— ¿Alguna vez has considerado conocer al chico al que le hablas?—, inquirió Louis.
Suspiré, sacudiendo mi cabeza. Realmente pienso que mi mamá no me dejaría ya que tengo dieciséis. Si ella supiera de la idea de mí estando en otro país conociendo a un chico que es mayor que yo. Se volvería loca.
—Dudo que mi mamá me deje.
—Bueno, yo iré contigo—, sonrió Louis. Su sonrisa era tan grande que hasta le alcanzaba las orejas.
—Solo porque tú vayas no significa que me deje ir.
—Mira, voy a convencer Mamá Horan—, guiñó un ojo y salió corriendo de mi habitación.
Rodé los ojos ante su comportamiento infantil. No obstante, me levanté y lo seguí. Pude escucharlo llamar —. ¡Mamá Horan!
— ¡Deja de llamarla así!—, le pegué en la cabeza en cuanto nos encontramos en el comedor.
— ¿Sí, Lou?—, contestó mi mamá.
Ella estaba en la cocina haciendo la cena. Preferí dejar que Louis haga todo por sí solo. Mis padres siempre tuvieron esta extraña cosa que cuando yo pregunto me dicen que no, pero si uno de mis amigos pregunta ellos dicen que sí. No lo sé hombre, creo que ellos son bipolares con este tema.
—No lo sé, Louis. Niall sólo tiene dieciséis, es muy joven para viajar.
—Piensa sobre esto, Maura, él visitará varios colegios. Además, obtendrá experiencias educacionales junto conmigo—, relató Louis con falsa emoción.
Bufé. Era un muy pobre intento por parte de Louis para convencer a mi madre. Mi amigo sonaba como un vendedor ambulante intentando vender algo que claramente no tenía ninguna ventaja. Ya casi podía ver a mi madre negando con la cabeza.
—Está bien, ¿cuándo planean ir?
—El próximo viernes—, contestó Louis con una sonrisa ganadora.
¿Mi mamá de en serio estaba dejándome ir? Oh por Dios, Louis hace milagros.
—Veré si consigo tickets para Cheshire—, me avisó Louis.
Lo miré sorprendido antes de saltar sobre el sofá y abrazarlo.
Voy a conocer a Harry Styles.