Frente a Frente

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La tarde fue lenta, tormentosa, simplemente horrible pues después de salir corriendo alejándose de Adrien se encerró en su habitación rogando porque nadie la molestará.

Al tocar su cama se cubrió el rostro con una almohada y sin poder resistir un segundo más se soltó a llorar, dejo que sus ojos derramaran todas las lágrimas que su corazón guardaba. Lanzó gritos ahogados sobre la almohada liberando su frustración. Paralelo desfogando su dolor y coraje.

No solo sentía molestia consigo misma por el haber traicionado a su novio, sino que también se sentía molesta con Adrien por, aun sabiendo que tenía pareja, se atrevió a besarla sin pudor o arrepentimiento alguno.

¿Que se creía? Por el hecho de que le dijera que estaba enamorado de ella, olvidaría todo lo que tenía ahora en su vida y le diría "Casémonos, tengamos un hámster y vivamos feliz por siempre". No, claro que no

Entonces, ¿Porque había respondido a su beso como si aceptará sus sentimientos y decidiera que era con él con quien quería pasar el resto de su vida?

Confundida y bastante cansada se rindió al sueño teniendo un enredo en su cabeza, hasta que su madre subió a despertarla.

- Cariño tu celular no ha dejado de sonar, no quería despertarte pero es Luka y como no lo has visto, bueno creí que querrías hablar con él - aun algo dormida agradeció y tomo la llamada.

- Luka, perdón me he quedado dormida...

- Estoy por llegar, sal a tu balcón - colgó preocupándola, quizá su conciencia le hacía creer que él ya lo sabía todo.

Salió al balcón tal y como se lo pidió, se abrazó a si misma sintiendo la brisa fría recorre el cuerpo. No había notado que ya había anochecido, realmente había dormido toda la tarde.

A los pocos minutos escucho a alguien llegar al lugar, se tensó esperando el reclamo de su novio mientras daba vuelta lentamente para enfrentarlo. Pero lo único que sucedió es que se vio envuelta en los fuertes brazos del chico.

- Diablos Marinette, me he llevado un terrible susto. Alya me hablo para preguntar por ti, dijo que no llegaste a su encuentro, le comente que quizá estabas con Adrien pero después me devolvió la llamada diciendo que hacía más de tres horas que te habías ido. Creía que algo te había sucedido - en su abrazo podía sentir el miedo que se había apoderado de Luka, casi podía jurar que sintió una lagrima caer sobre su cabello.

- Pe-perdón...

Luka se separó de ella mirándola a los ojos, estaban bastante irritados. Aún más que horas atrás Marinette se sintió verdaderamente culpable sus acciones, solo varias largas de auténtica culpa las cuales Luka limpio con sus pulgares.

- No linda, no llores. Perdón - Luka se estaba disculpando, eso estaba mal ella era quien debería estarse disculpando, no él - Lo siento, no quería hacerte sentir mal, es solo que me preocupe demasiado. Marinette eres mi vida y sentir que algo pudo haberte ocurrido... No puedo con eso amor.

Las palabras del chico eran totalmente devastadoras para ella, era como si le enterrara un enorme y afilado cuchillo en medio de su pecho. Verlo preocupado y ahora angustiado por ser el causante de sus lágrimas no hacía más que hacerla sentir más culpa.

- Perdóname, no volverá a pasar.

- Te amo Mari - limpio nuevamente sus lágrimas y la beso dulcemente, solo como él sabía hacerlo.

Poco a poco el beso fue subiendo de nivel, volviéndose más apasionado, con más necesidad de sentirse cerca uno de otro. Ella mordió su labio causando que Luka perdiera la cabeza, el tomo por la cintura colocándola sobre el barandal y acercando sus caderas, ella soltó un gemido en respuesta. Él comenzó a subir sus manos por el abdomen plano de la chica hasta llegar a sus pechos por debajo de su blusa.

¿Por qué? Porque la amoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora