A pesar de que consideraba que Serena era un asunto que la familia Sakurada debía resolver, Ryuji no podía evitar preocuparse. Se mantenía al margen de la situación, pero siempre al pendiente de lo que sucediera con la chica.
Nick y Usada eran lo encargados de mantenerlo al tanto de todos los cambios que percibieran en ella, desde su salud hasta su actitud, pero el el reporte que le dieron ese día no era lo que él esperaba.
-¿Dices que el Enetron burbujeaba?- preguntó para estar seguro de que había escuchado bien.
-¡Como hirviendo!- exclamó Usada, hablandole por videochat. -Pero lo más extraño es que se detuvo cuando regrese a la cocina.
-¿Y tú lo viste, Nick?- preguntó Gorisaki, quien estaba de pie detrás de su compañero.
-No, pero se que Usada no miente- respondió el Buddyroid rojo.
-Si, es un hecho extraño... ¿Pero qué tiene que ver con la chica?
Ryuji permanecía en silencio mientras los robots disctían, perdido en sus propios pensamientos. De repente se puso de pie y salio del lugar, ignorando a Gorisaki quien lo llamaba preocupado.
-¿Qué le sucedió?- preguntó Nick.
El Buddyroid azul se encogió de hombros, mirando hacía la puerta por la que el chico había salido.
Sin mirara atras, Ryuji se dirigió a su habitación. Abrió el cajón donde había guardado ese expediente y se quedo observando el folder por un buen rato.
-Creo que será conveniente que haga una visita.
Mientras tanto, Nick y Usada habían roto la comunicación y se dirigían a la cocina, donde Yoko comía una rebanada de pastel con gran deleite.
-¿Por qué tan sola, Yoko-chan?- preguntó Usada, tratando de sonar lo más casual posible.
-Necesitaba algo dulce- respondió ella con una sonrisa. Se pusó de pie, con plato de pastel en mano, y salio de la cocina dirigiendose a la puerta que daba al jardin trasero de la casa. Al ver que los Buddyroids la observaban confundidos, les hizo una seña para que la siguieran. -¡Vamos! Les gustara.
-¡Corre Yoko o perderemos!- el tono alegre de esa voz fue la que más sorprendio a los robots.
-¿Hiromu?- Nick corrió de inmediato al exterior y se quedó congelado al ver como él, Jin y Serena parecían muy divertidos jugando con una pelota.
Él los perseguía tratando de arrebatarsela, pero ambos se la arrojaban entre ellos esquivandolo.
-¡Ganaremos aún así!- gritaba Jin en medio de risas. -¡No hay nada que puedan hacer!
-¡Eso ya lo veremos!- exclamó Yoko, dejando el plato a un lado y corriendo para unirse a Hiromu.
-¡Wow!- dijo Usada, colocandose al lado de Nick. -Todo me parece tan...
-Diferente- completó Nick. -Apenas me doy cuenta de que hace mucho que no los veía así de... felices.
-Quiza todos estabamos resignados a no ser una familia común y olvidamos como...
Pero Usada fue interrumpido por la pelota, que golpeó su cabeza y cayó en sus manos.
-¡Contra él!- exclamó Jin y él y Serena comenzaron a aproximarse a toda velocidad.