Jaula De Oro

17.- ¡Días felices!

Elizabeth paso una semana en la hacienda de Meliodas, lo ayudaba en todo lo que podía, se acostumbro tan rápido a su ritmo de vida que amo completamente la vida en el campo, pasear a caballo, plantar flores, entre otras cosas que a ella le gustaba y podía hacer cuando le plazca era de verdad una maravilla.

En las noches en la comodidad de la habitación de su rubio cada día aprendía más cosas con el y le fascinaba.

Llegó el último día del año, Elizabeth y Meliodas dejaron la hacienda desde temprano para pasar la última noche con la familia de ella

Las horas pasaron tan rápido que se encontraban ya en la cena.

Ella con un vestido negro entallado en corte de sirena con detalles dorados, con escote en forma de corazón que moldeaba perfectamente sus grandes pechos, Meliodas fascinado con ella no quitaba su mano de su pequeña cintura.

Platicaron, brindaron con los invitados se desearon lo mejor y continuaron la velada

Las parejas formadas por Harlequin y Diane, Ban y Elaine y Meliodas y Elizabeth quisieron ir a ver el amanecer, así que pusieron marcha en la camioneta de Ban y fueron a la playa, tenían una nevera con bebidas y algunos bocadillos que tomaron de la casa de los Liones.

Mientras esperaban el salir del sol continuaron platicando y pasándola bien.

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Su cuenta regresiva y el sol salió, una bella imagen sin dudar.

Aprovechando el paisaje no dudaron en tomar la foto del recuerdo.

Y así felices y satisfechos regresaron de nuevo a la ciudad.

Elizabeth y Meliodas se quedaron en casa de los Liones y las otras dos parejas se despidieron de ellos y se fueron a sus respectivos hogares.

Elizabeth dejo que Meliodas duerma en su habitación con ella, se cambiaron y fueron a la cama.

Ella por pena no quiso hacer ningún acto sexual con el en su casa, el por supuesto que la respeto y abrazados durmieron plácidamente en aquella gran cama.

*Dos meses después*

El día de San Valentín era un caos en todos lados, muchos compraban rosas, chocolates entre otros detalles

En la escuela de Elizabeth realizaron un festival del amor

Había una puesta en escena del teatro de la famosa obra de Romeo y Julieta, una feria de bocadillos, marcos de corazones, y una "Boda falsa".

Elaine era la encargada de cocinar los pasteles y postres junto a otras chicas más.

Diane por su parte se encargaba de convenser a las parejitas de "casarse" y Elizabeth era la protagonista de la obra de amor trágico, encargada de dar vida a Julieta.

Portaba un vestido de la época donde ocurrió aquel trágico amor, su cabellera larga estaba trenzada y estaba maquillada para la ocasión.

Se encontraba tranquila y segura porque había aprendido perfectamente sus diálogos, lo único que tenía algo de nervios era el beso al final.

La obra se realizaría al final del día, con la cuál culminaria aquel día dedicado al amor.

Por el altavoz anunciaron que la obra iniciaría.

Elizabeth estaba preparada junto a sus demás compañeros, pero lo que no sabía es que su rubio iría a verla.

Llegó junto con Ban y Harlequin justo cuando anunciaban la primera llamada de la obra, la primera que vieron fue a Diane.

Harlequin le había llevado un ramo de flores y chocolates lo cual ella recibió encantada.

Elaine estaba terminando su turno en la pastelería, estaba quitando su delantal cuando escuchó a varias chicas gritar emocionadas, no le dio importancia ya que quería llegar pronto a ocupar lugar para ver la actuación de su amiga, se quitó la malla del cabello, se lo peino, se miro al espejo para verificar que todo estuviera en orden y al mirar su reflejo detrás de ella estaba él.

-¡Ban!-

Mencionó emocionada, se dio vuelta y lo abrazo, el por supuesto la recibió encantado, le entrego un libro y una cajita de chocolates.

Elaine no pudo evitar gritar de alegría.

Los cinco se dirigieron rápido al escenario donde se realizaría la obra Meliodas estaba entusiasmado por ver la actuación de su bella novia.

La tercera llamada sonó y ellos estaban tomando ya sus lugares, lograron encontrar en la tercera fila.

El reflector dio al escenario y con ello la narradora salió y comenzó la obra.

-Julieta Capuletto, pertenecía a una familia rica y poderosa....-

Junto a la descripción de quién era Julieta, Elizabeth aparecía en escena.

Meliodas se maravillo al verla con ese vestido antiguo y tan radiante.

La obra avanzaba y Elizabeth mostraba tener talento para actuar.

Cuando se acercó la parte final donde ella debía beber una copa y fingir estar muerta se preocupo un poco, ya que después seguía aquella escena del beso.

Nuevamente en escena Elizabeth yacía en una cama tipo ataúd con flores alrededor, el chico que actuaba como Romeo hace su papel a la perfección, ve a Elizabeth acostada, ve la copa tirada en el suelo, supone lo que ella había hecho y el en recompensa bebé de la copa, le da el tan asiado beso, y muere a un lado de ella.

Con esta escena final todos se ponen de pie y aplauden, el telón se cierra y a los segundos vuelve a abrir con todos los actores en escena tomados de la mano, Elizabeth junto al chico que fue Romeo sonríen satisfactoriamente, el chico parecía estar muy emocionado por todo se pone frente a Elizabeth y en medio de todos los aplausos le pregunta.

-Eh estado enamorado de ti Elizabeth y hacer este papel contigo fue lo mejor que me pudo pasar, porfavor ¿Te gustaría ser mi novia?-

Algunos soltaron un *aaawwww* tiernamente en cambio Elaine y Diane vieron con preocupación a Meliodas quien no dudo en hacerse paso hasta llegar a la escalera y subió al escenario.

-Lamento decirte esto pero Elizabeth Liones ya tiene novio, y lo estás viendo justo ahora.-

La gente estaba sorprendida, murmurando cosas.

Elizabeth al oír la voz de su rubio miro hacia el, se acercó rápido y lo abrazo.

-¡No hagas nada por favor!-

Meliodas miro la mirada suplicante y llena de miedo de ella, obviamente eso pudo más que sus celos, la beso en la frente y le sonrió.

-Estuviste increíble, vi la obra completa, ¿Nos podemos ir ya?-

Elizabeth sonrojada asintió con la cabeza. Miro hacia su compañero y le sonrió.

-Lo lamento pero la respuesta es no.-

Tomando su mano bajo con el las escaleras, se acercaron a sus amigos y Meliodas le entrego el ramo de rosas que había llevado para ella.

Paso a paso se alejaron del escenario y acompañaron a Elizabeth a cambiarse, pues aquel día lleno de sorpresas recién comenzaba.