Sweet love- finalizada

Epílogo

15 años después

Anie grita y grita por toda la casa diciendo que no tiene nada que ponerse y eso el algo que verdaderamente agradezco, espero que no encuentre nada en su armario y al final desiste de ir a esa ridicula fiesta donde estaran un monton de muchachos con la hormonas alborotadas.

-¡Papá Gun, ayúdame a buscar algo en el armario!- vuelve a gritar, me remuevo incómodo y algo enojado en el sofá mientras finjo leer el periódico.

-Maldito Win- susurro enojado, desde que ese chico apareció en la vida de mi preciosa hija no ha hecho nada más que robar su atención de mi, antes yo era su hombre favorito, su superhéroe, con el que siempre quería salir de compras o al cine, pero ahora ese muchacho se ha robado toda la atención de mi pequeña.

Escucho a Gun subir las escaleras al auxilio de Anie y de pronto siento un pequeño tirón a cada lado de mi pantalón, el disgusto a desaparecido y miro los ojos brillantes y la cara llena de chocolate de Chimon y de el otro lado se encuentra Maly mi otra pequeña princesa, dejo a un lado el periódico y los siento a los dos en cada una de mis piernas, Maly sonrie para mi y en sus mejillas aparecen esos lindos hoyuelos tan característicos de Gun, cuando supe que Gun estaba embarazado de ella fue el tercer día favorito de mi vida, el primero fue el día que lo conocí, el segundo el día que nació Anie y tambien tengo un cuarto día favorito, cuando Chimon llego a nuestras vidas, había sido un día lluvioso Gun estaba embarazado de Maly y en su estado había salido de compras, yo estaba trabajando y Anie en su primer año de secundaria, cuando Anie y yo llegamos a casa Gun no había regresado aún, la noche había llegado muy rápido, Anie lloraba por que su padre no regresaba y yo estaba al borde de la locura, habíamos llamado a todos nuestros amigos y a nuestro padres pero nadie sabía nada de él, al final llamamos a la policía para reportarlo como desaparecido, tras largas horas de angustia Gun había aparecido por la puerta empapado de pies a cabeza y con el pequeño Chimon en sus brazos, Gun lo estaba ayudando a encontrar su casa pero no pudieron hacerlo, él apenas tenía dos años y no entendía la gravedad del asunto, tras varios meses de búsqueda a sus padres finalmente nos dimos por vencidos, teníamos la esperanza de que tal vez solo se había extraviado y que una madre o un padre se estaba volviendo loco por no saber de él, pero no era así, alguien sin corazón habían abandonado al pequeño...nosotros nos encariñamos con él y entonces  lo adoptamos, Chimon se convirtió en parte de nuestra familia. Gun, Anie, Maly y Chimon son mi hermosa familia.

-¿A donde va Anie?- pregunta Maly sonriente -¿puedo ir con ella?- mis entrañas se retuercen con solo imaginar a mi pequeña bebé abandonando la casa para ir de fiesta.

-Ni lo sueñes, eso jamás- le digo, ella se cruza de brazos mientras me mira molesta, pero su actitud lo único que hace es enternecerme.

Puedo escuchar la voz de Gun y Anie desde aca pero no logro distinguir que es lo hablan, pero imagino que mi amado esposo le esta dando algunos consejos para que nada salga mal en su primera fiesta, mi parte irracional me dice que suba e impida su salida a toda costa, pero la parte racional y con cordura de mi me dice que ella está creciendo, que ya no es una niña, que se esta convirtiendo en una señorita que necesita explorar el mundo y así misma, de verdad lo estoy intentando, estoy dando todo de mi para no ser un padre ogro al que su hija le teme.

-Papá- la dulce voz de mi princesa llama mi atención, baja las escaleras sutilmente, lleva un vestido color rosa, una diadema en su cabello y su lindo rostro está sutilmente maquillado, mis ojos se humedecen y parpadeó rápidamente para evitar que las lágrimas salgas de mis ojos. -¿Como me veo?- dice dando una vuelta -¿estoy bonita?-

-Estás preciosa- le digo, dejo a Chimon y a Maly a un lado, caminó hasta ella y la rodeo entre mis brazos queriendo nunca soltarla, no lo puedo evitar mis lágrimas empiezan a deslizarse por mis mejillas, Gun baja las escaleras, me mira y asiente con la cabeza mientras sonríe.

-Papá, te amo, voy a estar bien, no tienes de qué preocuparte- me dice al oído. -prometo que llegaré a las doce, ni un minuto más- me separo de ella e intentó fingir que no estoy llorando.

-Confio en ti, cariño- ella sonríe y mi corazón se tranquiliza cuando nuestros ojos se encuentran, Anie y yo tenemos una conección especial que hace que todo se sienta cálido.

Aun estoy asustado y dentro mi aun quiero que algo suceda y ella no vaya a ningún lugar pero sé que eso no sucederá. El timbre de la casa suena y Gun sale a recibir al que seguramente será Win.

-Cariño, es Win- llama Gun, Anie me abraza nuevamente.

-Estaré de regreso pronto, Papi- me dice y sale como una princesa por la puerta.

Gun camina en mi dirección deposita un beso en mis labios y me sonríe, Maly se aferra a mi pantalón y Chimon hace lo mismo.

-Bueno quien quiere ver una película mientras esperamos a que regrese Anie- exclamo emocionado y recibo un coro de si de mis hijos y esposo.

Nos acurrucamos en el sofá con una manta y palomitas a nuestro alrededor mientras miramos la película, cuando termina, Maly y Chimon se han quedado dormidos y Gun frota los ojos en señal que tambien tiene sueño.

-Duerme, amor, yo esperare a Anie- le digo, Gun asiente y se acurruca junto a nuestros pequeños.

Las horas se hacen eternas mientras espero pero al final a llegado la media noche y el timbre de la casa no tarda en sonar, me apresuro a la puerta casi cayendo, mi preciosa princesa me sonrie del otro lado, está igual de hermosa que cuando salió.

-Señor aquí esta su hija sana y salva como lo prometí- dice Win.

-Gracias por cuidar de ella- el chico por alguna razón ya no me cae tan mal. Win se despide y se marcha.

-Voy a cambiarme de ropa, ¿crees que hay un espacio para mi en el sofá?- ese sofá es enorme y lo compre especialmente para nuestra familia.

-Por supuesto cariño- respondo, ella sale apresuradamente hasta su habitación y minutos después se une a nosotros.

Anie abraza a Maly y Chimon y yo me acurruco junto a mi amado esposo.

-Te amo Gun, gracias por darme esta hermosa familia-  

-También te amo, cariño- susurra a mi lado.

.......

AQUÍ EL EPÍLOGO, GRACIAS POR ACOMPAÑARME EN ESTA HISTORIA ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO..