EL REENCUENTRO [TERMINADA]

CAPITULO 19

Karol

Ruggero esta tan guapo, todavía sigue siendo un hombre demasiado guapo. Todavía no entiendo como es que nos encontró ¿Cómo se enteró que vivía en París? Como sea, ahora ya estamos en mi casa y durante todo el camino matteo no dejo de hablar con su padre... se sentía raro que Matteo le digiera papá a ruggero y es que no estoy acostumbrada.

   - ¿Cuántos años tienes papi? – otra pregunta por parte de Valentina - ¿en que trabajas? ¿Por qué no te vienes a vivir con nosotros? ¿me quieres?

   -vale cariño, tranquila no lo agobies con tantas preguntas – le sonreí a mi hija y me levanté para ir a la cocina por el postre.

   -Bueno, pues tengo veinte y ocho años, trabajo como ginecólogo, no puedo vivir aquí porque tu mami me tiene que dar su permiso y por supuesto que te quiero cariño – escuche desde la cocina como contestaba.

   -Seguro que mi mami dice que si – en eso regreso con tres platos con una rebanada de pastel. Se los dejo en la mesa y me siento – mami ¿verdad que papi se puede quedar?

   -Cariño lo siento, pero no – le dije.

   -Pero ¿Por qué? – pregunto Valentina.

   -Porque no – le conteste.

   -Pero... - me miraba con tristeza.

   -vale, no te preocupes preciosa te prometo que vendré a verte todos los días – dice ruggero y le agradezco por un minuto que me salvara.

   -Bueno – terminamos de comer el pastel y vale seguía con sus preguntas, se veía tan tierna. Ella y ruggero. Padre e hija. Yo solo me dedique a estar callada y escuchar su conversación.

   - ¿Me llevaras a la escuela? – le pregunto matteo.

   -Claro que si hermosotaaaaaaa – dice ruggero y le da un beso en la cabeza – pero solo si tu mama está de acuerdo – vale se gira para mirarme y yo solo asiento con la cabeza.

   - ¡Genial! Ya quiero ver al la tonta de Fernanda cuando  vea que si tengo papá y esta guapo – dice sonriendo mi niña.

   -Bueno preciosa es hora de dormir – ya eran las diez de la noche y Valentina tenía que ir mañana a la escuela.

   -Está bien, pero papi léeme un cuento por favor – ruega y ruggero le dice que sí.

Los dos fueron a la habitación de vale, quiero llorar. Ver a ruggero acostado con su hija, nuestra hija mientras le cuenta un cuento, se me parte el corazón. Me siento una mala persona por apartar a ruggero de vale, aunque él me hizo daño no tenía derecho de separarlos.

Me dediqué a ver esa hermosa escena hasta que vale se quedó dormido en los brazos de ruggero y le dije que lo esperaba en la sala. Ya era la hora de que habláramos seriamente.

Marikaaaaaaaaaaaaa se aman