Los Valdez

Capítulo 1

- ¿No crees que pasaría nada, no? O sea él es un profesor y yo soy una alumna, pero él no es mi profesor y apenas me lleva seis años. No pasará nada si salgo con él,  ¿no?

- ¿Por qué me estás hablando de tu vida privada?

- Te estoy preguntando. ¿Nunca te lo has preguntado? ¿Qué pasaría si te enamoras de una alumna?

- Yo no me enamoro.

- Ay que botado -bufé- Pero no crees que pase nada, ¿no?

- No lo sé -él sonaba fastidiado. Sabía que no quería escucharme hablar de mi vida romántica- ¿De quién estás hablando?

- De Mathias -lo miré mal. Se lo había repetido varias veces, se notaba que me había prestado bastante atención.  Él pareció sorprendido.

- ¿Mathias,  mi primo?

James me miró a los ojos. ¿Desde cuándo él y Mathias estaban relacionados?

- ¡¿Mathias es tu primo?! -exclamé.

- Creí que eras inteligente. Universidad Católica de Chamuel, castaños, oligarcas, Valdez. Pura lógica. 

Él se paró a buscar algo en su librero.

- Pero... -tartamudeé.

Él se volvió y dijo con todo el tono de querer terminar esa conversación:

- Mira, niña,  a nadie le va a importar si sales con un tipo que está haciendo de profesor. A mí no me interesa, trabajas para mí,  no me hables de tu vida privada. ¿Entendido?

Me quedé callada. Si no hubiese estado ya tanto tiempo trabajando para él,  quizás me hubiese dolido, como en las primeras semanas, pero no sé por qué empecé a reír. Él me miró extraño y bufó. Sabía que era un caso perdido.

- Eres cruel, eres una mala persona -dije entre risas- No sé cómo sigues juntando chicas en tus clubs de fans.

- ¿En mis qué?

- Olvídalo,  igual no querrías saber -procuré no entrar en un ataque de risa al recordar cada cosa que escribían sus fans.

Él solo asintió y siguió sacando cosas del librero. Lo odié; luego yo tendría que ordenarlo todo de nuevo. Él se volvió y yo lo miré. 

James era lindo, pero ¿por qué se tenía que vestirse tan mal? Y de pronto, bum, se estaba sacando la chompa. Desvié la mirada a propósito porque era algo extraño, pero eché una ojeada. ¿Estaba bajando de peso? Ya no tenía tanta pancita y, cuando quedó en solo polo de mangas cortas, sus brazos se notaban más rígidos. 

- Oh por favor, no te fijes en mí.  Vas a salir con mi primo -él rió divertidamente de seguro de la expresión con que lo hubiese estado viendo y con la que lo estaría mirando en esos momentos.

- No me fijaría en ti. Estás bueno, pero eres una basurilla de persona.

La sonrisa se le borró,  aunque pretendió no darle importancia. Su tono volvió a ser serio y me arrepentí por unos segundos, pero igual había sido una pequeña victoria mía. 

Estaba arreglando los libros que iba sacando James del librero cuando alguien tocó el marco  de la puerta que estaba abierta. Se me cayeron algunas cuantas cosas cuando lo vi.

- James, ¿vas a ir a la muestra de la película de Rossana?

Era mi antiguo profesor de filosofía de cuando estuve en estudios generales. Lo que me gustaba de él era su hermoso estilo de vestir y además que muchas chicas decían que se parecía a Tony Stark y bueno, tenía un aire.

James conversó con él por unos minutos mientras yo recogía todo mi desastre. Sabía que el idiota de mi jefe iba a burlarse de mí apenas estuviésemos solos, gracias nervios.

- En serio, ¿tiras todos mis libros porque se apareció él? -James estaba sonriendo maliciosamente. 

- Oh cállate, era solo mi crush cuando era chibola pulpin.

- Aun sigues siendo chibola pulpin, por eso saldrás con un profesor pulpin- James hizo una pausa donde rió a carcajadas. Nunca se reía así y ahora se reía de mí, lo odiaba- ¿Qué les ves a los filósofos, eh?

Era imposible no reírse junto con él.  Dejé sus últimos libros sobre la mesa y le di un golpe leve. Estaba de tan buen humor que ni siquiera me miró mal por eso.

- No les veo nada, además los filósofos no tienen plata.

Alguien carraspeó desde la puerta y al ver quien era, mi sonrisa desapareció.  Era Mathias y sí, Mathias es filósofo.