Mirar Las Escenas De Libertinaje.

Capítulo XXXII.

Wen Qing se encontró a Wen Bai en una casa de té ubicada en un sitio turístico local.

El otro estaba usando un traje y discutiendo asuntos con alguien más. Antes de que pudiera pensar dónde esconderse, sus ojos se encontraron con la mirada de Wen Bai.

Las pupilas de Wen Bai se dilataron y él se levantó apresuradamente, haciendo que la silla se rascara contra el suelo con un sonido penetrante.

Wen Qing rió torpemente.

La persona opuesta a Wen Bai sintió que algo estaba pasando y encontró una excusa para irse.

Wen Bai arrastró a Wen Qing a una habitación privada, "Entra y tengamos una buena conversación".

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"¿No dijiste que no ibas a irte?".

Wen Qing sabía que él era el culpable y en silencio bebió su té con la cabeza enterrada.

"Pensé que estabas muerto".

Wen Qing levantó las comisuras de sus labios, "¿Cómo podría ser eso?".

Wen Bai asintió con la cabeza. "Sí, parece que también estás viviendo una muy buena vida". Sus ojos reflejaban débiles indicios de ira.

Wen Qing sonrió.

Debido a una erupción de ira, Wen Bai no habló y silenciosamente evaluó a Wen Qing.

Parecía haberse vuelto más delgado, además del hecho de que originalmente era demasiado huesudo. Wen Bai sintió que le dolía el corazón por esa persona que no lo amaba.

"Si no hubiera venido aquí para hablar de negocios, ¿eso significaría que no te vería por el resto de mi vida?".

Wen Qing se rió, "¿Cómo podría ser eso?".

"¿Por qué no me contactaste?".

Wen Qing se rió con una expresión despiadada, "Estuve demasiado ocupado recientemente, así que me olvidé".

"¿Demasiado ocupado tratando de ocultarte de nosotros?".

Wen Qing siempre había estado radiante todo este tiempo, pero gradualmente, las comisuras de sus labios ya no podían formar una sonrisa cuando sus ojos se pusieron rojos.

"Yo tampoco quería". Su voz sonaba cada vez más como si estuviera ahogando en sollozos.

Algunos sentimientos no se pudieron contener una vez que estuvieron expuestos a otras personas. Hablaba interminablemente como una mujer casada y llorosa que no podía parar una vez que comenzó a narrar viejas historias del pasado.

"Yo tampoco quería. Pero Wen Bai, estoy demasiado cansado. Estoy realmente demasiado cansado".

"Oye, he estado con él durante doce años. Doce años enteros. Entonces, ¿cuánto crees que estoy realmente dispuesto a dejar? ¿Cómo podría querer separarme? He pensado en la muerte pero nunca he pensado en irme. Sin embargo, si sigo viviendo así, no podré sobrevivir mucho más tiempo. ¿Qué me queda si me voy? La vida de mis putos sueños ya está arruinada, así que, ¿qué crees que todavía tengo? Si no me voy, entonces acabaré sin joderme nada, ¿entiendes? Solo quiero follar en vivo. No quiero la felicidad y todas esas otras tonterías. No quiero nada de eso".

Wen Qing sollozó y sollozó con una lágrima en la cara.

El corazón de Wen Bai estaba en tal agonía que su garganta se sentía seca. Sostuvo a Wen Qing con fuerza, como los solitarios que buscaban el calor el uno del otro en el duro invierno.

"Todavía me tienes. ¡Todavía me tienes!".

"Yo no. Yo no". Wen Qing presionó contra el pecho de Wen Bai y negó con la cabeza, "No tengo nada. Quiero jodidamente vivir solo. ¡Vivir! Sólo quiero vivir".

"Realmente no quiero ver más chicos. En ese entonces, había decidido irme e irme a un lugar muy lejos, solo. Yan Han luego me dijo que se sentaría conmigo y dejaría de buscar a otros. Esperé más de diez años por esas mismas palabras. Pensé para mí mismo que esta sería la última oportunidad. Esta sería la última excepción. Pero desde el fondo de mi corazón no me gustaba. Lo odiaba tanto que me sentía agonizante. Cada vez que lo miraba, mi corazón sentía punzadas de dolor".

"Al final, él todavía encontró a alguien más. Él no puede hacerlo, no hay esperanza. No hay esperanza incluso si le doy toda mi vida. Bueno, la oportunidad se ha ido ahora, finalmente puedo irme al infierno. Solo quiero ir a algún lugar lejos por mi cuenta. ¿Por qué me atrevería a albergar extravagantes esperanzas de cosas como sentimientos y amor otra vez? Dices que te gusto, dices que aún te tengo. Yan Han dijo eso al principio también. Ahora mira lo que tengo. ¿Cómo podría tener doce años más para perder contigo?".

"Me preguntas por qué me estoy escondiendo. ¿Qué puedo hacer si no lo hago? Conozco demasiado bien a Yan Han. Sí, hemos roto, pero él no puede soportar verme vivir una buena vida, ¿sabes? Se sentirá no acostumbrado a ello después de que el tiempo pase. Se sentirá fuera de lugar pero nunca considerará mis deseos. Él siempre piensa que debería estar fanáticamente enamorado de él, como un perro que lo soporta sin una pizca de honor o dignidad propia. ¿Qué más puedo hacer que no sea ocultar? ¿¡Qué puedo hacer, mierda!?" Hacia el final, la voz de Wen Qing era similar a la de un rugido.

Era como si finalmente hubiera dejado salir los sentimientos que habían sido reprimidos dentro de él durante doce años. Wen Bai sostuvo a Wen Qing y sintió que su cuerpo temblaba constantemente.

Y así sé oyó decir:

"Bueno. Tienes que vivir una buena vida por ti mismo. Si hay algún problema, recuerda encontrarme". Se detuvo por un momento antes de continuar, "Me encargaré de Yan Han en consecuencia".

No importa lo poco dispuesto que esté mi corazón. No importa cuanto te ame. Tal vez dejarte ir es la mayor felicidad que puedo darte.