Capítulo 8 (Final)

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–Si sabes que me gustas ¿qué es lo que te hace tirar la toalla antes de empezar? –le reprochó en el mismo tono.

Kyungsoo se sorprendió de aquella confesión indirecta, sus mejillas se tornaron de un leve rosa. El alto ni siquiera había sido consciente de lo que había dicho y al darse cuenta se avergonzó, pero se mantuvo firme.

–Que dos personas se gusten no significa que deban salir, pueden no ser compatibles. Tú necesitas a alguien que te lea, que sepa lo que piensas con solo mirarte y yo no sé hacerlo, me agota. Vivo preguntándome qué quieres que haga y solo cuando es putamente obvio me entero –se quejó llevándose las manos al rostro.

Chanyeol se quedó mirándolo y desvió la mirada molesto. Aquello era una verdad que no le gustaba escuchar, Sehun se lo había dicho muchas veces pero no era algo que pudiera cambiar con solo quererlo. Aún así, sentía que con Kyungsoo había cambiado poco a poco, él lo notaba y además, no estaba de acuerdo con lo que dijo.

–Te he invitado muchas veces a salir y hasta hace poco que empezaste a quedar conmigo, he intentado ser cercano a ti, sí que me cuesta dar un paso más íntimo pero... Me rechazaste ir al cine un montón de veces, ahí fui claro.

Kyungsoo asintió sabiendo que tenía razón en eso.

–En ese momento solo hablábamos de clase, nuestras conversaciones no llegaban a nada y no éramos capaces de continuarla, no quería que nuestra relación se volviera aburrida si quedábamos fuera. Pero aún así, al final hemos quedado varias veces y me lo he pasado bien no es por ahí a dónde quiero llegar.

–¿Y adónde es? Sé que soy lento, que dudo, pero tú si sabes leerme, creo que sabes lo que quiero incluso antes de yo saberlo.

–No lo sé, lo intuyo –respondió.

–Pues sigue intuyendo.

–¿Tú si quiera sabes qué es lo que quieres? –le reprochó Kyungsoo molesto. Para el alto todo parecía ser muy sencillo cuando en realidad era el que más dudaba y eso le molestaba.

–¿Pero tanto te agoto? –preguntó realmente apenado. Kyungsoo lo miró afligido y negó.

–Me encantas más de lo que me agotas, simplemente no sé que quiero, ni qué hacer, debería estar feliz porque por fin tengo tu respuesta, pero no lo estoy y no sé qué hacer para estarlo.

Chanyeol también necesitaba pensar bien en todo lo que había pasado, pensar en la conversación pero sobre todo en las palabras de Kyungsoo.

–Me gustas –se confesó Chanyeol. El moreno lo miró, sus ojos estaban aguados–. Solo recuérdalo mientras piensas, está mal dejarte con el peso de todo, pero yo tengo claro que nunca he estado tan nervioso y extrañamente cómodo como contigo.

Aquellas palabras hicieron que las lágrimas que Kyungsoo llevaba reteniendo en sus ojos, se deslizaran por sus mejillas, en seguida se tapó el rostro, dejándolo entre sus rodillas. Chanyeol sonrió tiernamente y armándose de valor, acarició su pelo y con la otra mano le hizo mirarle.

–Tú ya te habías confesado hacía unos años, te acuestas con chicos cada fin de semana, me rechazabas la mitad de veces que te invitaba a algo pero luego soltabas indirectas y me confundían –explicó –pero te gusto, y eso es una duda menos en mi vida, te gusto, estoy más guapo que antes y querías acostarte conmigo, ya tengo suficiente información –se rió. Kyungsoo se avergonzó, solo había repetido sus palabras pero escucharlo todo de seguido le hizo sonrojarse. Él era consciente de que lo había mareado mucho pero no sabía a dónde quería llegar.

–No te sigo... –murmuró sorbiendo suavemente su nariz.

Chanyeol se inclinó y le robó un beso, el moreno cerró los ojos atontado por aquel magnetismo, su cuerpo le gritaba que se aferrara a su cuello pero simplemente no podía moverse.

Clase Particular [Chansoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora