Nuestros recuerdos. Sakura Card Captor Fic

Confesiones parte 1

- Haruka, podrías concentrarte un poco más en lugar de seguir fulminando con la mirada a la capitana - regaño su amiga a la chica de ojos grises mientras esta la ignoraba y se dedicaba a estirar aun mirando con odio a la ojiverde.

El día anterior Sakura la había desplazado tan rápidamente que aún no podía creer que no hubiera pensado en nada para detenerla, sencillamente la había empujado fuera y ni siquiera la dejo saber nada sobre el diagnostico, lo que había servido para demostrarle la poca importancia que los demás parecían darle en la vida de su senpai, la minimizaban, casi como si todos la consideraran la mascota del castaño y eso no solo la hería, también la llenaba de furia, porque ella quería ser lo más importante para el cómo Shaoran lo era para ella, él ocupaba el primer lugar siempre en su lista, pero ese lugar en la lista del ambarino aún era ocupado por Kinomoto, aunque no lo mereciera, ella tenía el poder de alejarla de su vida con solo tronar los dedos y al final ella comprendió que no lo soportaría mas, ella quería ese lugar, lo deseaba más que nada y lo conseguiría.

- Estoy harta... ya no lo soportare ni un minuto más - susurro con furia mientras daba media vuelta, olvidando el entrenamiento y girando sobre sus talones abandonó la cancha para sorpresa de sus compañeras.

- Capitana, ¿qué debemos hacer? - preguntó angustiada la chica a su lado.

- Seguramente Haruka tuvo un problema, así que dejémosla, no la necesitamos. - su voz dulce se había perdido a la mitad de la frase para darle paso a la molestia antes de que ella tomara su lugar y comenzara con la rutina.

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La sub capitana de porristas caminaba en círculos tan grandes como el estrecho pasillo le permitía, miraba el celular constantemente, comprobando la hora cada dos por tres.

Después de abandonar el entrenamiento, corrió tan rápido como pudo al salón de Shaoran, donde sabía que lo encontraría y después de gritarle con todas sus fuerzas que necesitaba hablar con él en privado, provocando que los presentes la miraran con confusión y el castaño con sorpresa, comprendió lo que había hecho así que corrió para alejarse.

Ya estaba hecho, no podía arrepentirse y no lo hacía, tal vez pudo escoger mejor el momento o las palabras pero era necesario que pusiera en palabras todo lo que la consumía si no quería que lo que sea que sucedía en su cabeza acabara con ella, porque lo había notado, además del inmenso amor que sentía hacia Shaoran Li, sabía que ante su presencia lo que sea que había despertado en ella en los días anteriores permanecía bajo control y podía volver a ser ella misma y por supuesto no iba a renunciar a ello.

- ¿Ayanami? ¿Qué es lo que querías decirme? - Shaoran había llegado justo a tiempo para encontrar a la chica de ojos grises mirarse en un espejo con la mirada perdida.

- Senpai... - perdió la convicción ante la fuerza de la mirada ambarina. ¿Podria confesarle sus sentimientos sin tartamudear? ¿Estaría haciendo lo correcto o lo perdería para siempre?

El castaño la miro extrañado, por un momento y ante la expresión vacía de la chica algo había rezumbado en su mente, era lejano y le costaba trabajo verlo con claridad, pero una memoria rasguñaba su mente y era incapaz de alcanzarlo.

- ¿Estas bien? - preguntó después de que ella no dijera nada durante largos minutos.

Haruka asintió, no creía poder decir nada ahora que lo tenía frente a ella, ¿cómo podía?, el no había mostrado ningún tipo de interés en ella de manera romántica, seguramente la veía como una hermana y eso la lastimaba.

- Bueno, si no vas a decir nada, me voy, tengo cosas que hacer. - continuo molesto, había acudido a su llamado por la manera intempestiva en que lo había citado, pero tenía cosas más importantes que hacer que limitarse a mirarla avergonzarse. - Llevare a Sakura a su casa, tenemos mucho de qué hablar...