TARDE, PERO MÍO

CAPITULO 1

"Entonces así era como se conocían a los humanos primitivos en los siglos de nuestros ancestros. A los machos primitivos como hombres, a las hembras primitivas como mujeres y a los cachorros primitivos como niños"

Un alumno levantó su mano en señal de querer preguntar.

"¿Significa que todos tenemos ancestros humanos?"

El maestro negó con la cabeza, apagó el proyector.

"No todos. La cuarta parte de la población de la Tierra probablemente. Pero la mayoría tenemos ancestros alfas y omegas, de las pocas tribus que había en ese entonces"

"Se reprodujeron en cantidad"

"Así es, señor Styles. Ya conoce nuestros instintos". El timbre resonó por toda la institución avisando el final de la jornada. "Es todo por hoy, queridos alfas. Nos veremos el lunes, no hay tarea por lo que pueden disfrutar"

Harry se levantó de su asiento recogiendo sus cosas y guardándolas en su mochila, esperó pacientemente a que Liam también hiciera lo mismo.

"Menudo día, ¿no?"

"Ni que lo digas". Harry resopló. "Por lo menos no hay tarea de ninguna materia"

Liam era su mejor amigo, compañero de escuela y ahora de la universidad. Ambos compartían la misma carrera.

Desde que los alfas territoriales habían conquistado el mundo completo junto a sus omegas y cachorros matando a todos los humanos en el proceso, la vida en la Tierra pasó a ser diferente. Antes, existían pequeñas tribus de alfas y omegas en diferentes rincones de cada continente, pero los humanos seguían dominando el mundo con su egoísmo y ambición incapaces de incluir a aquellos seres en la sociedad, por lo que decidieron reproducirse, fortalecerse con el pasar de los años, siglos, hasta que lograron acabar con la última vida humana.

Pero el poder que ahora era de ellos les hizo sumergirse en ideas de patriarcado, y empezaron a hacer cosas ilegales, como vender omegas, tener a más de una o uno bajo su mando y con su mordida. Utilizaban a los omegas, tanto machos como hembras, como máquinas para fabricar cachorros.

Y no fue hasta después de un siglo que una generación de alfas honorables nació, creciendo con el pensamiento de igualdad, bien sabía que los omegas nunca podrían igualarse a los alfas, y eso era lo que los hacía especiales y dulces. Así que solo querían hacer valer sus derechos y lo consiguieron, creando leyes y cláusulas que hasta la actualidad regían.

Las instituciones de educación, tanto como escuelas y universidades, eran exclusivas para un tipo de ser, alfas con alfas, omegas con omegas. Sus instintos no les permitían estar a todos juntos y revueltos ya que eso definitivamente no terminaría nada bien.

Harry Styles había presentado a sus quince años, sus padres inmediatamente lo inscribieron en el Instituto para alfas más prestigioso de la ciudad, donde se graduó y ganó una beca a la mejor universidad para alfas. Liam corrió con la misma suerte, consiguiendo una beca y acompañando al rizado por un largo tiempo.

"¿Crees que papá me deje ir a tu casa el fin de semana?"

"¿Enojaste a tu padre, otra vez, Payno?". Liam se rascó la cabeza y soltó un bufido.

"No es eso, padre no está enojado conmigo, tal vez papá sí, por lo de Anna, ya sabes"

"Pobre omega, no debiste ir a verla". Harry sonrió mostrando sus hoyuelos.

"Cuando te guste una omega me entenderás"

Harry rodó los ojos.

"Sabes muy bien que confío en la vida que encontraré mi destinado"