El día de la cita había llegado, yo no sabía lo que estaba haciendo, porque aún sentía el mismo miedo que al principio, cuando conocí a Alex en la fiesta, ni siquiera tenía idea de qué ponerme.
Le pedí ayuda a Antonia, dijo que ella nunca había tenido una cita que era la menos indicada para eso, qué mejor le llamara también a las otras dos chicas y llegarían a mi casa las tres. Llegaron rápidamente, me terminé de arreglar, luego de unos cinco minutos más o menos, llegó Enrique, cuando me vio se quedó boquiabierto, dijo:
-Qué?, acaso me veo mal- pregunté preocupada.
-No, no todo lo contrario. Wow! Que hermosa estás, pero sí arreglada no te ves tan mal eh! jajajaja-dijo en tono de burla.
-Y tú no te ves nada mal, eh, jajajaja - le respondíAl llegar al restaurante, ya estaba ahí Alex, aunque Dayana no llegaba, creímos que había dejado plantado a Enrique, así que pasamos a cenar. Pude notar que Enrique se sentía incómodo, luego de salir del restaurante, Alex me dijo que la había pasado muy bien, lo típico; la verdad yo sabía que no era cierto, o sea no me desagrada, aunque tampoco fue así como que ¡Uff somos el uno para el otro!, no, sentía que le faltaba algo.
Cuando íbamos rumbo a mi casa Enrique y yo estábamos bromeando sobre la cita, quería disculparse por lo de Dayana.
-Ey no te preocupes, sé que tú no eres el culpable de que Dayana no viniera como lo dijo-lo interrumpí antes de que empezara a disculparse.
-Sabes, creo que no vino porque no le agrado y la verdad a mí tampoco me agrada sólo que la invité para acompañarte y no te sintieras así de insegura-dijo con una sonrisa a medias en el rostro.
-Descuida, creo que debes aprender a mentir mejor-
Varias semanas después, regresamos a la escuela y era otra vez la misma aburrida rutina, o al menos eso creía, pues tenía que inscribirme a una actividad extra curricular, siempre me inscribía a básquetbol, pero esta vez ya estaba aburrida, quería algo nuevo, sin embargo, llegué tarde, así que cuando llegué solo quedaba voleibol y soccer, no sabía por cual decidir, lo pensé un par de segundos elegí soccer, en la siguiente mesa estaban las animadoras diciendo que aún tenían lugares y yo pensé ¡Ni loca! La única forma de entrar a ese equipo sería por una apuesta, pues esas chicas exageran demasiado con sus rutinas, además me han dicho que la mayoría de esas chicas padecen anorexia. Yo entré al equipo de soccer, Antonia a teatro, Enrique entró a soccer, pero varonil, Rihanna se inscribió como Animadora, eso iba con ella y por último, Estephanie estaba en voleibol.
Con el paso de los días, durante los entrenamientos descubrí que era buena en soccer, al menos eso creía yo, hasta que una chica del equipo me dijo que ella era mejor que yo, así que yo la ignoré, aunque no pensé que se fuera a ofender aún más, por lo que fingió que se cayó y me culpó, el coach ya me conocía , por eso no le creyó. Salí de entrenar, me dirigía a la salida de la prepa me encontré a Enrique y me acompañó.
Estaba a punto de llegar a mí casa, cuando recibí una llamada de mi papá , le contesté, él se escuchaba muy preocupado, le pedí que se calmara, pregunté:
-¿Qué es lo qué pasa?-grité desesperada.
-Es tú madre...-
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Inefable
Mistério / SuspenseJade una chica con un estilo muy deportivo, que se esfuerza por ser perfecta, vive muchas aventuras y problemas que la hacen que cambie, lo que no sabe es que alguien la espía todo el tiempo.