12.

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Momentos después de que Florence bajara, Claris permaneció en aquel oscuro pasillo, mirando la puerta del baño y recordando el horror que se encontraba detrás y el piso cubierto de sangre que se deslumbraban como una pintura tétrica y lúgubre en su mente, bajo las escaleras lentamente, fría, envuelta en un trance continuo, tenía la mirada perdida, en ella no había nada más que una locura repugnante que la dominaba por completo, caminaba entre las personas cuando Nathan logro verla y la siguió,
Claris caminaba por el pequeño bar, cerca de la mesa donde el pastel ya había sido servido, había platos sucios y botellas de cerveza y entre todo, una botella de ron que no había sido abierta, se acercó a ella y junto, encontró el cuchillo con el que el pastel había sido cortado, lo miro por un momento, lo agarro y lo escondió debajo de su vestido, Nathan se acerco a ella y la tomo fuertemente del brazo, ella volteo y el le grito preguntando por Jacob, ella solo río involuntariamente.
- que mierda te parece tan gracioso!!? Dijo mientras sus ojos se desorientaban por lo ebrio que estaba. Claris vio su mirada contemplando la ignorancia y la perdición, el la había arrinconando contra la pared cerca del refrigerador, el lugar estaba oscuro y solo pequeños fragmentos de luz blanca provenientes del pasillo lo aclaraban. Ella se acercó a su odio para susurrarle algo.
- tranquiló, podemos ir a otro sitio? Dijo, luego se acerco a la mesa y tomo la botella, volvió a mirarlo y le sonrió levemente, como insinuando una invitación sensual.
- que? le contesto confundido.
- No quieres venir conmigo?
- solo quiero saber en donde esta Jacob!!
El rencor, la impotencia y una furia desmedida azotaban su corazón, ver ese asqueroso rostro y escuchar esa nauseabunda voz la llevaban nuevamente a esa habitación, se sentía rota, débil e insegura, en donde había quedado todo lo que le había dicho a Florence, el miedo la paralizaba y su cobardía hacía que su voz temblase, pues ella no tuvo el valor para defenderse pero Florence si.
La noche la había dañado de una manera irreparable y su mente había colapsado en su propio abismo infinito, la realidad ya era algo que no tenia importancia, venganza, solo venganza era lo que quería y su sangre hervía por verlo muerto, pero sobre todo, tenía un deseo descontrolado por matar a Dylan, pero tenía que encargarse de algo antes.
- vamos, sólo será un trago dijo mientras se acercaba de manera considerada a Nathan, quien le sonrió tomando la botella y sacándola de la casa, caminaban por el patio viendo a todos.
- y... y dime, dime te estas divirtiendo? Decía mientras la abrazaba al caminar. Claris no respondió y solo miro el piso.
- Sabes... que tienes unas hermosas piernas? Te veía desde que llegaste y... decía riendo, me volviste loco, pero el idiota de Dylan te quería para el, fue una mierda, pero... pero ahora tú viniste a mi.
- solo quiero beber un trago dijo mientras su corazón latía a mil y su visón empezaba a nublarse por la ansiedad y el miedo, miraba hacia atrás y veía que cada vez se alejaban más de la casa.
El terror hacía que quiera salir corriendo de ahí pero por otra parte ansiaba vengarse.
La delgada línea que regía el bien y el mal dentro de ella había desaparecido por completo la ansiedad la estaba desesperando y cuando ya estaban considerablemente lejos de todo, detuvo a Nathan llevándolo cerca de un árbol, sin mirarlo abrió la botella y empezó a beber, frunció el ceño y quiso escupirlo pero lo pasó, le pasó la botella a Nathan y el bebió también.
- No pensé que te gustara beber, le dijo.
- solo quiero entrar en ambiente, así me sentiré mejor.
- en ambiente? En ambiente... para que? Dijo acercándose a ella, Claris miró al piso sintiendo su respiración bastante cerca y notando lo excitado que estaba, como un asqueroso animal en celo pensó.
