El Chico de la Luna [Pausado]

Capítulo 7🌿

Luke

No podía creer que tenía otra misión ahora, es decir, no es que no me guste la idea.. solo que fue tan repentino que me tomó por sorpresa. Luego de esa misión fallida que tuve hace tres años el cual trajo consigo la muerte de Sara, fui asignado nuevamente a otra persona y deseaba que esta vez las cosas salieran mejor tanto para Lyna como para mí, ya que dudaba que me volvieran a perdonar si cometía otro error tan importante.

Al llegar a casa traté de ordenar un poco el lugar y luego preparé algo para comer ya que no había cenado con Lyna puesto que debía volver y realmente mi estómago me pedía con pequeños rugidos que ingiriera alguna comida.

Cuando terminé todo lo que tenía que hacer me tomé un baño relajante para después finalmente acostarme en mi tan extrañada cama, sumergiéndome en un sueño profundo. A la mañana siguiente mi alarma, un tanto vieja por el pasar de los años me despertó haciéndome saber que era las 8 a.m. Decidí ir a ver al Señor Tom en la mañana, si nosotros fuéramos una manada el señor Tom probablemente sería ese alfa que guíe a los demás. El siempre estaba dispuesto a ayudar y desde que era pequeño ha sido como el padre que nunca tuve.

-Luke que gusto verte de vuelta muchacho, ¿cómo te fue?

-Bien señor Tom, no me lo esperaba pero esta vez no olvide nada.

-Me alegra oír eso, pero no te presiones tanto ¿de acuerdo? No dejes que las cosas del pasado tiren de ti hacia atrás.

-No lo haré más, se lo prometo.

-De acuerdo, por cierto Jason me pidió decirte que lo busques en cuanto regresaras.

-¿Sabe dónde está ahora?

-Lo he visto en el jardín de las rosas hace unos minutos, tal vez siga ahí. -informa

-Gracias señor, iré a saludarlo también y lo veré a usted de vuelta pronto. -me despido y él asiente.

El jardín de rosas era un lugar sagrado para nosotros, no era un simple lugar ya que en realidad era lo que ustedes están acostumbrados a llamar... cementerio. Cuando alguien moría en vez de construir una lápida de cemento, hacíamos florecer rosas blancas y así el lugar poco a poco se ha ido extendiendo convirtiéndose en un jardín protegido por aquellos que ya no están. Claro que algunos no solo hacían florecer esta rosa cuando alguien moría, también lo llegaban a hacer las personas en cuyo corazón ahora habitaba el odio y dolor haciendo que la rosa se volviera negra y albergará emociones negativas.

-Jason, aquí estás. -me lo encuentro en la entrada del lugar.

-¡Luke! Amigo que bueno que estés de vuelta. -me saluda animadamente.

-¿Cómo has estado? -ambos nos sentamos en una de las bancas que estaba cerca de nosotros.

-No me quejo ¿y tú? ¿Quién es la persona esta vez? -curiosea.

-Es una chica un tanto especial. -pienso en Lyna de repente.

-¿En qué sentido?

-Ella literalmente me ha lanzando un zapato a la cabeza cuando me vio. -él se hecha a reír de mí desgracia.

-Debes agradecer que solo fue uno.

-Pero faltaba muy poco para recibir el otro, aunque luego le explique todo y al menos no se desmayó. -me encojo de hombros.

-Qué locura.

-Y que lo digas. -ambos reímos.

-Ya que estás aquí te invito a comer en casa, ¿qué dices? mamá estará contenta de verte.

-De todos modos iba a ir, ¿sigues teniendo mi caja de chocolates no? -por un momento vi temor en el rostro de Jason.

-¿Tus chocolates? Mm..

-Jason... no me digas que te comiste todos los chocolates, ¡eran una docena! ¿En 2 días? -él solo podía sonreír con nerviosismo ahora.

-Lo siento amigo, son como adictivas! Ahora entiendo porqué te gustan desde pequeño.

-Voy a golpearte si no comienzas a correr en este instante. -solo estaba bromeando pero lo dije en un tono serio para asustarlo y al parecer funcionó porque salió disparado cual correcaminos en menos de un segundo y yo fui tras él actuando como si de verdad fuera a golpearlo.

3 semanas después

-¿Sigue sin haber rastros de Steve verdad? -cada tanto se lo preguntaba al señor Tom ya que me negaba a perder la esperanza de ver devuelta a mi amigo.

-Así es Luke, probablemente esté bien y siendo feliz con la persona que quería.

-¿Y si no? -cuestiono.

-En ese caso no nos queda de otra que seguir esperando a que de alguna manera vuelva, de otro modo... habría que comenzar a hacernos la idea de quizas él ya no esté... con vida. -termina la oración con un semblante serio pero a la vez transmitiendo lo mismo que yo, tristeza.

-Es que eso no puede ser, intenté que floreciera una rosa blanca para él en el caso de que le hubiera pasado algo pero la rosa se marchito al instante lo cuál quiere decir que sigue vivo, en algún lugar pero vivo y quizás esté en el mundo de Lyna dado que él pensaba quedarse ahí, si yo intentara buscarlo cuando regrese tal vez logre dar con él y confirmar si -el señor Tom me interrumpe tomándome de los hombros.

-Entra en razón Luke ¿acaso te estás escuchando a ti mismo? ¿Buscarlo en un mundo que no conoces completamente y además poniéndote en riesgo tanto a la chica como a ti?

-Sabe que es como un hermano para mí, crecimos juntos no me puede decir que acepte la idea de que tal vez murió así sin más sin tener pruebas.

-¿Y tú quieres buscarlo sin tener alguna prueba también? Si ya comprobaste que sigue con vida entonces debe estar bien como te dije al principio y si es así no creo que regrese así que déjalo ser feliz, él tomó su decisión aunque eso causó mucho revuelo aquí.

-Lo sé pero él también merecía ser feliz.

-Y apuesto a que lo es, así que ya no te preocupes tanto e intenta seguir sus pasos también. ---me da unas palmadas en la espalda.

-¿De qué habla?

-Pues de encontrar la felicidad muchacho, te vi crecer desde muy pequeño pero en todos estos años no te he visto encontrar a tu.. ¿cómo es que le dicen los jóvenes? ¡Ah! Cierto, a tu media naranja. -eso me hace reír.

-Creo que la edad ya le está pasando factura señor Tom. -rio aún más.

-¿Viejo yo? Puff, muchos jóvenes se quejan de dolores de espalda hoy en día mientras que yo estoy como nuevo. -se defiende.

-Buen punto, y con respecto a lo que decía... sí llego a encontrar a mi media naranja como dijo, se lo haré saber "señor espalda como nuevas" -meciono haciendo comillas y él ríe.

-Me parece bien, suerte con ello. -me anima.

Salgo de la casa del señor Tom unos minutos más tarde y me dirijo a la mía. Los días han pasado en un abrir y cerrar de ojos, solo faltaba una semana para volver junto a Lyna. La chica del otro mundo... aquella naranja agridulce a quien ya extrañaba molestar...

[🌙]

mochisatellite. ♡