Poderes

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Sakura sonrió con verdadera alegría al ver por quinta vez el mensaje que Shaoran le envió 15 minutos antes, era sencillo, solo le deseaba buenas noches, sin embargo, la frase final hacia su corazón latir alocadamente.

Después de la revisión de la enfermera, casi 1 hora después, la dejaron marcharse a su hogar, el castaño no le permitió irse sola, asi que la acompaño hasta las puertas de su casa, se despidió con un simple beso en la mejilla pero ella lo atrajo hacía si y lo beso con insistencia, perdiéndose una vez más en las sensaciones que le provocaban los besos de Shaoran, sin embargo tuvieron que separarse al escuchar el gruñido proveniente de Touya, quien los miraba desde el recibidor, lo que provoco una mirada de odio de parte del ambarino y una risita nerviosa de parte de la castaña. Ni siquiera los gritos y regaños de su hermano, eliminaron la expresión soñadora de su rostro, e incluso, después de cenar, donde su hermano se llevó sus camarones e incluso ella le ofreció el último, se eliminó su alegría. Subió las escaleras prácticamente brincando y se lanzó directo a su cama para permitir que los recuerdos de las horas pasadas la invadieran, las palabras de Shaoran, dejando en claro que para él solo existía ella, los besos que le dio casi con amorosa reverencia, sus caricias que le provocaron deliciosos escalofríos y los "te amo" susurrados a su odio. Lo quería tanto…

- Sakura, ¿estás bien? ¿acaso tienes fiebre? - Kero poso delicadamente una de sus patitas en la enrojecida cara de su dueña, sorprendiéndola y logrando que se enderezara de golpe y caminara de un lado a otro procurando tranquilizarse.

- No es nada Kero…

- Estas muy roja…

- ¡Que no es nada! - grito con fuerza, enrojeciendo aún más, mientras su guardián reía sin disimulo.

- Si tú lo dices… - repentinamente recupero la seriedad mientras sus pequeños ojitos negros se posaban en la caja que le dio más temprano. - ¿Deberíamos regresar la caja a su lugar?

Sakura olvido su alegría mientras sus ojos se dirigían a la mesa donde descansaban los objetos, recordando las imágenes que vio más temprano, el temor por las personas que amaba la invadió nuevamente, si su magia era lo suficientemente fuerte podria protegerlos ahora, ¿verdad?

El libro de las cartas brillo y ella lo tomo con cuidado, con la imagen de Shaoran dentro de un circulo negro, cansado, rendido, antes de ser consumido, detrás de sus parpados, la desesperación la invadió, no iba a permitir que nadie lo dañara, no si ella podía impedirlo, y lo haría.

Aun con los ojos fijos en los brillantes colores de los trajes tomo su teléfono y marco el número 4.

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- Yukki, ¿qué haces aquí? - preguntó Touya sorprendido al ver a su amigo en la entrada de su hogar, despeinado y aun con el traje del hospital puesto y arrugado. - creí que hoy tendrías guardia.

- Asi es, pero… - la mirada nerviosa del doctor se perdió en las escaleras, sentía los nervios provenientes de su verdadera identidad sobre pasar su usual carácter. - Sakura me llamo hace unos minutos…

- ¿Esta bien?

- No lo sé - respondió con nervios al ver la repentina preocupación en el rostro de Kinomoto. - Ella sonaba muy nerviosa cuando conteste, mi otro yo está preocupado, por eso deje el trabajo y vine tan rápido como pude.

Nuestros recuerdos. Sakura Card Captor FicWhere stories live. Discover now