Viernes 20:03h
Estiro mi camiseta por la parte trasera y baja de mi espalda hasta sentarme sobre ella queriendo evitar así cualquier posibilidad de que cualquier persona de este bar vea mis bóxers. Mis pies no tocan el suelo en este taburete que hay junto a la barra central de bar por lo que cuelgan con gracia escasa. Mi mirada se dirige distraída hacia la mesa donde se encuentran Bangtan, todos sonrientes y bebiendo comparten anécdotas de sus ligues como suelen hacer de costumbre mientras esperan al último miembro que falta de su grupo y el más popular y por ende cabecilla de grupo.
Kook y yo llevábamos aproximadamente media hora aquí, nos hemos saludado entre todos y parecía una reunión divertida y alegre hasta que los comentarios indirectos, los cueles eran muy directos, de Yeosang hacia mi persona se han hechos presentes con sarna y viejo rencor creciente.
Han faltado segundos para que las tres chicas que tienen la suerte o la desgracia, según lo mires, de formar parte del clan de las chicas que han conseguido enamorar y amarrar a un Bangtan hincaran el dedo en la llaga sobre mis actos y mi extraña relación con Kook. Lo que ellas critican y no saben es que nuestra relación es cien veces más sincera y más real que la que ellas creen poseer.
Por eso me encuentro solo, siendo observado por los ojos acusadores de Yeosang desde la lejanía y siendo el blanco de los cuchicheos y risas de las novias Bangtan. Pero como suele ocurrir también, me es completamente indiferente porque el resto del grupo está contento de que esté aquí. Sé que verdaderamente no nos conocemos, pero me caen bien por protegerse así entre ellos y yo les caigo bien por protegerlos también. Me tienen respeto por ser quien soy y por quien soy para sus amigos Suga, Hyuna, J-Hope y Kook.
La idea de hacer la fiesta que les debo mañana los ha motivado en demasía, podría jurar que soy el único que tiene al 99% de los Bangtan entre mis manos y rendidos a mis pies. Todos sabemos que ese 1% es un chico alto de cabello rubio sujeto en una coleta y con una pequeña drogadicción.
-Toma, es lo único que tengo. -La voz de Kook, que ha vuelto a mi lado de su corto viaje al coche en busca de algo que me pueda poner ya que Jennie no me ha dejado coger mi chaqueta, me saca de mis pensamientos buscando la razón todavía incomprendida del todo por mí del odio de Yeosang hacia mi persona.
-¿Una puta sudadera de Bangtan? -Mi voz sale con un tono tan molesto como el que estaba gastando en mi mente. -¿Soy una conquista más? -La coloco sobre mis piernas para ver la espalda donde están los nombres de cada uno de ellos en plata y el suyo resalta en rojo. No soy idiota, pues sé para que las usan ya que JooE me contó que tenía una de Suga. Lamentable y rastrero. Pero también es cierto que eso pertenece al antiguo Kook y no al que tengo frente a mí.
-Eres "la conquista". -Una sonrisa de súplica y medio perdón le ilumina la mirada y su dedo índice de su mano diestra se levanta en alto como si fuera un gran descubrimiento o una anotación importante.
-Así no ayudas a que me la quiera poner. -Digo con fastidio y fulminándolo con la mirada.
De modo dramático lleva ambas manos a su pecho y finge un grabe dolor haciéndome reír levente. Retiro mi mirada de él pues sigo decidido a no llevarla, eso tan solo daría más de que hablar a las tres chicas de mi espalda. Sus manos abren mis piernas e interpone su cuerpo entre ellas para acercarse provocador hacia mí. Lo veo de reojo agarrar la sudadera y sin más la coloca sobre mi cabeza dejándola toda arrugada en mi cuello y hombros.
-Vamos, tienes frío. -Sus manos intentan peinar ahora mi cabello revuelto por el hecho de ponérmela a fuerza. -No te pido que te pasees por ahí con ella, solo que la lleves hoy ya que tu querida amiga Jennie no te ha dado tu chaqueta por echar un polvo. -Vuelvo a fulminarlo con la mirada, pero él permanece inexpresivo mientras decido colocármela manga por marga.
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Gamer's (KookMin) Adaptación propia
FanfictionJimin se muda por diversas razones a Seúl (Corea del Sur) para vivir junto a su primo Hoseok, que lleva varios años trabajando allí y viviendo junto a su mejor amiga llamada Hyuna. Jimin se considera un jugador empedernido y sabe detectar por ello a...