𝟏𝟐

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Taehyung estaba manejando hacía la capilla dónde se encontraba Jimin recuperándose, gracias a los cuidados de Jin, el cual era médico y se encargaba de los cuidados de las capillas médicas.

— ¡Hola! Por fin viniste — dijo Jimin entrando al coche de su hermano.

— ¿que tal estás? — contestó manejando hacía su destino.

— Horrible, estaba solo, Jin no viene hace 2 días y estuve sin comer — miró la ventana.
— ¿Cómo está Yoongi? Ayer cuando te pregunté, me cortaste la llamada — frunció el seño y cruzó los brazos.

— uhm bien... supongo... — contestó aburrido, odiaba hablar de Yoongi, su hermano solo pensaba en él.

— lo extrañé demasiado, estoy ansioso de volver a verlo — sonrió.

— y te aseguro que él está ansioso por verte — dijo el grisáceo con sarcasmo.

El rubio frunció el seño con desagrado golpeando levemente la nuca de su hermano.

— gracias por ser tan compañero conmigo Tae... es genial ser tu hermano... —

— ¿la medicina que te dieron te volvieron compasivo con tu hermano? — rió — Jimin estás loco... ¿hace cuanto que no tratas tu transtorno? no te he visto con episodios de psicosis últimamente... —

— no necesito esos estúpidos tratamientos, estoy bien, Yoongi es mi medicina — sonrió.

— no sabía que te podías follar una medicina ¿Acaso tienes otra parafilia que deba saber? — dijo en tono burlesco pero ambos cambiaron su expresión a una de confusión al ver una variedad de hombres fuera de la habitación de Jimin, entre ellos Namjoon.

— ¿Que pasó? — dijeron los hermanos al unísono.

— Tú — dijo Namjoon furioso, apuntando a Jimin.

— ¿Que sucede? — preguntó el rubio, confundido.

— el parásito de Yoongi escapó, y golpeó a mi perra como si fuese un muñeco de trapo — el moreno agarró al menor del cuello.

— ¿¡Qué!? ¿¡Que Yoongi qué!? —
su corazón latía rápidamente, haciendo que su ansiedad y enfado vayan apoderándose de su cuerpo. Que al mirar a Taehyung con el seño fruncido solo pudo pensar en cuánto quería golpearlo.
Se safó del agarre del moreno, fue hacia su hermano para golpearlo 3 veces en el rostro con su puño cerrado, haciéndolo caer al suelo, y en el momento donde había levantado su puño para golpearlo otra vez, Taehyung sacó de encima a su hermano mayor, empujándolo hacia el piso.

— Yo no sabía que ése hijo de puta se había escapado, no pensé que fuera tan imbécil para hacerlo —

— aún así, lo dejé en tus manos Taehyung, ¡confíe en ti! —
— ¡¿que mierda estabas haciendo si no estabas vigilando a Yoongi?! — suspiró y miró a Namjoon quien cruzado de brazos miraba toda la escena.
— ¡¿no se supone que el bunker está vigilado hasta la puta tierra?! ¡que carajo con tu vigilancia Namjoon! —

— ¡así es! pero de la única forma en la que pudo haber huido es con la ayuda de alguien — contestó el moreno.
— y ahora que lo pienso... Ha Yejun no ha regresado desde ayer a la madrugada, él no tenía la autorización de salir durante su turno de la noche —

Taehyung suspiró y se levantó del suelo.
— fue mi culpa.. yo lo mandé a hacer un pedido en la noche —
se golpeó levemente la frente.
— pero él no es capaz de desobedecer a un trabajo en el que podría morir ¿por qué ayudaría a Yoongi? —

— nadie más que tu saben que las vigilancias son fundamentales en la noche, Taehyung — dijo Jimin mirando a su hermano con el seño fruncido pero en cuanto volteó a ver quien se encontraba detrás, temblando y sudando, apretó su mandíbula y trago saliva con enfado.
— a no ser de que Jeon Jungkook sepa ésa información —

Todos los presentes voltearon a ver al castaño quien quería que la tierra lo tragase en ése momento.

— yo... yo... — negó con su cabeza y sus manos.

YoonGi se encontraba en el aeropuerto de Busan, esperando a que el check in finalice

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YoonGi se encontraba en el aeropuerto de Busan, esperando a que el check in finalice.

Sentía como su corazón se iba calmando poco a poco, sintiendo como su libertad se acercaba.

— Bien, la fila número 6 es la que ingresa al vuelo MH763 — dijo la cajera apuntando a una fila que se encontraba a unos metros, entregándole el pasaje del avión.

Durante el transcurso de espera, muchos pensamientos pasaron por la cabeza de Yoongi ¿Cómo estará Jimin? ¿sabrá qué logró huír? ¿Jimin estará durmiendo? ¿Jimin habrá comido? ¿Jimin estará pensando en él?
Jimin, Jimin, Jimin.

— ¡¿que rayos??! — dijo en su mente.

No podía evitar pensar en el rubio, odiaba pensar en él, pero siempre lo hacia, se apoderaba de su mente.
Y lo odiaba.
Odiaba lo que Jimin le hacía sentir, lo confundía todo el tiempo, odiaba que lo haya torturado, insultado, e incluso lo peor, odiaba que lo haya herrado. Tenía una cicatriz de quemadura en su pelvis con el nombre del rubio.
¿Cómo podía pensar en alguien que se había comportado tan cruel?
Pero... a la vez se había comportado tan amable, tan atento.
Amaba cuando Jimin le hacía esos deliciosos cupcakes de Vainilla, amaba cuando acariciaba su cabello hasta quedarse dormido, amaba cuando Jimin escuchaba atentamente sus anécdotas y problemas. amaba cuando Jimin lo besaba con sus esponjosos labios que sabían a sandía por el labial que usaba.

La fila dónde estaba avanzó, haciendolo despertar de sus pensamientos, sonrió sin mirar hacia atras, recordando en donde estaba, que pronto sería libre como antes.
Se subieron al microbus que los lleva al embarque del avión.
Y al sentarse miró hacía la ventana, haciendo un gesto de despedida con su mano derecha.

— adiós Jimin —

Luego de la brutal amenaza hacia Jungkook, Jimin y Taehyung irrumpieron en la casa de Yoongi, vieron claramente que éste no se encontraba ahí, su casa estaba desordenada, el armario no tenía ropa, tampoco había sábanas en su cama

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Luego de la brutal amenaza hacia Jungkook, Jimin y Taehyung irrumpieron en la casa de Yoongi, vieron claramente que éste no se encontraba ahí, su casa estaba desordenada, el armario no tenía ropa, tampoco había sábanas en su cama.

— se ha ido — Dijo Taehyung.

— Lo sé, me dí cuenta — contestó pegándole un puñetazo a la pared.

— Jimin aún tienes su celular ¿no? —

El contrario asintió y lo buscó en su mochila entregándolo a su hermano.
— sabía que iba a ser necesario, todas aus cuentas están vinculadas.
hasta las aplicaciones de sus tarjetas de crédito —

Ambos sonrieron revisando el celular encontrándose con la reciente conpra de pasajes.

— con que Japón... —

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