Princesa - Marigami

Familia

Kon'nichiwa imōto (Buenas tardes hermanita)- saludo con una leve sonrisa una pelinegra, con otras tres personas detrás de ellas

Tomoe Tsurugi tenía muchos arrepentimientos en su vida, entre ellos estaban: haber aislado a su hija, dejar que su familia controlara casi toda su vida y no haberse ido con Akiko cuando tuvo la oportunidad. Y a esa lista súmenle haber abierto la puerta 

-No hablo japones- dijo después de nos segundos de silencio, cerro la puerta y se dispuso a olvidar a los cuatro humanos afuera de su casa

-Tomoe Tsurugi! Kyōdai o mushi shinaide kudasai! (¡Tomoe Tsurugi! ¡no ignores a tus hermanos!)- ordeno la anciana escuchando como los pasos de alejaban

La mencionada no detuvo sus pasos pese a los gritos de su madre

-Tomoe, honkidesu! (Tomoe ¡estamos hablando en serio!)- grito su "queridísimo" hermano mayor

Ichiro siempre fue algo molesto, siguió caminando, solo escuchar su voz hizo que le doliera la cabeza

-Sono tobira o hirakenaito... (Si no abres esa puerta...)- la voz de su madre sonó mas amenazante

Terminar su taza de té sonaba bien, bastante bien

-Anata wa kono kazoku no ichiinde wa arimasen! (¡Ya no eres parte de esta familia!)- termino Ichiro

Igual ella no era parte de esa familia desde hace ya un buen tiempo

-Tomoe, sā (Vamos Tomoe, abre)- dijo la voz mas tranquila de Kenta, su hermano menor

-Imōto shite kudasai (Hermanita, por favor)- esa era Hikaru

Dejo de caminar y simplemente se quedo parada donde estaba. Debía abrir ¿cierto?, porque o sino era una cobarde ¿cierto?, si se ponían molestos podía echarlos ¿cierto?

Esta no iba a ser una conversación agradable, nunca lo era si todos estaban involucrados

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Caeli analizo que podría hacer para seguir cortejando a Kagami, pero mientras no fueran a clases de esgrima realmente no podía hacer, excepto enviar flores a su casa. Al principio pensó en ir personalmente a dárselas, pero la Sra Tsurugi le daba un aura de odio y francamente su atracción no llegaba al punto de querer enfrentarse a la temida mujer

Así que decidió que lo mas sensato sería esperar a que Kagami las recibiera y después le mandaría un mensaje para asegurarse de que las recibió, es decir, no era lo mas "romántico", pero ya casi terminaba el año y estaba un 80% segura de que cuando este terminara la asiática se distanciaría de ella. Y si no quería perder debía tomar medidas algo drásticas

Y esas medidas consistían en darle un regalo diario, de verdad esperaba que esto funcione, le estaba costando caro

"A este ritmo tendré que dejar las clases de esgrima si quiero terminar de pagar la universidad" pensó para si misma después de revisar su cuenta bancaria

Pero bueno, las flores llegarían a la residencia Tsurugi, ¿que podía salir mal?

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Marinette estaba tranquilamente recostada en el sofá con Kagami durmiendo sobre ella, en algún punto la asiática decidió que ver la película era aburrido, así que se apoyo en su novia y antes de que se diera cuenta se durmió. Marinette no tenía ningún problema con eso, una de sus cosas favoritas era sentir el cuerpo de su novia apegado al de ella, mientras descansan pacíficamente sin que nadie las interrumpa