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Despertó a primera hora como siempre, estaba acostumbrada a esos cortos horarios al fin y al cabo nunca sabía cuando debía despertarse para una misión, siempre entrenaba con Steve o con Natasha quienes eran dos personas que despertaban temprano.
Desayuno junto con la profesora McGonagall quien le dio varios consejos para que siguiera y luego se marchó hacia su puesto antes que los chicos despertarán, era una biblioteca inmensa y a pesar que se ordenaban por si solos no venía nada mal una administración por parte de Angel.
Sonreía con algunos libros al ver que eran interesantes pero su tranquilidad fue interrumpida por las voces de alumnos que se dirigian en busca de sus libros, algunos la notaron pero no le dieron mucha importancia ya que sabían porque estaba en la biblioteca. Pero hubieron aquellos que les llamo la atención la  presencia de la “bibliotecaria” ya que su belleza no podía pasarse por alto, un grupo de muchachos de último año murmuraban cosas sobre ella y sonreían coquetamente cada vez que esta los veía. Ignorando las hormonas de los muchachos ayudo a varios niños a encontrar sus libros para estudiar pero de pronto la biblioteca se comenzó a llenar y sorpresivamente de chicos.
Los rumores en Hogwarts corrían rápidos y no cabe duda que la noticia sobre la “bibliotecaria ardiente”, como decidieron llamarla unos chicos de Hufflepuff, llego a oídos de la población masculina.

— Díganme una cosa, esto es normal? — Pregunto a unas niñas de segundo quienes negaron mientras sonreían y se marchaba de allí.

A pesar que no tuvo ninguna especie de palabras con ningún muchacho se sentía algo incómoda pero fue hasta que la profesora Umbridge envío a todos a sus salones antes que se les hiciera tarde. Angel al verla se escabulló entre las estanterías, no quería cruzar palabra alguna con esa mujer porque algo en ella la hacia desconfiar. Sintió su presencia por unos largos minutos pero luego el ambiente se volvió tranquilo, la chica tomando valentía salió hacia la entrada y estaba vacía a lo que soltó un leve suspiro al saber que había logrado escapar de Umbridge.

El resto de las horas fueron tranquilas, habían pocos estudiantes y ninguna señal de dolores lo cual la mantenía aliviada.
Angel hablaba con unas chicas de cuarto sobre unos libros para sus clases hasta que oyó la voz de la profesora McGonagall quien la llamo. Ambas se alejaron hasta un rincón pero la mujer busco algo, más bien a alguien en el otro extremo y se acercó con un chico de lentes que vio confundido a la chica pero perplejo.

— Él es Harry Potter — Dijo McGonagall con una pequeña sonrisa.

— Oh, em un placer? — Angel se confundía aún más por lo que Dumbledore y McGonagall tramaban, por así decirlo.

— Ho-hola soy Harry aún que ya lo sabías — Su presencia lo ponía nervioso por eso hablaba de más sin darse cuenta.

— Soy Angel, profesora McGonagall me gustaría saber a qué se debe está presentación? — Pregunto la chica viendo detenidamente a Harry y luego a la mujer.

No la conocía del todo pero supo que estaba mintiendo, menciono que era un buen estudiante y que lo vería en la biblioteca muy seguido que tal vez sería bueno que se conocieran un poco más para establecer un vínculo de amistad. Al terminar decidió marcharse dejando solos a los dos chicos.

— Entendiste algo? — Pregunto Angel riendo un poco causando que Harry también lo hiciera.

— No, pero algo me dice que hay otro motivo — Dijo viendo como su profesora se iba y les daba una última mirada con una sonrisa cómplice.

Angel sonrió un poco pero sin que Harry se diera cuenta pudo ver su cicatriz, aquella marca que había sido mencionada por Dumbledore cuando le contó el pasado sobre el “niño que vivió”, cuando el chico la vio inmediatamente cambio su mirada para no incomodarlo pero se estaba mordiendo la lengua para no preguntar. Se podría decir que fue salvada por dos amigos del chico, un pelirrojo y una chica quien le sonrió a Angel y la vio algo confundida.

— Creo que mejor seguiré con lo mio, que estén bien — Fue un momento algo incómodo cuando se generó un silencio por parte de los cuatro.

Angel se alejo de ellos un poco pero aún así fingiendo estar acomodando unos libros cruzaba una que otra mirada con Harry quien el muchacho en ningún momento le saco la vista de encima hasta que su amiga, Hermione chasqueara los dedos para que reaccione.



[...]



Ya era tarde y debía ir a cenar, cuando estaba en los pasillos vio a Harry que discutía con un chico rubio.

— Por que no vas a lloriquear la muerte de Diggory san Potter — Se burlo este.

— Cállate Malfoy, tu maldito padre estuvo incluido en su muerte — Respondió Harry muy enfurecido.

Sus pasos se detuvieron cuando vio a Umbridge acercarse a los dos chicos y para sorpresa de la chica trato de mentiroso a Harry uniéndose a Draco quien sonrió con arrogancia al ver que salía con la suya. Angel lo vio con molestia y sin pensarlo se acercó a los presentes.

— Profesora me parece injusto culpar a Harry de algo que usted no oyó — Umbridge dejó ver una enorme pero maliciosa sonrisa.

— Querida acaso oíste la conversación que estos alumnos tenían? Es de muy mala educación oír conversaciones ajenas — Dijo Dolores.

— Si la oí porque he terminado con mis quehaceres y me dirigía hacia el comedor — Angel evitaba estallar contra esa mujer.

Dolores se mantuvo en silencio y luego vio a Harry y a Angel, les dedico una sonrisa algo forzada y les ordeno a los tres que se dirigieran al comedor detrás de ella. Draco se puso frente a los otros dos mientras que Angel se quedó con Harry.

— Estás bien? — Pregunto la chica.

— Sí, gracias — Sonrió el muchacho a lo que Angel imitó su gesto.

Pero no pudo seguir sonriendo cuando veía a Umbridge, con tan solo unas pocas palabras ya no era de su agrado.

— Y a qué casa fuiste parte? — Pregunto Harry para establecer una charla y acabar con el silencio algo incómodo y tenso que había en el ambiente.

— Oh yo, no a ninguna — Dijo Angel algo nerviosa —. Digo, porque no he estudiado aquí.

— A que escuela perteneciste? — Volvió a preguntar Harry con más interés.

— Shield? Sí, Shield es una escuela que muy pocas personas asisten ya que enseña aquellos que son magos especiales...— Harry la vio confuso.

— Especiales?

— Sí, especiales como por ejemplo hay unos que expresan su inteligencia de otra forma más grande...y verde, otros que simplemente se quedan con su vida anterior y las cosa actuales lo superan — Angel intentaba explicarle a Harry con referencias que podían identificar a sus compañeros —. Y otros que a pesar de tener un ego muy grande pueden ser buenos y ayudarte mas de lo que imaginas.

𝐀𝐍𝐆𝐄𝐋 |𝐇𝐚𝐫𝐫𝐲 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora