Una semana después, el día había llegado, Mingi volvería a Gimpo, antiguo hogar de Minho, habían estado juntos toda la semana e incluso el castaño había faltado a clase esos días, su tío no había tenido problema con ello, entendía que Minho necesitaba tiempo.
Habían tenido una larga charla, llena de lágrimas, abrazos y explicaciones, su tío creía que no confiaba en él, pero no era eso, Minho solo se sentía avergonzado de que haber huido así. También habían tomado decisiones, iban a empezar poco a poco, Minho viajaría los fines de semana a Gimpo para ir a terapia junto a su padre, aunque se quedaría en casa de Mingi, no estaba listo para volver a esa casa llena de recuerdos dolorosos, no por el momento.
- ¿Tienes todo listo? - el castaño se agito un poco por la sorpresa, su tío estaba parado en el umbral de la puerta observándolo, el castaño solo asintió metiendo otra camiseta negra en su mochila- Minho, las primeras veces pueden ser difíciles, si no estás seguro podemos esperar-
-Está bien, quiero hacerlo- dijo el menor cerrando su maleta para al fin darse la vuelta y mirar directamente a los ojos preocupados de su tío- si es demasiado para mí sólo me iré, Mingi y su madre estarán esperando por mí.
- Has crecido bien, muchacho, te vi bastante cuando eras un niño, pero luego de perder contacto con tu padre, fueron tantos años sin saber nada, y ahora sé la razón, estoy orgulloso de ti, Minho, tienes que saber eso- tío y sobrino se miraron conmovidos, segundos después este último se secó un poco los ojos y continuo hablando con una sonrisa emotiva plasmada en su rostro- date prisa, no quiero que se vayan muy tarde y lleguen al anochecer.
El castaño tomo su celular, tenía varios mensajes del grupo en el que estaba con Jisung y Felix, se suponía que era para pasarle los apuntes a Minho de las clases a las que había faltado, pero en realidad lo único que hacían era hablar de cualquier cosa, leer a Felix quejarse de que Changbin seguía tratando de conquistarlo y de cómo preferiría que fuera el mejor amigo de este quién lo hiciera, además de mandarle fotos cada cinco segundos de lo que estuvieran haciendo, incluso tenía varias fotos de Jeongin en su galería gracias a Jisung.
Apreciaba mucho a esos chicos, realmente se habían vuelto cercanos, los extrañaba, pero al fin el lunes volvería a verlos.
Mientras les respondía recibió un mensaje de Mingi avisándole que ya lo estaba esperando afuera de la librería, cerró la puerta de su habitación y se encamino hacia allá, deteniéndose en la entrada trasera que daba hacia la librería, a través del cristal podía ver la ancha espalda de Chan. Sintió un espasmo de dolor en su pecho, no habían hablado mucho desde esa noche en la sala de su casa.
Cruzo por su lado dedicándole un pequeño adiós, sin mirarlo más de lo debido, si lo hubiera hecho se habría dado cuenta de la mirada alarmada que le envió el rubio al percatarse de la mochila colgada en su hombro.
Chan había decidido no buscar más a Minho, lo entendía, realmente lo hacía, pero no podía seguir tratando de acercarse a él si Minho no lo quería y lo lastimaba en el proceso, había dejado de buscarlo y de hablarle, en el fondo esperando alguna reacción por parte de Minho, pero lo único que había pasado era que Minho no fuera a la escuela y en los pocos momentos en que se encontraban en la librería el castaño siempre estaba con un chico pelirrojo con el que parecía muy cercano.
Esa tarde estaba dispuesto a ignorarlo como el resto de la semana, pero al ver esa mochila, el miedo invadió su ser ¿Minho iba a irse? ¿Iba a irse y todo lo que haría seria decirle adiós? ¿su historia no significo más?
Chan merecía más.
- ¿Vas a irte? - preguntó el rubio sin poder evitar el que su voz sonara un poco dolida.
La mano de Minho soltó la puerta sin ganas, girándose hacia Chan lentamente.
-Si- respondió mirando hacia el suelo, se sentía culpable, después de todo, Chan seguía preocupándose por él.
- ¿Es todo lo que vas a decir? - el castaño miro al rubio confundido- entiendo que para ti lo nuestro no significó nada, pero, irte así....
Chan soltó una risa amarga que rompió el corazón de Minho, él creía que estaba yéndose definitivamente.
-Chan, no me estoy yendo para siempre, volveré el lunes a la escuela, como siempre- murmuró acercándose a Chan, cuya mirada había pasado de mostrar preocupación a vergüenza, el rubor en sus mejillas lo delataba- mi padre apareció.
- ¿Te hizo algo? Minho ¿estás bien? no tienes que irte, estas seguro aquí, yo te cuidare- el rubio se acercó a Minho mirándolo con gravedad, tomando su pequeña cara entre sus manos, el castaño sacudió la cabeza, pero no se alejó.
-Está bien, al parecer el resolvió sus problemas, y quiere ayudarme con los míos, confiare en él una vez más, porque quiero ser normal, quiero dejar todas mis inseguridades y miedos de lado, Chan, quiero ser capaz de crear lazos con la gente de la manera correcta, sin lastimarlos-
- ¿Crees que lo lograras? - pregunto el mayor luego de algunos minutos en silencio, rogándole a Minho con la mirada, haciéndole un pedido silencioso que el castaño entendió a la perfección.
-No lo sé, pero daré todo de mi para que así, sea, hasta entonces ¿te puedo pedir un favor? -
-Lo que tú quieras- aseguró Chan con seguridad, tratando de ocultar la mirada de dolor que cruzo su rostro cuando Minho se alejó de su toque.
-Sé mi amigo, nada más que eso.
- tú sabes que eso no funciona para nosotros, Minho...
-Por favor, tenemos que intentar, sé que te estoy lastimando y soy un egoísta al pedirte esto, pero tu mereces a alguien que te pueda querer como se debe, y yo en este momento no puedo- aunque sus palabras no eran suaves, su tono de voz suplicante terminó por convencer a Chan, le daría a Minho lo que quisiera, pero no iba a rendirse con él, nunca lo haría.
-Está bien, amigo- dijo finalmente sonriendo sin mostrar los dientes, y antes de que Minho pudiera contestar, el sonido de la bocina de un auto los saco a ambos del trance que les provocaba mirar los ojos del otro.
-Nos vemos el lunes, supongo- murmuro Minho sonriendo tenuemente a Chan, quien sacudió su mano a modo despedida, sentía que si decía algo lloraría, gritaría o se lanzaría directamente a los brazos de Minho.
El castaño salió de la librería, abrazo a su tío y se metió dentro del auto de su mejor amigo, mientras este encendía el auto Minho robo una última mirada hacia el interior del establecimiento.
A través de la ventana la figura de Chan seguía observándolo con una sonrisa que hasta los mismismos ángeles envidiarían, aparto la vista como si le quemara los ojos.
Quizás en otro tiempo, Bang Chan, pensaba mientras el auto se ponía en movimiento y se alejaban, quizás en otra vida.Aún falta el epílogo que subiré esta semana, puede que no todo sea tan malo uwu
Gracias por votar y comentar a pesar de mis errores, espero les guste la historia♡
Nos leemos pronto, no se desesperen ;)
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Waste it on me (Minchan)
أدب الهواةNo se tus secretos, pero recogeré las piezas y te traeré junto a mi ahora. Song: Waste it on me BTS ft Steve Aoki