Capítulo 1: El Ministerio de Magia

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En Hogwarts, Newt y Jessica hablaron un poco y se llevaron bastante bien. Ella era una Ravenclaw y él un Hufflepuff, por lo que no podían pasar mucho tiempo juntos. Pero una vez se acercaron bastante, cuando él le pidió que hiciera un dibujo para él. Jesica era muy buena dibujando y le pidió que le hiciera un dibujo de bowtruckle. Se lo hizo y desde ese día, la Ravenclaw se dio cuenta de que no lo soltaba. Le encantó. 

Poco después lo expulsaron, lo que le dolió bastante a la chica. No supo nada más de él. 

Jessica se graduó de Hogwarts con honores y se convirtió en una de las mejores auroras de Londres. Pero jamás supo nada más acerca de Newt Scamander. 


En el Ministerio de Magia, todos actuaban como locos. Grindelwald había escapado y todos ayudaban como podían. Jessica se había ofrecido varias veces para ir a París, donde el Ministerio creía que Grindelwald se ocultaba. Siempre le habían dicho que no, porque la necesitaban aquí. Era una de las mejores auroras de todos los tiempos y la necesitaban con vida. 

-Puedo encontrarlo e incluso atraparlo. -insistió ante el Ministro. Como siempre, su ego la acompañaba

-No, Birdwhistle -respondía siempre el Ministro-. Ya te dije que es demasiado arriesgado, te necesitamos con vida. 

-Pero...

-No es no. Acéptalo y ve a hacer u trabajo. 

Decepcionada y frustrada, se levantó y caminó a la puerta. 

Los días pasaron y nada. Grindelwald no había dejado rastro, y el Ministro estaba tan desesperado que incluso consideró mandar a Jessica a París. Un día, estabas caminando pro los pasillos del Ministerio cuando viste algo que casi te saca el alma del cuerpo: Viste a un chico con la piel clara, alto y delgado, con un largo saco de tela azul, una maleta y el cabello café claro, color más bien miel. Lo reconociste de inmediato, era Newt Scamander. Ya se estaba yendo, pero aún así corriste hacia él. Si era él, querías abrazarlo y hablar con él, ponerse al día. Lo habías extrañado durante tanto tiempo, que ahora te sentías como un cachorro viendo a su amo llegar a la distancia. No podías resistirte, corriste hacia él con todas tus fuerzas. Pero alguien se interpuso en su camino. Era Zoe, tu compañera de trabajo. 

-¡Jessica! -gritó ella- ¡Gracias a Dios que te encuenetro! El Ministro quiere verte, ahora mismo. 

-¿Tiene que ser ahora? -preguntaste desesperada, viendo cómo Newt se alejaba más y más...

-Sí, ahora, es muy urgente. Es acerca de Grindelwald. 

Te quejaste e hiciste una mueca. Bueno, y ano importaba. Newt ya se había perdido de tu vista. De todos modos, podrías mandarle una lechuza más tarde... 

Zoe te guió hasta donde estaba el Ministro. Estaba sentado en su oficina apretando sus manos regordetas. 

-¿Quería verme, Ministro? -preguntaste, mientras que Zoe salía de la sala y los dejaba solos

-Sí, Birdwhistle -contestó el Ministro de Magia-. Te... Te vamos a mandar a París a que busques a Grindelwald -sonreíste y te emocionaste mucho, pero no lo suficiente como para que te quitaran la misión y se la dieran a alguien más-. Sólo no te hagas asesinar, ¿entendido? Eres una de las mejores auroras que el Ministerio haya tenido, y te necesitamos, sobre todo ahora. 

-Gracias, señor -contestaste tú, conteniendo las ganas que tenías de saltar-. No lo defraudaré. 

-Más te vale. Ahora apresúrate, que te vas mañana a primera hora. 

Tú sólo asentiste y te marchaste a casa para hacer las maletas. No podías dejar de pensar en Newt y en Grindelwald mientras que te preparabas para el viaje. El Ministro y tú habían decidido que lo mejor sería que fueras sola para no llamar la atención de Grindelwald y sus seguidores. 

A la mañana siguiente, te encontrabas viajando por un traslador hacia la bella ciudad de París...

Newt's POV: 

Caminaba de regreso a casa del Ministerio de Magia cuando escuché pasos apresurados detrás de mi. Seguro era Theseus, mi hermano, de nuevo. No le hice caso. Entonces escuché su nombre. Una mujer gritó fuerte y claramente estas palabras: 

-¡Jessica! ¡Gracias a Dios que te encuentro! El Ministro quiere verte, ahora mismo. 

¿Sería ella? Di media vuelta disimuladamente, pero sólo vi a una mujer pelirroja hablando con otra. No podía ver su rostro. Quería ver si la mujer ante mis ojos era Jessica, una amiga de Hogwarts, pero si me le quedaba viendo probablemente se asustaría. Así que seguí mi camino. Saqué de mi bolsillo izquierdo uno de mis objetos más preciados: El dibujo de bowtruckle que Jessica me había hecho, sólo para mi y para nadie más. Recuerdo que cuando me lo entregó, me dijo: "Si alguna ves tuviera un bowtruckle, lo nombraría Pickett." No sé si tiene uno hoy en día, pero yo nombré a mi bowtruckle como ella dijo que haría si tuviera uno, para nunca olvidar la gran amiga que fue. Mientras que acariciaba con mi dedo gordo su firma que puso en una pequeña esquina, sonreí incoscientemente. Cómo la extrañaba... 


Animales Fantásticos: La saga con un Nuevo PersonajeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora