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Jimin no iba a dejar solo a Yoongi, él no se quedaría sentado, esperando que todo lo resolviera su novio; puede que él no fuera el mejor trabajador del mundo, admite que siempre fue cuidado por su padres  y luego mimado por su novio, pero eso no le impediría el crecer y hacer las cosas por él mismo.

Toma su bolso, sus llaves y su dinero después de regar sus preciadas orquídeas y  sale del apartamento, en busca de una oportunidad que ayude en la situación que ellos están pasando.

Con un poco de miedo e incomodidad, tuvo que tomar el autobus en ves de ir en auto, porque claramente, ir en autobus era mil veces más económico. Lo peor era lo lleno que el transporte público se encontraba, pero no tenía otra opción. Por lo que solo se concentró en lo feliz que se sentía por lo que estaba apunto de hacer.

Hoseok, su compañero y amigo del baile le recomendó una empresa, donde pagaban muy bien sin hacer nada en realidad. Según le había explicado su amigo, solo debía probar los nuevos productos que quieren salir al mercado para comprobar su efetividad o su error.

Jimin estaba emocionado, como decía, la paga era buena y esperaba hacer orgulloso a su hyung, demostrándole que ya puede conseguir dinero sin necesidad de su ayuda, pues Yoongi aveces era muy sobreprotector con él y y no es que le molestará; sin embargo, a  veces llegaba a ser demasiado tedioso.

Cuando vuelve a centrarse en lo que pasaba a su alrededor, se entera de que ya está cerca de su destino, y con toda la molestía del mundo, tiene que pasar entre las personas, tocando partes que realmente nunca pensó tocar en su vida.

Al bajarse del autobus, su cabello estaba algo despeinado pero no le importa, corre hasta la entrada del alto edificio y entra, hiendo directamente al lugar indicado.

Al entrar, se encuentra con distintas mujeres y hombres, esperando pacientes a que les indiquen su trabajo, Jimin se sienta en una de las sillas del final con una sonrisa de oreja a oreja.

- Buenas tardes a todos, soy el encargado del nuevo producto que probarán acontinuación - dice, hace una pausa, tomando entre sus manos un pequeño bote - el producto que se pondran es el nuevo bronceador en spray, que tiene una aplicación fácil y rápida. Como saben, el tiempo es limitado y muchos no podemos tomar el sol y hacernos un bronceado y ahora, muchos coreanos quieren dejar de ser pálidos y mantener  una piel ligeramente morena y saludable como la de Hwasa o el rapero RM. Es por eso que trajimos este producto, para un aplicado rápido y sin necesidad de ir a un lugar donde apliquen bronceados. Asi que, pueden probarlos.

Bueno... Jimin no tenía pensado broncearse ese día, sin embargo no le importaba, puede que el bronceado de su piel le guste a su novio y puedan así disfrutar de una noche... apasionante.

Jimin ríe ante sus propios pensamientos, toma el spray que está frente a él y la abre, iniciando a ponerla sobre sus brazos y luego poniendose sobre su rostro con delicadeza, viendo como los demás hacen lo mismo. Al terminar, observa su piel, observando que no hay ningún cambio, por lo que decide volver a ponérselo, observando que no cambia para nada el color de su piel. Vuelve a repetir el procedimiento, enojandose al ver siempre lo mismo y cuando está apunto de ponerse la cuarta capa, el señor habla.

- Deben saber que no es un resultado de inmediato, suele tardarse treinta minutos, pero queremos observar si funciona igual en todas las diferentes  pieles...

No podía ser... estaba jodido.

(...)

Ingresa el código de su apartamento con cansancio, abre la puerta y la cierra con fuerza,  dejando los zapatos en la entrada  y poniendose sus pantunflas.

Truena los huesos de su cuello y espalda y suspira, en ese momento solo quería ser consentido por su Jimin, después de esa gran humillación en la compañia.

- Jimin-ah~

Nadie contesta, le parece demasiado extraño, Jimin siempre lo recibe con los brazos abiertos, hablando sin parar y dándole suaves y húmedos besos  en sus labios y cuello, era raro cuando no lo hacía y cuando no lo recibía así era porque estaba enojado... pero igual, aunque lo ignorara, siempre lo cuidaba dejando sobre la mesa del comedor su cena.

- ¡Jimin! - repite totalemnte preocupado - ¡Cariño!

Camina con un poco de rapidez hacía el cuarto, observándola oscura, cuando está apunto de encender la luz, algo lo detiene.

- ¡No enciendas la luz!

- ¿Qué ocurre? - pregunta, acercandose con torpeza a la cama que comparten, observando ahí el bulto de sábanas- ¿te paso algo?

- S-soy un mounstro, hyung...

- Eso es mentira, eres un
Ángel...

Jimin sale de debajo de las sábanas y abraza por el cuello a su novio, sollozando por lo bajo, preocupando de nuevo a Yoongi.

Sin que el chico se de cuenta, Yoongi enciende la luz de noche que tiene a la par de la cama, sorprendiendo al menor.

- Déjame verte... - dice, tratando de separar al chico de su cuerpo.

- No quiero. Te reirás de mí...

- No lo haría...

- ¿De verdad?- interroga, con voz suave y asustada - prometalo.

- Lo prometo.

Con lentitud, el chico se aleja dejando ver su rostro y su nuevo tono de piel.

- ¿Qué mierda te pasó?

- ¡Hyung!

Y aunque Yoongi lo haya prometido no puede cumplirlo, de su garganta sale una escandalosa risa que hace enojar al bronceado.

- Te odio. - le dice, pegándole con una almohada. - lo prometiste...

- L-lo siento, pero es inevitable - vuelve a reír, sosteniéndose el estómago - p-pareces una zanahoria.

Jimin hace un puchero, cruza sus brazos y deja salir la primera lágrima. Era frustrante que lo primero que intentó hacer solito, no le salió bien, sino que ahora luce un feo bronceado, viendose casi naranja.

- Oh... no llores. - le dice, acercándose y rodeándolo desde la espalda en un fuerte abrazo - ¿Cómo te ocurrió esto?

- Era un empleo, hyung... pero las cosas no salieron como pensé... aunque bueno, recibí el dinero igual.

- ¿Fuiste solo? - bueno, ahora estaba impactado ante el valor de conseguir trabajo de su novio, cualquier persona lo podría secuestrar hayá afuera, el  chico era demasiado lindo - ¿por qué no me dijiste?

- Queria ayudarte, hyung . No me trates como un niño, puedo hacer también cosas solito. Mejor dime... ¿cómo te fue a ti?

- Sólo te cuido, y con respecto a mí... bueno, no me fue bien, me humillaron...

- Oh... ¿quieres hablarlo? - le pregunta, deshaciendo el abrazo y quedando frente a Yoongi.

- No... solo hay que dormir, ¿Si?

- Bien, hyung.

- Te amo, pequeña zanahoria.

- ¡HYUNG!











Hasta aqui este capitulo, espero y les guste.

No se olviden de comentar y dejar una estrellita, es gratis y haves feliz a una persona :3

Nos leemos en un nuevo capitulo.💕

toca ahi.
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• A love full of robberies.| Yoonmin (CORRIGIENDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora