Todo o Nada

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Marinette veía el campo tranquilamente debajo de un árbol, disfrutaba la brisa sobre su rostro mientras meditaba lo que había sucedido hace no más de una hora.

Se sentía culpable por su comportamiento, también estaba molesta pues parecía nuevamente la niña de 15 años que moría de tanto amor por Adrien. Esa niña inmadura que no le importaba los sentimientos de los demás, todo el mundo podía terminar mientras que Adrien estuviera bien, no importaba.

Bufo molesta dándose cuánta que tristemente seguía siendo aquella niña tonta y lo peor de todo era que Luka sería quien saliera más dañado de todo eso.

- Te has mantenido muy callada Marinette ¿Todo bien?

La amable voz de Adrien causó un extraño calor reconfortante en su pecho. Notó que estaba perdiendo la batalla contra Adrien sin siquiera pelear.

- Si, no te preocupes.

- ¿Segura? Estás muy callada desde que se fue Luka - le dolía en lo más profundo decir esas palabras pues aceptaba en voz alta que los sentimientos de Marinette giraban ahora en torno al de pelo azul. La estaba perdiendo.

- Lo lamento, no quería arruinar tu tarde, es solo... Es que yo... - bajo la cabeza con tristeza - No sé qué me pasa.

Adrien comenzó a sentirse culpable, sentía que todos los problemas que ahora tenía Marinette eran causados debido a él. Eso era lo que menos quería, amaba a Marinette y lo único que quería era su felicidad, si era a su lado era solo un bono extra.

Tal vez era momento de hablar con claridad, de expresar los sentimientos que había guardado por tanto tiempo. Por fin gritar a los cuatro vientos que la amaba, la amaba tanto que dolía. La amaba en verdad.

- Marinette yo, tengo algo que decirte - Marinette lo miro entregándole completamente su atención.

- No vine solo a trabajar, vine porque necesito decirte... Yo te...

- ¡Volverás a ser Cat Noir! - Plagga los interrumpió con un gran trozo de camembert.

- Bueno es que no estoy muy seguro si me quedaré - respondió llenando de tristeza a los presentes, la mirada de la chica era de clara decepción, al instante se arrepintió de sus palabras - además seguro que Marinette ya ha encontrado un mejor portador que yo.

- Pero de qué hablar, si Marinette me ha tenido en la banca desde que renunciaste al anillo - Adrien se sorprendió por las palabras de Plagga pues si bien Marinette podría contra cualquier villano sin la ayuda de su miraculous, no esperaba que reservara el anillo únicamente para él.

Eso le dio la pequeña esperanza de que ella aun esperara su regreso, que esa fuera la razón para que mantuviera el anillo guardado. Sonrío esperanzado rogando porque aquello fuera cierto.

- Supongo que ya tienes tu vida hecha un Londres.

- Bueno mi vida es donde estés tú - Marinette se quedó de piedra al escucharlo y Adrien ya estaba decidido a hablar de una buena vez - Marinette si tú me aceptas yo me quedaré aquí únicamente para dedicarme hacerte feliz, viviré para amarte, protegerte y darte todo porque lo mereces - se puso de pie, tomando sus manos la levanto hasta su altura y mirando directamente a sus ojos dijo - Te amo Marinette, lo he hecho por mucho tiempo pero estaba segado por Ladybug. Sé que suena tonto pero mi amor por ti me cegaba para no aceptar los sentimientos que siempre tuve por ti. Siempre te consideré mi mejor amiga, mi compañera y mi otra mitad, estoy seguro que estamos para complementarnos. Te amo, te amo, te amo lo diré las veces que sean necesarias hasta que me aceptes - sin esperar respuesta por parte de la chica la acerco quedando a centímetros de su rostro y al notar que ella no se negaba la beso.

Sus labios se rozaron tímidamente, eran apenas una caricia hasta que tuvo la necesidad de saciarse de ellos. La tomó por la nuca profundizando el beso, al principio ella respondió tímidamente pero al cabo de unos segundos se entregó a él, le permitía invadir su boca, que su lengua recorriera sus labios profanando lentamente su interior. Marinette de dejo llevar por el deseo frustrado que por años guardo, aquel sueño de niña se cumplía en aquel momento y se sentía dichosa.

Cuando sus pulmones les exigieron oxigeno se separaron, Adrien junto su frente con la de la chica sintiendo dichosos su corazón. Marinette le había correspondido lo que significaba que ella aún le amaba, no podía ser mejor.

Tikki y Plagga se quedaron atónitos ante lo que veían, eran conscientes de los sentimientos de sus portadores pero también que Marinette estaba con Luka y para coronar sabían que el chico se le propondría al día siguiente, Sass se los había contado. Sentían pena por Luka pero al menos Plagga estaba feliz por su amigo.

- Esto... Marinette... Gracias por aceptarme - la chica abrió grandes los ojos y cayó en cuenta de lo que había hecho.

- ¡No! - grito separándose de él - Esto no estuvo bien, yo estoy con Luka... no puedo hacerle esto... Lo siento Adrien - sus ojos comenzaron a derramar lágrimas mientras se alejaba del lugar dejando atrás al chico que por años amo en secreto.

- Lo siento Adrien - Plagga seguía a su lado decepcionado por la desdicha de su amigo.

- No lo hagas - Adrien sonrío a su kwami - ella me beso ¡Me beso Plagga! Lo que quiere decir que aún tengo una oportunidad. Marinette aún me quiere y estoy seguro que poder recuperarla - el muchacho se escuchaba genuinamente entusiasmado.

- Creo que lo único que te jugara en contra es el tiempo

- ¿A qué te refieres?

- Bueno pues mañana en la noche Luka tiene planeado pedirle matrimonio a Marinette, todos lo saben, incluso nosotros. Sass no para de hablar de lo afortunado que es este portador - Adrien dejo de escuchar, todo lo que había en su mente era que debía impedir esa propuesta - ya sabes, eso de que por años el portador de a Sass y el mío terminan irremediablemente enamorados de la Ladybug en turno. Luka sería el primero en obtener el amor de la chica.

- No lo hará.

Sus palabras eran determinantes, no permitiría que Luka se quedará con la chica, con su chica.

- Plagga ¿Marinette sigue patrullando todas las noches?

- Si pero ahora lo hace a lado de Luka o bueno Viperion ¿Por qué?

- Pues esta noche entraremos en acción.

No le importaba que fuera un poco de juego sucio o que sus acciones no fueran dignas de un caballero, la situación lo ameritaba. Esta vez sería todo o nada así que no se permitiría perder la última oportunidad de conseguir el amor de Marinette.

¿Por qué? Porque la amoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora