Miré mi reflejo en el espejo del baño, había ojeras en mis ojos pero una sonrisa iluminaba mi cara. No podía creer que una noche antes había probado los labios de Cameron Dallas, tenía miedo de que solo fuera un sueño y despertar.
Mi celular comenzó a sonar y corrí para atenderlo, era Hilary.
-Buenos días -dijo la rubia- perdón si te desperté, pero John te necesita aquí para comenzar el photoshoot y tienes una visita, te está esperando.
Miré el reloj, marcaba las siete con cuarenta.
-Al parecer todos madrugaron -dije tirándome en la cama- dile a John que llegó en veinte minutos.
-Bien, yo le aviso -respondió- más vale que te apresures.
Colgué y me dirigí al armario, tomé mi pantalón de vestir café, un saco café con parches beiges en los codos, una camisa beige de botones y mis botas de tacón cuadrado café obscuras. Ya vestida, corrí al baño para hacer mis necesidades, lavar mi cara, cepillar mi cabello y atarlo en una coleta alta y al final colocar un poco de maquillaje para no lucir tan demacrada.
Tomé mi bolsa junto con las llaves, al abrir la puerta del apartamento un sonido llamó mi atención. Carl se acercó a mi con el traste de su comida y lo colocó a mis pies, si el animalito no fuera tan inteligente, estaría anorexico.
Serví su comida y corrí al estacionamiento cono si no hubiera mañana.
Miré el reloj del carro, faltaban cinco minutos para las ocho, ¿cómo me había demorado tanto?, encendí el carro y arranqué, tenía cinco minutos para llegar, era todo un reto.Entré corriendo al ascensor, mi coleta se había caído y estaba despeinada. Las puertas estaban a punto de cerrarse cuando una mano se interpuso y se abrieron. Fred entró con una sonrisa en la cara, una sonrisa muy grande, demasiado para mi gusto, en sus manos se encontraban dos cafés.
-Buenos días, compañera -su voz resonó en el elevador- ¿todo bien? Parece que te atropellaron.
-Voy tarde -respondí recargándome en la pared- yo debería preguntar, ¿tú estás bien? Estas muy feliz.
-Eso se lo debo a tu mejor amiga -dijo con una sonrisa pícara- ya sabes, me hace feliz.
-Ya entiendo -reí golpeando su hombro- estas en la típica actitud post-sexo, lindo, eh.
-No deberíamos hablar de esto en la oficina -sus mejilla estaban tintadas de rojo.
Solté una carcajada por su actitud de niño nerd, el podría tener tatuado "sex appeal" en la frente, ya que, siendo sincera, el amigo se caía de bueno, pero una vez que lo tratabas, su lado nerd y vergonzoso mandaba todo a la mierda.
Las puertas se abrieron y me dirigí a la oficina, Fred se despidió y caminó hacia la suya.
Al llegar, Hilary me entregó unos papeles con los requerimientos para el photoshoot y mencionó algo a cerca de una visita, lo había olvidado.
-Pensé que nunca llegarías -Cameron se levantó del asiento y se acercó a mi.
-¿Que mierda haces aquí? -dije atónita sin dejar de ver sus ojos que me veían divertidos.
-Vine a saludarte -susurró tomando mis caderas- ¿como estas? Porque créeme, yo no estoy bien, no pude dejar de pensar en ti.
-Que lindo, Cam -respondí alejándolo un poco- pero tengo trabajo que hacer, tengo que llevar al modelo de hoy al lugar del photoshoot y Gisselle no está para ayudarme, nos vemos luego.
Caminé a mi escritorio abriendo la carpeta donde se encontraban todos los requerimientos. La foto de Cameron apareció, detrás de ello, todo su curriculum y los detalles para la sesión.

ESTÁS LEYENDO
Stuck in the moment~ Cameron Dallas
Fiksi Penggemar"No debería enamorarme de ti, no debería enamorarme de nadie, vine aquí a cumplir mis sueños y apareciste en mi vida para cambiarlos, mi sueño ahora eres tu"