta importancia.

-Si Ron es solo un cromo- dijo el pelinegro con un tono frío, que te congelaba por dentro, el cuál dejó bastante impactados a sus amigos- Ahora voy, nos vemos en la estación.

Les dirigió una sonrisa forzada y volvió ha mirar el paisaje por la ventana.

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En otro lado del Expreso Draco se encontraba en una posición como Harry, mirando ha través de la ventana, pero en realidad ensumido en sus pensamientos. Recordando todo lo que vivió y que le gustaría cambiar.

Draco estaba muy agradecido con Potter. Él, quien rechazo su amistad en primer año, ahora le admiraba pero eso nunca lo diria en alto.

-¡Draco! Hemos llegado, y si no quieres que lleguemos tarde, yo en tu lugar me iría levantando.- La voz de su amiga le saco de sus pensamientos y miro un poco avergonzado de nuevo el paisaje exterior y que efectivamente habían llegado.

Pero Draco era un Malfoy y camuflo muy bien que estaba un poco avergonzado y le dijo a su amiga.

-Ya me había dado cuenta, Pansy. No hacía falta que me gritases.

Pansy refunfuño un poco por el comentario de su amigo pero se dispuso a ir a la estación.

¿No sientes como si todo el mundo nos miran de manera extraña?- cuestiono la chica después de un rato de anda.

Draco también se había dado cuenta de aquello, ya que desde la batalla todo el mundo le miraban con asco o enfado, pero no quiso mostrarse afectado por todas esas mirada o comentarios que hacían.

-Pansy pasa de ellos-dijo indiferente

La pelinegra iba ha decir algo pero cambió de tema al llegar a la carreta.

La carreta estaba a punto de arrancar cuando oyeron unos pasos y un grito pidiendo que los esperaran. Se trataba del trio de oro. De inmediato Pansy se paso a su lado y esperaron a los Gryffindors.

-Gracias- dijo Hermione que parecía la única que podía hablar después de la carrera que se habían metido. Los otros dos solo asintieron

-No tienes que agradecer Granger- dejo Pansy- afortunadamente llegaron a tiempo o hubieran tenido que ir caminando hasta el castillo.

Hermione comenzó ha reír, acto que extraño a los tres hombres.

Después se quedaron en silencio, hasta que las chicas estallaron a reír a carcajadas, provocando que iniciaran una conversación hasta la llegada a Hogwarts.

Las chicas fueron hablando todo el trayecto mientras que Ron estubo examinando el cromo que Harry le había dado con tal de apartarlo de su vista.

Por otro lado, Potter parecía estar enfadado por alguna cosa que Draco no lograba descifrar, pero que no tardo en perderse él en sus pensamientos.

El camino se hizo eterno para Harry y Draco por no tener nada que hacer mientras tanto, pero por suerte llegaron al colegio antes de volverse locos.

-Nuevamente gracias por esperarnos- dijo Hermione cuando los cinco bajaron de la carreta y se dirijieron hacía el comedor- no se ni cuanto hubiéramos tardado.

-No tienes que agradecer, Granger- se adelanto Pansy- Por lo menos hemos podido ayudar un poco.

Se separaron al llegar al Gran Comedor, yéndose cada uno a su mesa.

-¿Desde cuando eres amiga de Grenger? -Pregunto Draco

-Vamos, esos tres nos han salvado la vida y nos hablan. Lo menos que podemos hacer es ser amable con ellos- le respondió ella- además ya para que seguir con las peleas absurdas si ambos sabemos de nuestros sentimientos hacia dos de ellos- le dijo mirandolo con sonrisa de tener razón.

Draco apartó la mirada de su amiga y miró hacia la mesa de gryffindor, se fijo en el hecho de que el pelirojo y Grenger saludaban alegremente a sus amigos y en cambio Potter lucía una sonrisa notablemente forzosa y saludaba con una simple cabezada.

*

Harry observaba a sus compañeros hablar pero no tenía mucha intención de él tambien hablar así que se mantuvo al margen de la conversación.

Puso su atención en el discurso de la profesora McGonagall, pero al empezar la selección de las casas busco otra cosa en la que centrarse. Para su sorpresa, o no tan sorpresa ya que llevaba años observandole, su atención la poso el Draco.

Draco miraba con atención a la directora pero Malfoy pareció que advirtió que le observaban, pues se giro y vio como unos verdes esmeraldas le apartaban la mirada.

Después de eso Harry escucho unos murmullos y volvió a prestar atención a la directora.

-Tranquilos alumnos, esta nueva seleción solo será aplicada a los de último curso...

-¿De que habla?- preguntó a su amigo en susurro

-El sombrero seleccionador a hablado con la directora McGonagall -Harry asintió para que continuara- y todo indica que el sombrero a detectado cambios en nuestra personalidad y ha solicitado una nueva seleción.

Después de la perfeta explicación de su amigo se puso super nervioso y volvió su atención a la directora.

-La seleción será ahora mismo, así que cuando escuchen su nombre venga para al frente.

-Comencemos con la selección.....

Bueno pues este ha sido el primer capitulo, espero que os guste mi historia.

~Se despide la escritora de Hogwarts ~