LA MANO OSCURA

Capítulo 6

Mientras me dirija a las oficinas del periódico de Nebreand, los investigadores buscan por todas partes la cabeza de la persona descuartizada. Entre tanto en una de las estaciones de policía de la ciudad el Agente Elkin Porras que se encontraba en turno y atento a las noticias del día. Atiende una llamada diciendo — Estación de policía, en que podemos ayudarlo —.

— Vengan de inmediato a esta dirección 17ª Sur 8B Barrio Jardín —.

— ¿Qué sucede en ese lugar? —le dice el agente, mientras escribía la dirección en un papel.

— Describirlo lo que acabo de ver es imposible. Lo único que puedo decirle es que hay la cabeza de un hombre en la mitad de la calle.

— Está bien enviare de inmediato una moto patrulla a ese lugar.

Cuando el Agente Porras intenta preguntar al ciudadano su nombre, este ha colgado. El agente se comunica de inmediato por su radio con una moto patrulla para que llegue al lugar. Una de ella contesta diciéndole — Soy el Agente Palma, estoy cerca a ese lugar. Ir con mi compañero el Agente Hernández—.

— Manténgame informado —les dice el Agente Porras.

En ese preciso instante entra otra llamada, El Agente Porras contesta diciendo — Estación de policía —.

Del otro lado de la línea se encuentra una señora un poco nerviosa y le dice — Mande unos agentes a esta dirección —.

Como el Agente Porras no entiende muy bien lo que le dice la señora, él le dice — Señora puede tranquilizarse un poco, para que me diga que sucede —.

Al salir al barrer la terraza de mi casa, acabo de ver la cabeza de un hombre metida sobre un palo o lanza, mande a alguien de inmediato a esta dirección 17ª Sur 8B Barrio Jardín —.

— No se preocupe acabo de enviar una moto patrulla a ese lugar.

El Agente Porras al colgar, se comunica con el Agente Palma por radio y le dice — Ya llegaron a la dirección que le dijes —.

— Vamos en camino.

— Acabo de recibir otra llamada de ese lugar.

— Está bien, te mantendremos informados —le dice el Agente Palma.

Después de tres minutos los Agentes Fernández y Palma, llegan al lugar. Al bajarse de la moto, observan una aglomeración de personas curiosas en la mitad de la calle observando con cara de espanto y horror lo que se encontraba allí. El Agente Palma junto a su compañero, se abre camino entre las personas, para saber qué era lo que tenía a tanta gente en ese lugar.

Al estar dentro del círculo creado por las personas curiosas que se encontraban allí, observan la cabeza de un hombre enterada sobre una lanza y corriendo por este una línea de sangre que llega al final de un pote de leche lleno de cemento y con el dibujo de una mano negra pintada en el frente. A los Agentes la escena que venía les parecía saca de alguna película de terror.

El Agente Fernández después de observar por un instante el horrible hallazgo, lleva su mano a la boca para aguantar las ganas de vomitar, pero no pude contenerlas por mucho tiempo, para no contaminar la escena del crimen, corre rápidamente hacia uno de los postes de la calle y vomita.

Entre tanto el Agente Palma toma el radio que lleva puesto en la parte derecha de su uniforme, y se comunica de inmediato con Agente Porras, y lo informa de lo hallado.

El Agente Porras después de ser informado, llama de inmediato a la estación de policía para que lo comunique con el Teniente Avendaño.

El Agente Palma después de infórmale lo encontrado en ese lugar a el Agente Porras, camina en dirección hacia su compañero y al acercase a él le dice — Te siente mejor —.