Treinta y Tres

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Supongo quedarnos dormidos a la interperie con nuestras ropas húmedas, no fue la mejor elección.

Las noches en Paoz son frías.

Pero, estábamos tan cómodos acurrucados, tan a gustó, como hacia días no lo estamos que no nos importo.

Mala decisión, Milk enfermo.

Cuando desperte, apenas estaba amaneciendo y la vi, pegada a mi pecho tenía la ropa húmeda al igual que yo por el rocío de la noche, su piel estaba más pálida de lo normal, sus labios morados, estaba helada.

La nombre no despertó, la moví un poco, no hubo reacción. Mi corazón se paró en ese momento, me mareé, tenía ganas de vomitar, me dolía el pecho, me sentí desfallecer.

La sacudí eufóricamente mientras la nombraba, ella apena abrió los ojos.
La tomé en brazos, siquiera se de donde saque fuerzas en ese momento.

Corri hacia nuestra casa, abrí la puerta de un golpe, aún no entiendo cómo no la derribe.

"Cariño, no me siento muy bien"

Apenas se escuchó ese susurro de sus labios y se apretó mas a mi.

Estaba desesperado.

Entre al baño y puse a correr el agua caliente, la sente en la taza del retrete y empece a desvestila sin siquiera pensarlo dos veces. Su piel estaba helada, ella detuvo mi mano cuando en mi desesperación trate de bajarle el bretel del sosten.

Debo decir que en ese momento solo buscaba que entre en calor, nada perverso o mal intensionado habia surgido en mi cabeza.

Volvi a tomarla en brazos, aun conservaba su ropa intima y la sumergi en el agua, ella temblaba de frio y aunque yo estaba igual no me importo.

Me mantuve arrodillado al lado de la bañera, controlando el agua y que no se descompensara.

Cuando vi que su cuerpo entro en calor, y ella se encontraba estable.
Me dirigi a la cocina, tenia que tomar algo caliente con urgencia y no solo ella.

Todos saben que soy muy malo a la hora de cocinar, pero hice mi mayor esfuerzo y al menos no destrui la cocina.

Lleve a Milk a nuestra habitación no se veia nada bien, ella procedió a vestirse mientras yo buscaba el caldo que habia prepado, en mi opinión no estaba tan mal y serviría.

Comimos en la cama, estaba afiebrada y débil. Ella decia que solo era una gripe por enfriarse. Pero eso no hacia disminuir mi preocupación.

Y la peor parte, fue cuando sono el tiempre. Ox Satan habia llegado de improvisto a visitarnos.

Por favor!

A quien se le ocurre venir tan temprano!!!

Milk se encontraba dormida asique tuve que contarle de su estado.
Algo que no me hacía sentir orgulloso después de prometerle que la cuidaría

Me fruncio el ceño y subio a nuestra recamara, sin quisiera pedir permiso...
Luego el de los malos modales soy yo.

Fue directo a despertarla y eso me hizo molestar. Era importante que ella descansará. Me quedé en la habitación, pero solo me ignoraba, sentía hostilidad de su parte hacia mi persona.

Lo mejor era dejarlos e irme a bañar, lo necesitaba con urgencia.

Cuando salí de mi largo baño encontré a Milk sentada en la cama con la cabeza gacha. Se me estrujó el corazón quería correr a ella y preguntarle qué pasaba, que le dolía.

Pero, vi a Ox. El estaba metiendo ropa de Milk a un bolso

Trate de respirar, en mi confusión.
Me acerque a ella, tome su rostro entre mis manos hice que me mirara, definitivamente estuvo llorando,
"Quieres que vayamos por un médico?" Dije.

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