Colores, Matices y Música~

Tercer Estribillo: ¿Qué tan malo puede ser?

Sky sentía su cuerpo más cálido, un tanto  sudoroso, esa calidez demás se centraba en su espalda, glúteos y parte posterior de sus piernas. Abrió los ojos perezosamente, dio un bostezo prolongado,se frotó los ojos, para mirar en dirección a unos largos, morenos y firmes brazos que los envolvían desde la cintura. Las palmas de éstos estaban entre el vientre y pecho, no pudo evitar la sonrisa de bobo al rememorar toda la noche o más bien madrugada. Estaba con Blue ahí pegados, no le importaba el calor, lo anhelaba incluso más, motivado por más calor se acomodó más entre esos firmes brazos, casi chocando la cabeza en la cara de Blue. Éste en respuesta le estrechó más, entre los glúteos sintió la erección presionar.

—Oh, buenos días o tardes mi pequeño travieso —susurró con voz grave y rasposa Blue, besándole el hombro y cuello, dejando un camino de besos

—Buenos días, mi grandote salvaje —rió suave, estremeciéndose por los besos tan estimulantes—Me encantaría hacerlo nuevamente, pero me duele aún— se disculpó antes de comenzar, estaba ya caliente y su Salvaje también— Me has destrozado el culo— ahora sí rompió en carcajadas y Blue le imitó.

Se quedaron en la cama por unas horas más, jugando, riendo y dándose muestras de amor como ellos sentían debían darse, en una especie de amor travieso y de cortejo.

Se ducharon juntos luego de un rato, Blue tuvo que ayudar a Sky, prácticamente cargarlo porque las piernas le temblaban al estar de pie, era cierto su dolor, pero estaba feliz, pleno, el sexo con Blue era eso que uno descubre que necesitaba sin haberlo deseado antes, sentía la urgencia y necesidad de que sus cuerpo estuviesen cerca, rozandose o idealmente pegados, idealmente sin ropa, idealmente con Blue dentro, dando placer a ambos. Blue por su parte sentía de la misma forma, no podía dejar de contemplar la belleza de su pequeño travieso, cada parte de ese menudo ser le llamaba hacer besado, lamido, mordido...chupado.

—¿Qué tal su noche juntos? —preguntó como no queriendo Yellow a su amigo Sky, Pinku estaba atento igual, todos habían escuchado su escándalo de la noche, pero les habían dejado. Es más fue hasta estimulante.

—Me duele el culo a morir y las caderas siento que se me quebrarán ¿Responde eso tu pregunta? —Pinku que estaba caminando con su taza de café a la mesa de la cocina donde estaba los amigos, casi tropieza y se quema. No puedo evitar reír y Yellow quien quería mofarse quedó sin saber qué responder— Debo decir que la tiene bastante grande y gruesa y sabe usarla de maravilla, por eso mi condición, nunca pensé sería tan placentero —concluyó mordiendo la manzana que tenía en su mano diestra.

—Aish, no queríamos tantos detalles, inconscientemente le estaré mirando la bragueta a ver si tienes razón —espetó como asqueado, pero la verdad todo era tan nuevo y gracioso que no podía asquearse — Ahora… su relación ¿En qué quedó?

La manzana se le cayó de la mano, mirando a Yellow con ojos tristes, no habían hablado respecto a eso, la verdad no hablaron de nada en concreto, no hablaron lo que era más importante. Sky se sentía a mareado, ¿Sólo seguirian como si nada? Así amigos, no es que le importara las formalidades… bueno con Blue si, ¿A quién engañaba? Sólo quería presumir lo mucho que se querían y que ese hombre, Blue era su novio.  Se sentía estúpido y egoísta por tener esos pensamientos de posesividad, no le gustaba eso de que se trataran a las parejas como propiedad. Quería con tantas ganas ser el novio de Blue, pero quizás Blue no… por algo no se lo había pedido.

—Me gusta la preocupación que muestras por Sky, creo que nuestros sentimientos son claros, entonces es asumido que somos novios ¿Verdad? —la voz de Blue le sacó de sus pensamientos, pero en vez de sentirse totalmente feliz por la intervención de Blue, el enfado dio paso.

—¡No me has pedido serlo! —protestó poniéndose de pie golpeando la mesa con ambas manos. Pinku tuvo que agarrar bien su  café, y Yellow su cuenco de Frutas. Haiiro y Black se sobresaltaron al entrar  a la cocina comedor. Y qué decir de Blue su expresión era un poema, pasmado de boca semi abierta y ojos bien abiertos. Nadie dijo nada, el silencio reinó en ese espacio pequeño, Yellow se escabulló lo más silencioso que pudo, Sky enfadado era de temer, arrastró a los demás fuera del lugar, mejor estar al margen de esa discusión segura.