Observe el lugar donde estaba y evalué mi situación. ¿Estaba tan desesperada? ¿Cómo para estar encaramada en la rama más alta de un árbol con tal de ver un poco de esa habitación? Esa habitación. Estaba segura que ahí se encontraban todas las respuestas que quería, que necesitaba.
Iba vestida completamente de negro. La noche había caído y necesitaba pasar desapercibida.
Llevaba una pequeña mochila, también negra. En ella llevaba algunas cosas para la ocasión. Polvo para huellas digitales, una cuerda de alambre, un deslizador para cuerdas, un spray para laser, goma de mascar, una resortera, lentes con visión nocturna, una cámara digital con visión nocturna, un arma y lo más importante, un antifaz para ocultar mi identidad.
Llevaba una hora esperando, esperando el momento adecuado. Era medianoche y todas las luces, visibles por este lado de la casa, estaban apagadas. Hace ya cuarenta minutos que nadie entraba al estudio. Sería el momento perfecto para actuar pero me obligue a esperar por lo menos veinte minutos más.
Mire el reloj de muñeca que llevaba. Ya habían pasado quince de esos veinte minutos, comenzaría a instalar la cuerda. Baje por la rama del árbol, hasta que la ventana y este estuvieran a la misma altura. Comprobé que estuviera en una superficie firme y rodee el tronco del árbol con la cuerda, le di unas siete u ocho vueltas y le hice un nudo fácil de desatar pero firme. Metí el resto de la cuerda a mi mochila y deje un espacio para que esta fuera saliendo y acomode mi mochila lo más firme que pude. Me puse el gorro de la sudadera que estaba usando y procure que toda mi cabellera quedara dentro, y me puse los lentes con visión nocturna. Por último me puse el antifaz.
Me baje del árbol y camine hasta la pared. Mire hacia arriba, a unos cuatro o cinco metros estaba la ventana que tanto deseaba alcanzar. Puse ambas manos en una tubería, de un salto subí mis pies y los puse contra la pared a mis lados. Mire hacia atrás para asegurarme que la cuerda estuviera saliendo como quería, y así era.
Subí con cuidado, lentamente, sin hacer el menor ruido posible. De uno de mis bolsillos saque la goma de mascar y la mastique rápidamente. Al llegar arriba, la dividí en dos y la puse en ambos seguro de la ventana.
—Uno…dos…y —los seguros explotaron, pero sin hacer mucho ruido. Abrí la ventana con cuidado, rezando para que como me dijo Logan la alarma no estuviera activada hasta mañana. —Perfecto —susurre al ver que estaba completamente abierta y no hacia ningún ruido.
Antes de entrar saque el spray para laser de la mochila y lo rocié hasta donde mi brazo alcanzaba a llegar. Instantáneamente aparecieron los rojos rayos laser que toda casa de ricos tiene. Mastique un poco más del chicle y mire la habitación. Encontré cinco dispositivos que emitían los laser. Saque la resortera de la mochila y puse el chicle ahí, rápidamente lanze el chicle hasta uno de los dispositivos provocando que unos cinco rayos desaparecieran. Y así hice con todos los dispositivos hasta que no hubo ningún laser en la sala.
Ya dentro busque ese pilar que había visto la primera vez que entre. Estaba justo al frente de la ventana, perfecto para lo que necesitaba. Rodee con la cuerda el pilar unas cinco veces y le hice un nudo corredizo peligroso. Este nudo solo me iba a dejar estar en la cuerda unos diez segundos y luego se desarmaría.
Puse el deslizador en la cuerda y me dispuse a trabajar.
Recorrí con la mirada el estudio de nuevo y encontré cuatro cámaras.
Suspire. La primera vez no me había preocupado de eso, seguramente tienen memoria y nunca las revisan. Si fueran inalámbricas ya estaría en la cárcel, por invasión a la propiedad privada. Mastique mas goma de mascar y dispare con la resortera. Una por una las cámaras fueron destruidas.
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No es mi vida, es solo una misión más 2
Teen FictionLa vida de Alexa se llena de aún más problemas y secretos que descubrir. Por el bien de Logan lo mantiene en la ignoracia de sus planes. Nuevas y antiguas preguntas no resueltas llenan la cabeza de Alexa de incertidumbre. ¿Dónde esta Derek? ¿Cómo se...