TITANIC *J.V*

CAPITULO II

El ambiente estaba tenso dentro de la pequeña estancia que servia como un laboratorio de limpieza improvisado, no habían encontrado el diamante en la caja solo algunos otros objetos de mínimo valor, o eso creían ellos.

―Hola Dave, Barry. El diamante no estaba en la caja pero no se preocupen les aseguro que estamos cerca.―hablaba Brock al teléfono después de que Bobby, el encargado de vigilar la expedición, le advirtiera sobre el disgusto de sus socios―Se que pronto lo encontraremos, aun faltan muchos lugares por examinar y puede estar en cualquiera de ellos.

Siguió conversando sin percatarse de lo que sucedía en una de las mesas de limpieza, en la que se estaba examinando el cuadernillo extraído de la caja, parecía ser un cuaderno de dibujo, había retratos y algunos bocetos de gran calidad. Sorprendentemente no se habían deshecho con el tiempo, estaban casi intactos y cuando llegaron al ultimo dibujo Brock dejo de prestar atención a la llamada, lo que estaba viendo era mucho mas interesante. 

―Espera un segundo.―sus ojos se centraron en el papel y dejo el teléfono a cargo de Bobby―Quiero ver eso.

―Creo que encontramos algo, llamaremos después―Bobby respondió a los ya molestos colaboradores y colgó.

El grafito dibujaba un bello retrato de un chico acostado sobre un diván, su mano cubría parte de su rostro y cabello pero solo lo necesario para dejar apreciar sus rasgos finos; tenia los pómulos marcados,  sus labios hacían una perfecta mezcla con su mentón y nariz esculpida, parecía un ángel y su ojos brillosos daban la impresión de ser un mar de emociones. Su cuerpo estaba desnudo, el dibujo solo llegaba hasta su pelvis y después se difuminaba entre manchones negros. Brock estaba extasiado, no era un dibujo común, ningún hombre en aquella época se desnudaría para que lo retrataran pero ahí estaba y la delicadeza y definición de los trazos era excepcional pero lo mas importante en ese dibujo era que sobre el cuello del muchacho reposaba un collar voluminoso en forma de corazón, era lo que estaban buscando.

―¿En dónde esta la fotografía del collar?―pregunto ansioso, la chica a su lado le tendió lo que estaba buscando.

―¡Oh, cielos!―exclamo Bobby, en su cara se podía leer el asombro. El collar de la fotografía era exactamente igual al del dibujo.

En la esquina derecha de la hoja se podía leer la firma del autor y la fecha en la que lo hizo Abril 14 1912 J.C

―Por dios, es increíble― Brock estaba entusiasmado, esto los ponía un paso mas cerca de la ubicación del collar. 

...

La televisión estaba encendida, el olor a barniz se extendía por toda la casa, el anciano le estaba dando los últimos detalles a los zapatos sobre la mesa. Sus rasgos estaban tensos por la concentración y las arrugas sobre su cara se marcaban aun mas. 

―El buscador de tesoros, Brock Lovett, que es mejor conocido por encontrar naufragios hundidos en el caribe, ahora utiliza sumergibles rusos para llegar al pecio mas famoso de todos; El Titanic, esta con nosotros desde el buque de investigación...―el sonido proveniente de la pantalla lo hizo desconcentrarse de su tarea, la mención de aquel barco llamo su atención y dejo a un lado el trabajo.

―Hola Tracy, todos conocen la historia del Titanic, ya saben la valentía de los músicos tocando hasta el final y todo eso pero a mi me interesa lo que no se sabe, los secretos encerrados dentro del casco del Titanic y aquí estamos utilizando tecnología robotica para llegar mas allá de lo que nadie había llegado. ―con la limitada rapidez que su cuerpo cansado por los años le permitía, tomo su bastón, sin importarle las manchas de grasa sobre sus manos, y se levanto de la silla, acercándose a la imagen. 

―¿Qué pasa abuelo?―Pregunto la chica rubia que servia los platos de sopa sobre la mesa.

―Sube el volumen, cariño.―sus ojos azules fueron directos a la pantalla, examinando al hombre en ella y poniendo completa atención a sus palabras, mientras que la joven giraba la perilla de volumen.

―Tengo expertos especializados en museos para asegurarme de que estas reliquias sean preservadas y catalogadas debidamente. Miren este dibujo que encontramos hoy, un pedazo de papel que ha estado sumergido bajo el agua durante 84 años y mi equipo pudo recuperarlo intacto.

Los ojos rugosos del anciano se abrieron por completo cuando vio aquel dibujo, sus facciones cambiaron de serias a incrédulas, no lograba asimilar lo que sus ojos estaban viendo. 

―Es increíble.


                                                                                                 ... 


En el buque se estaban preparando para una nueva inmersión, debían darse prisa si querían que los fondos para la expedición siguieran llegando.

―¡Brock! hay una llamada para ti― comento Bobby después de correr a su lado.

―Bobby vamos a lanzar los sumergibles al agua, no tengo tiempo.

―Créeme, esa llamada te interesa. 

Brock miro a su compañero con incertidumbre, ¿quién lo llamaría que fuera tan importante como para detener la expedición?. Sabia que su amigo era un hombre serio, no jugaba con ese tipo de cosas, debía haber una buena razón para detenerlo de seguir con la búsqueda.

―Espero que así sea―caminaron hasta la sala de comandos para que pudiera atender la llamada.

―Tienes que hablar fuerte, es un anciano― le explico Bobby.

―Oh, genial.―Habia ironía en su voz, no le gustaba que le hicieran perder su tiempo. Puso el aparato en su oído y hablo alto―Habla Brock Lovett, ¿en qué puedo ayudarlo señor...?

―Calvert, Alonso Calvert―contesto Bobby a la duda.

―Señor Calvert―continuo y espero la respuesta.

―Me preguntaba si ya encontró el corazón del mar señor Lovett―una voz grave y longeva contesto al otro lado de la linea, Brock miro con asombro al hombre a su lado.

―Te dije que te interesaría― contesto con suficiencia el otro.

―Tiene mi atención Alonso, ¿puede decirnos quién es el chico del dibujo?.

―Si claro, el chico del dibujo soy yo.