Capítulo 3

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Singto's POV

Las puertas se abrieron frente a nosotros y decidí hacer el típico saludo tailandés, por educación, a la persona que nos abrió.

Sonreí suavemente al ver a la persona enfrente. Claro que lo conocía.

Gun Atthaphan.

Hace aproximadamente cuatro años había trabajado con él en una serie, aunque nuestros personajes no tenían interacción dentro de la historia, a veces me cruzaba con él en el estudio y compartíamos varias platicas, era un tipo agradable, sin duda.

—Pasen.

Abrió más la puerta para nosotros y tanto Yang como yo decidimos dar un paso dentro del lugar con todo y maletas.

Miré con un poco de curiosidad y volví a esbozar una suave sonrisa; el lugar era bonito. Hoy en día, era extraño encontrar una edificación similar, resaltando que, se veía totalmente remodelado por dentro.

—¡Ah! ¿Ya llegó Yang, Gun? —Preguntó otra persona la cual estaba caminando hacia nosotros con una sonrisa adorable en el rostro. —Le enseñaré su cuarto. —Había terminado de decir eso, cuando se acercó a Yang para darle un pequeño abrazo y revolverle el cabello.

—¡Krist! —Yang vociferó, ampliando su sonrisa. Había olvidado esa sonrisa por completo. Yang era adorable cuando sonreía de esa forma, sus 165 centímetros de estatura también le ayudaban para dar esa imagen.

Alcé la mirada por fin y reconocí también a la otra persona que se había unido a nosotros: Krist Perawat. Era un cantante nuevo de una muy buena disquera, así que, aunque apenas había comenzado con su carrera, ya era bastante conocido. Incluso yo tenía un par de canciones suyas en mi reproductor.

—Oh, tú eres el famoso Singto. —Mencionó, haciendo un pequeño wai, el cual respondí. —Krist Perawat. —Se presentó con una amplia sonrisa y ésta también se la devolví.

—Al parecer no tan famoso como tú. Mucho gusto. —Dije, para hacerle saber que lo conocía, creo que era una forma de halagarlo.

Krist negó con la cabeza y caminó hacia la puerta que había estado abierta durante toda la conversación para cerrarla.

—Nam llegará más noche. Tiene un poco de trabajo, ya saben, es diciembre y su empresa acostumbra a grabar un montón de especiales navideños. —Krist volvió a hablar y tomó la maleta de Yang para ayudarlo. —Vengan, les diré dónde están sus habitaciones. Espero que no les moleste compartir el mismo cuarto. Solo hay tres dormitorios, Gun y yo compartiremos uno, Nam tendrá otro y pensé que estaría bien para ustedes compartir la habitación.

Apenas mencionó eso, una ligera preocupación había recorrido mi espalda, pero en cuanto abrió la puerta del dormitorio me di cuenta que éste era suficientemente amplio y contaba con dos camas matrimoniales y un baño propio. Pensé que solo llegaría a ese cuarto para dormir y bañarme, no más. Podría procrastinar en alguna otra área de la casa para no estar a solas con Yang.

Le agradecí con una pequeña venia e ingresé a la habitación para dejar mi maleta encima de una de las camas. No hacía falta desempacar, estaría ahí por un tiempo muy corto.

—¿Qué les parece si vamos abajo? Gun empezará a cocinar y creo que estaría genial que todos ayudáramos.

La voz de Krist se hizo resonar y asentí de inmediato con la cabeza.

"Lo que sea para no estar a solas con Yang."

Mientras ayudábamos a Gun con la comida me di cuenta de algunas cosas.

Krist es el mejor amigo de Nammon. Lo cual no me sorprendía porque había muchos fans que los shippeaban por ser demasiado cercanos.

Krist y Gun eran pareja. Eso sí que me había sorprendido.

No era que conociera a Krist, pero, en primer lugar, no creía que fuera bisexual y, en segundo lugar, aunque Krist y Gun eran atractivos físicamente había algo que simplemente no cuadraba entre ellos. En fin, decidí no pensar para nada en eso, de cualquier forma, no me incumbía en lo absoluto su relación y debía admitir que se veían enamorados.

Me habían contado brevemente su historia. En pocas palabras, Gun conoció a Krist y lo vio como un "reto", y al parecer lo cumplió con honores pues hoy en día eran pareja. Krist había dicho que nunca había pensado que Gun fuera su "estilo de chicos", pero que al conocerlo ignoró todo lo que él había creído que le gustaba.

En cuanto dijo aquello, mis ojos se dirigieron a Gun para examinarlo un poco, era tremendamente lindo, su cuerpo era pequeño y delgado, piel blanca, labios gruesos, ¿ese no era su tipo? ¿Entonces cuál era?

El sonido del interruptor sonó y Krist caminó de inmediato a él para responder; era Nammon. Krist se notaba emocionado, por supuesto que sí, incluso yo cuando veía a Namtan era sumamente feliz, ver a mi mejor amiga no era tan fácil como debería de serlo.

Nammon ingresó instantes después por la puerta y gracias a la cocina abierta con la puerta principal frente a mí, pude verlo directamente.

Si era sincero, Nammon era uno de los actores con los que me gustaría actuar algún día; era bueno en lo que hacía.

—¡Hey! —Nammon llegó a nosotros con una amplia sonrisa y primero saludó a Gun, luego a Yang y hasta el último a mí, pues yo era el único en esa habitación que no lo conocía en persona. —¡Tú eres Singto Prachaya! —Se había parado enfrente de mí y me estaba observando con detenimiento, demasiado detenimiento en realidad. —Hm, eres como cien veces más atractivo en persona. Me gustan todos tus dramas, son un gran fan, ¿sabes? Me he visto todos, no sabía que Krist te conocía. ¿Por qué no me lo presentaste antes, Krist? Sabes que admiro mucho a Singto. —Preguntó esto último dirigiendo su mirada hacia Perawat y yo solo sonreí de forma nerviosa y halagada.

La presencia de Nammon había relajado mucho el ambiente.

Otra de las cosas novedosas de las que me había enterado, era que Gun y Yang eran mejores amigos, lo que sin duda significaba una cosa: Gun conocía toda mi historia con Yang.

¿Qué estaría pensando justo ahora al saber que accedí a acompañar a Yang a pesar de que ya tenía novio?

Cuando la mesa estuvo lista, todos nos sentamos alrededor y comenzamos a hablar de cosas triviales. Por ejemplo, signos zodiacales, música, algunas metas en la vida.

—¿Cuál es tu lema de vida, Singto? Todos ya dijimos el nuestro menos tú. —Me apuntó Krist con el tenedor, fingiendo ser amenazante, aunque solo ocasionó que soltara una pequeña risa.

"¿Mi lema de vida?"

Tenía uno, pero decirlo en voz alta me iba a hacer sonar mal, pues no todas las personas lograban entenderlo bien.

—No creo que sea lo mejor decirlo. —Respondí con sinceridad y Gun alzó sus ojos para verme directamente.

—¿Acaso es algo como: "Jugar con las personas hasta cansarte"? —Preguntó Gun de una forma sarcástica.

Krist le dirigió una mala cara e imaginé que, por debajo de la mesa, le había dado algún golpecito pues una mueca se hizo presente en el rostro de Gun. Decidí no responder y continuar con la comida en mi plato.

"Primero tú, antes que los demás."

Ese era mi lema de vida y me había salvado de muchas cosas y situaciones.

No me consideraba a mí mismo alguien cruel, egoísta o individualista. Ese lema de vida, se podía entender de formas muy diversas y para mí, era de la forma más positiva posible.

Un par de cosas tontas más para platicar y ya me encontraba en mi cama, acostado y dispuesto a dormir.

Al menos a Krist y a Nammon parecía agradarles. 

Sun & MoonlightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora