EL INTERROGATORIO

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No le dio mucha importancia a que la profesora de matemáticas, Marlene, no estuviera en el entierro; aunque en su mente sabía que algo no iba bien. El silencio incómodo de la llamada se le quedo en su mente durante toda la noche de aquel día tan duro.

Se levantó como todas las mañanas, cogió su mochila y se fue al instituto. Cuando llegó estaba el profesor en la puerta del centro, miraba para todos lados como si estuviera buscando a alguien. Cuando la vio aparecer, la saludo y se la llevo a la sala de profesores.

-Sofía, hoy vendrá la policía a interrogar a todos los alumnos del instituto. Tú también estas entres esos alumnos, así que a ti también lo harán.

-No tengo nada que esconde, nada que no sepa las personas de este instituto –Dijo con cierta reprimenta.

-Ya lo sé, pero puede llegar a ser bastante duro hablar de tus hermanos en la situación que te encuentras.

- No tengo nada que esconder- dijo, cogió su mochila y se fue a su respectiva clase.

En la clase siguiente, le tocaba junto a sus hermanos, el hueco donde se sentaban estaba vacío, parecía que todo faltaba en la clase. Muchas veces su imaginación le hacía malas jugadas, recordando las risas de sus hermanos que retumbaban por toda la clase. Justo en ese momento entro el policía que había estado en su casa.

-Buenos días, ¿está Sofía Martínez en esta clase?

La profesora respondió:

-Sí, enseguida la acompaña.

Sofía se levanto, cogió su mochila y acompaño al policía. Ella sabía que le tocaría hablar, pero una cosa tenía clara que ella no iba a contar el número que encontró en aquel papel. Entro a la sala de profesores y se encontró con un hombre sentado en una mesa. Sofía se sentó en frente del comisario, le empezó a hacer preguntas y ella respondía con total sinceridad.

-Bueno, estamos casi acabando el interrogatorio, ¿señorita tu sabes algo que nosotros no sepamos?

-No, yo no sé nada más, lo único que sé es lo que se comenta en el pasillo.- dijo ella sabiendo que le estaba mintiendo al comisario.

El comisario le dijo que podía volver a su clase. Mientras que regresaba a su clase pensaba que le había mentido a la policía y que si la descubrían la podían acusar de ocultar pruebas a la policía. Cuando regreso a su clase, todo transcurría con normalidad, aunque sus compañeros tenían intriga de lo que había ocurrido en aquella sala.

María, su mejor amiga, le pregunto si todo había ido bien a lo que ella respondió que sí. El día transcurrió con normalidad, llego a casa encontró a su padre y a su madre sentados en la mesa esperándola para comer. Ya había pasado una semana desde que alguien intentara matar a sus hermanos, acabando con la vida de Daniel, su hermano del medio. Todo volvió a la normalidad, pero aún se notaba el vacío que había dejado la muerte de su hermano y el mal estado que tenía su hermano Lucas, que aún seguía en cuidados intensivos.

El asesinato de la familia Martínez.Where stories live. Discover now