Terminando la rutina de Momo y su novio seguían Hani y Joon. Con nuevo bastón y una coreografía torpe entraron a la arena. Los pies de Hani bailaban sobre la colchoneta, los pies de Namjoon, sin gracia artística sólo se desplazaban sobre el lugar.
El sólo era apoyo de Hani, ayudandola a las partes complicadas de la coreografía como a cargarla y moverla en la arena. Ella era la protagonista y el solo su acompañante pero en un momento Namjoon debía hacer lo suyo y dar un solo de saltos sobre las barras, logrando hacerlo con precisión, los músculos de sus largas piernas tensandose y su pecho hacia afuera, su bastón frente a su cuerpo en horizontal y gotas de sudor haciendo su rostro mas brillante bajo los reflectores del gimansio. En términos sencillos se diría que lo hizo bien, incluso mejor de lo que se esperaba... Y era mucho para ser verdad, así que al brincar en el potro el bastón obstruye la vista del menor, haciendole caer y tener una fractura expuesta de su muñeca.
Su peso cae sobre su muñeca izquierda, principalmente su tórax aplastó su brazo mientras su mano caía en puño, haciendo palanca y exponiendo el cúbito además añadiendo un dolor de rótula en su rodilla. No podía levantarse rápidamente y por sangre mostrandose en su mano, el público con un estruendo de preocupación y su vista sobre él le da a entender que las cosas andan mal. Su cabeza da vueltas, no sabe qué está pasando pues en pocos segundos su amiga se acerca a el con cara de confusión y los paramédicos lo retiran del centro de la arena. Todo da vueltas pues siente dolor en su muñeca y al ver un hueso expuesto se pierde más entre las luces que le desconcertan pues todo da vueltas, está asustado.
Recobrando la calma y recostado sobre una banca larga de campo en el hospital del gimansio anfitrión, le han terminado de poner una férula y zurcir la piel sobre su muñeca. El fisioterapeuta con la bata azul manchada de sangre del menor y limpiandose en la tarja los restos de acomodar los huesos del menor a su lugar le da una mirada.
Abren la puerta Hani, el señor Min y Jeon Jungkook. Por su mente pasan muchas cosas como sentimientos de vergüenza y culpa por arruinar la presentación con su amiga y ser descalificados de la competencia y tristeza porque su cita con Jeon será cancelada. De verdad quisiera ir, tiene horas para recuperarse y salir con él. Le costó demasiado poder pedirle una cita y que la aceptara sin hacer muecas de repulsión como otras ocasiones, pero está muy cansado y solo desea tirarse a dormir.
-Si que eres torpe, muy torpe diría yo- Dijo Jeon sin cuidado- ¿Porqué estás en este equipo si no puedes siquiera caminar sin caerte, huh?
-Jeon, por favor... Sólo fué un accidente- Con una mirada fuerte Hani le responde a Jeon, mirándolo al rostro ¿Como Namjoon podía estar tan ensimismado con alguien así, alguien que siempre desmeritaba todo lo que el menor hacía... no lo entendía- Joonie, lo hiciste bien. Te veía de reojo mientras trabajaba en las laterales y tu ¡De verdad lucías genial! Sólo debías recordar que el bastón debe ir muy retirado de tu campo visual, estirar un poquito más los brazos ¿Está bien?- A su amigo lo veía con amor y compasión, no como a Jeon
-¿No estás molesta conmigo?-Mirada sobre los ojos de Hani y esperanza en su reflejo- No Joonie, no lo estoy ¿Porqué me molestaría? Aceptaste tener menos protagonismo que yo, aceptaste vestir como yo lo propuse, aceptarse dejar el club de escritura en primer año sólo porque yo no tenía compañeros de confianza en mi club ¡Terminaste con un hueso fuera! ¿Cómo podría reclamarte algo?
-Bueno, creo que me voy ¿Ya no saldremos, verdad? Para ir a hacer otras cosas- Kook preguntó al morenito que tristemente debió dejarle ir
Volviendo su atención a padre e hija, escuchando como su oportunidad de tener novio por primera vez sale por la puerta, le preguntan ¿Tus padres vendrán en camino? ¿Saben que estás herido?
-Mamá no vendrá, papá no la deja salir... Y mi papá no vendrá porque está ocupado- Joon siempre daba eso por respuesta a todas las ocasiones donde necesitaba a sus papás.