Un silencio abrumador los separaba. Dulce golpeaba el
asiento copiloto con sus dedos, mientras Chris se
concentraba en la autopista que se abría a sus ojos.UCKER: Necesito parar -le dijo él de pronto. Dulce lo
miró de inmediato. Esperaba en realidad otro tipo de
conversación. Algo mejor y más intenso. Tal vez que
hablaran de los dos-DULCE: ¿Estás bien? -preguntó ella, deduciendo que era
lo más inteligente que se le había ocurrido preguntarle.
Chris detuvo el auto, estacionándolo en un garaje cerca
a una cafetería en medio de la autopista-UCKER: Sí, sí… solo estoy cansado -admitió él, sobándose
los ojos. Había manejado tanto que pensó que se desmayaría
en medio del camino-Y volvieron a quedarse callados. Chris rompió el hielo por
segunda vez.UCKER: ¿Te molesta si nos quedamos a dormir aquí por
hoy? -le preguntó. Quiso mirarla, pero sabía que se distraería
con sus bonitos labios, sus ojos, su nariz… y todo lo que le
gustaba. Apartó la vista hacia el parabrisas. ¿Cómo es que
podían estar tan fríos después de a verse dicho que se
amaban?-DULCE: No… -negó ella-
UCKER: Ok -abrió la puerta del automóvil e intentó salir-
DULCE: ¿Christopher?
UCKER: ¿Mnh? -dijo con una pierna fuera del auto-
DULCE: ¿Te pasa algo conmigo? -le preguntó. Se miraron de
nuevo, por unas exuberantes milésimas de segundo-UCKER: ¿Por qué lo dices?
DULCE: Nada más…
UCKER: Estoy bien -le afirmó. Esta vez si logró salir del auto,
abrió la parte trasera del auto y sacó la maleta improvisada
de Dulce. Ella también bajó del auto. De alguna manera se
había enojado por todo ese maldito berrinche que Chris estaba
haciendo y ni siquiera sabía por qué. Pero si él no quería hablarle,
entonces ella tampoco lo haría. Tiró la puerta y se adentró a la
cafetería. Chris siguió sus pasos. Por detrás la vista era mejor aún.
Todavía conservaba sus braguitas y sin nada encima. Solo la
cazadora de cuero que le cubría hasta los principios del muslo.
La miró de espaldas caminar… se moría por adherirse a ella y
acariciar ese bonito trasero que siempre había tenido y que él…
había probado muchas veces. Se río. Dulce se volteó al escucharlo-DULCE: ¿Se puede saber de que te ríes?
UCKER: ¿No puedo?
DULCE: Primero estás enojado y ahora te ríes, quién te entiende
Christopher Uckermann -lo ignoró y continuó su camino. Dentro,
la cafetería se convirtió en un alboroto. Demasiada testosterona
para una sola chica en lencería-Un silbido se escuchó desde las mesas más lejanas.
HOMBRE: Oye guapa… -gritaron desde el fondo- ¿has venido así
para mi? -y los demás hombres rieron-HOMBRE2: Hola gatita… -un hombre pasó por su lado, susurrándole
al oído-Y pudieron seguir gritando más halagos subidos de tono para ella,
si es que no hubieran visto a Chris detrás de ella. Entró y la tomo
de las manos, tal vez bruscamente, apartándola de la mirada de
todos esos hombres. Dulce trató de zafarse, pero él aumentó la
fuerza en sus brazos.UCKER: Quiero una habitación -le dijo a la mujer de treinta años que
atendía el lugar. Esta sacó una llave de entre sus bolsillos delanteros
del traje, la extendió-MUJER: Son treinta dólares, guapo -Dulce soltó una risa exagerada
al escuchar la voz ronca y masculina de esa mujer. Fue entonces
cuando se percató que no tenía senos. Maldición, era travesti.
Chris se incomodó. Y más por que Dulce se reía de la situación. Sacó
de la billetera los treinta dólares que le había pedido-UCKER: Ahí están -le entregó-
"MUJER": Duerme bien, campeón… -le dijo dándole las llaves mientras
le sonreía sutilmente-Dulce lo miró, aguantándose las carcajadas. Chris la miró mal, avanzando
justo detrás de ella hasta la habitación.
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Secuestrada Seduceme Vondy III
Novela JuvenilEllos dos... volverán a encontrarse... y él... deberá luchar por lo que más ama... *No hables. No respires. Él está cerca, y apunto de seducirte de nuevo.* Esta es la ultima parte de la novela *Secuestrada* te recomiendo leer las otras 2 partes ante...