Capítulo 16:
Duelo
GeraldLa extraña enfermedad que ha ocasionado la hermandad a la naturaleza está destruyendo los bosques a pasos agigantados y todo lo que pueda habitar en ellos, incluyendo, a las hadas. Ya se ha expandido por todo el pueblo donde vivía Rocío con su familia, dejando suelos envenenados, incapaces de sostener ningún intento de vida.
Los pobladores aterrados sin saber qué hacer ante una situación que para ellos no tiene lógica, ni una pronta solución. Algunos lugareños han acarreado el problema a las criaturas sobrenaturales que provienen de la naturaleza, y con lo ocurrido en la plaza, la muerte de Cristina... esa verdad a medias está cobrando fuerza. Las personas están enfurecidas y más cegadas que antes, su única solución es acabar con las hadas, sin excepciones.
Nuestra estadía de este lado del mundo cada vez es más crítica.
Eso no es lo peor de todo, no, lo peor es que estamos muy lejos de salvar la tierra y salvarnos a nosotros mismos.
Dar, Eulis y la sirena han regresado cuando deberían estar en Encantus en busca de ayuda. El único paso que hasta hace algunos días sirvió para traer a Susej y Shema, ahora está cerrado, las aguas de las sirenas se han dividido, al igual que su acuática población, así como sucedió con Encantus.
Se nos acabaron las opciones.
Como en el pasado las defensas también bloqueo toda entra a Encantus, y con la ayuda de las habilidades de Susej pude hacerle una visita a Mafer, pensé, que quizás en esta oportunidad funcionaria, mas no fue así.
Mi hermana con cada día que transcurre se encuentra más débil. Lo que ha estado envenenando la tierra, le afecta directamente a ella. El cambio de sus ojos la coloca en medio de dos mundos, desconozco la razón, pero por el momento ella se está llevando la peor parte.
Rocío cree que es solo el comienzo de la caída de las hadas, en algún momento todos los que permanecemos de este lado comenzaremos a enfermar porque nuestra fuente de vida y magia es la naturaleza. Tampoco sabemos que tanto pueda afectarle a Encantus.
—Estás muy pensativo —comenta Rocío entrando a la cocina. Vestida de negro como es la costumbre entre los humanos, ese color es sinónimo de duelo para ellos. Solo han pasado dos días del entierro de su hija. Ella todavía no puede dormir bien. Abandono por completo sus raíces como hada, aquí es un humano más.
Yo tampoco logro conciliar el sueño, mi mente se niega a descansar. Cada vez que cierro los ojos, veo el bosque y las aguas putrefactas, no puedo sacar esa imagen de mi cabeza y la amenaza que representa.
—Estamos atrapados aquí —murmuro.
Me levanto para servirle un poco de café. Tiene oscuras sombras debajo de sus ojos. Ella arrastra una de las sillas provocando un ruido estridente. Ojalá nadie se haya despertado. Son las dos de la mañana. Exhala un suspiro al sentarse, sus brazos extendidos sobre la mesa, se ve desganada.
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Encantus. Alas de hielo (libro 5)
FantasiDiseño de portada por el venezolano @AleanellF Ha pasado algún tiempo desde que las defensas dividieron dos mundos, familias y amigos... Ahora, el caos y el miedo destrozan a un pueblo, y consumen la vida de humanos y hadas por igual, la hermandad h...