- nada, mírame, dijo tomado su barbilla y acercando aún más su cuerpo hacia a ella, sus genitales empezaban a rosar contra su vestido, mientras ella solo respiraba más y más rápido
- puedes tocarme, se que quieres, al oír esto Claris lo alejó rápidamente de un empujón.
- que sucede bonita?
- tu...tu me das asco dijo sacando el cuchillo y llevándolo contra su cara, los ojos de Nathan se abrieron de golpe y se cubrió con su mano, se alejó de ella sosteniendo el chorro de sangre que empezaba a correr por la herida que le causó
Claris temblaba por la adrenalina y el miedo, corrió nuevamente hacia Nathan apuntándolo con el cuchillo. El se puso de pie y empezó a gritarle que se calmase, Claris dirigió con fuerza la navaja contra su estómago pero este la detuvo con todas tus fuerzas tratando de quitárselo, Claris mordió su mano y el cuchillo cayó al piso. Rápidamente Claris se agachó para buscarlo pero Nathan tomo su mano y la empujó haciendo que cayera, patio el cuchillo con ira y se abalanzó sobre ella.
- eres una maldita perra
- púdrete!!! Grito tratando de escabullirse por la tierra pero el la abrazo fuertemente
- te jodiste dijo levantado su falda y me tiendo sus manos en ella, Claris grito moviéndose desesperadamente y logró meterle un rodillazo en los genitales, lo que le dio tiempo para alejarse un poco, llena de pánico buscaba el cuchillo como una loca, Nathan quien gemía de dolor se levantó nuevamente con algo de dificultad. La mirada atormentada y desesperada de Claris recorría la tierra hasta que logró ver la botella de ron que había traído, Nathan se acercó y volvió a ponerse encima de ella, mientras trataba de romper su vestido Claris agarro la botella y se la estrelló en la cabeza, Nathan cayo al instante, boca arriba e inconsciente, aun emitía pequeños movimientos, Claris quien había sido cortada por fragmentos de vidrio, se levantó sostenido el trozo de vidrio roto, corrió hacia el y lo destruyó en su cara, siguió apuñalándola hasta casi desfigurarla por completo. No podía sostener el odio y la locura al hacerlo, respiraba muy agitadamente, luego tiro la botella rota y se arrinconó bajo un árbol intentando calmarse y limpiarse los rastros de sangre que habían cubierto su vestido, en medio del aterrador silencio de los arboles sus manos acariciaron la tierra, apoyó su mejilla en el árbol, agobiada pero con una irremediable sensación de placer, cerró sus ojos escuchando el viento y algunos cánticos de pájaros en las ramas lejanas.
Dylan se había sentado en el piso con una cerveza en la mano mientras pensaba en cómo carajos ese video había llegado al teléfono de Scarlett, entre pensamientos vio el auto de Andrus estacionado junto al resto y el nombre de Florence le inundó la mente. Se levantó tambaleando y aventó la botella contra el auto. Entro en la casa y se acercó a un tipo preguntando por Florence, el sujeto le dijo que no sabía nada y lo empujó con brusquedad, otro chico se acercó y le pregunto que qué sucedía, Dylan le pregunto lo mismo y el chico respondió que la había visto a subir siguiendo a Jacob hace un rato, Jacob, mierda!! Pensó., el chico siguió y dijo que tal vez fueron a tener sexo y que no debería interrumpirlos. Dylan subió las escaleras de prisa, lo más rápido que podía y busco en las primeras habitaciones sin encontrar a nadie, cuando vio toda la sangre regada en el piso que parecía provenir del baño, corrió y abrió la puerta, al entrar vio un bulto tapado con el abrigo que Florence traía hace un rato, se acercó lentamente y lo descubrió, Vio a Jacob muerto y mutilado con la cara desfigurada.

En el alba de la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora