Una de esas Chicas (C.C. y tu) [PAUSADA]

Parte 26

En escena.

[Siguiente semana de clases]

Quede sin mi hermoso auto de nuevo gracias a Mad.

Odiaba ir en el auto bus escolar, todo allí se comportaban como animales.

Al llegar a la escuela empece a bajar del bus, hasta que un grupito de inadaptados me empujaron fuera del bus haciendo que perdiera el equilibrio y cayera fuera de éste.

- ¿te encuentras bien? - hizo aparición Alex

Estaba un poco aturdida por el golpe pero reaccione al verlo.

- si ya se me pasará. - quité un poco su preocupación

- ¿Que sucedió con tu auto? - cuestionó al ver mi estado.

- Mad, Mis tíos, Castigos. - enumere incorporando me del suelo con su ayuda - Nada nuevo Ale. Ella las hace y yo las pago.

- Que raya, y yo emocionado porque tendría novia con carro. - con eso último lo mire mal. - ¡¿Que?! Es cierto, no estaría mal en mi estátus, por eso fue que acepte. - continuó hablando mientras entra vamos al instituto.

-Puedes dejar de decir estupideces. - lo mire mal.

llegamos hasta nuestros casilleros y buscamos nuestros libros. 

-¿Que harás en la tarde? - pregunto con una mirada sugerente.

-Debo reunirme con Mia para lo del bendito proyecto de química ¿Por?

-Queria invitarte a salir un rato. Fingir bien ya sabes - tomo mi cintura. Acto que debo decir me tomo por sorpresa pero debía acostumbrarme a sus arrebatos; solo queria volver a mi anonimato.

- Sabes... - puse mis manos detrás de su nuca. - Se me ha venido una idea grandiosa.- lo mire divertida y él solo me me miraba con esos ojos de huevo frito.- Calmate no es lo que crees; pero si me vendría bien tu ayuda. - fruncio el ceño. - seras mi Sancho Panza. - me burle un poco en su cara, estaba confuso con todo lo que le había dicho.

- Sea lo que sea mi madre me lo prohibió. - bufe

- Te escribo a la hora de salida, bien. - di un casto beso en sus labios.

•••

Cafetería de la escuela.

¡Kenny! ¡Kenny aquí! - sabía de quien se trataba, no queria estar con mi prima y sus amiguitos los idiotas.

Hice caso omiso y seguí mi rumbo a la mesa de siempre, donde reinaba mi soledad.

Esperen, que hace Mía en mi mesa. Esta mujer me saca de quicio. Rode los ojos. Me di vuelta me senté frente a Madison.

- Hola Kenny. - habló Louis asomando una sonrisa burlona sin despegar los labios. Los mire sin expresión alguna.

- Primita, siento haberte dejado esta mañana, Louis llevaba prisa en su auto. - dio una excusa por haberme dejado para ir a la escuela.