Con las maletas listas y en la puerta Hani, con teléfono en el oído espera que Namjoon responda su llamada. El señor Min busca las llaves de su auto para dirigirse a la competencia de deportes (específicamente gimnasia artística/ rítmica) de la preparatoria Hwi- Sang, donde está su hija y su Joonie.
- Hola Joonie, ¿Cómo estás?- preguntó la pelicastaña
- Bien Hani ¿Cómo amaneciste?
- Excelente ¿Si voy a pasar por ti, o te irás en el bus de la escuela?- preguntó a través del celular
- ¿Vendrás con tu padre?-
Esa era la pregunta principal, ¿Iría ese hombre?
- Obviamente, ¡Dice que quiere vernos ganar! Hoy ha pedido el día en su trabajo para vernos, ya ves que volvió a la oficina pero sólo los viernes...
- Oh, no Hani, me iré en el bus-
Habló el morenito nervioso, algo nervioso
- ¿Seguro Nam? ¡Vamos, a demás tu. necesitas comprar otro bastón, mi papá puede hacer la parada en la tienda, cosa que no se puede si te vas en el bus.
Ahora Kim tenía un par de dilemas
1) Tener una calificación baja por presentar su coreografía con un bastón roto
2) Tener que verle la cara al señor Min
Namjoon tenía miedo, desde aquel día no ha vuelto a poner un pie en esa casa y según el no lo volvería a poner, pero poniendose a analizar la situación... El señor sólo lo llevaría al evento, junto con Hani, no iría sólo y al ser un lugar con mucha gente no podría intentar sobrepasarse con él, pero... sería un favor que el mayor le estaría haciendo, sobre todo el llevarlo a comprar lo que necesita, sintiendo la resposabilidad de pagarselo.
-Está bien Hani, te espero- Dijo suspirando- Ya estoy listo, sólo cierro todas las puertas.
-Está bien Joonie, voy para allá.
Escuchó el claxon fuera de su casa y sacó su maleta, cerró la puerta principal y corrió al auto.
Abrió la puerta trasera y se sentó, poniendo su maleta sobre sus piernas y abrazandola.
-Buenos días señor, buenos dias Hani.
La vista por el retrovisor era interesante, el jovencito abrazando su mochila, glitter en sus mejillas y brillo labial rosa.
Sus ojitos brillando, mirando por el retrovisor y después alejando la mirada.
Al sentir que lo observaban se orilló más hacia el lado del copiloto, donde estaba sentada su amiga. El auto avanzó.
-Buenos días Namjoon, Yeon me dijo que necesitabas parar en una tienda ¿Cuál es?
-¿Ah? Ah, si si... Es la tienda deportiva que está a un lado del super CJ, a tres cuadras antes que la preparatoria- Dijo mirando hacia al frente.
-Okay, vamos ahí.
La pelicastaña volteó un poco hacia atrás con cara de emoción.
-Joon ¡Siento que he olvidado la coreografía, estoy muy muy muy nerviosa!
-Yo también, a demás siento que me veo muy ...marica, qué verguenza.
-Ah, por favor no salgas con esto ahora, elegimos este vestuario juntos ¿Qué no te parece ahora?
-Nada, solo estoy nervioso ¿Podemos practicar llegando?
-Depende si encuentras una plataforma sola.
Una tercer voz añadió
-Chicos, relájense que todo va a salir bien, ambos se ven muy bonitos y su coreografía está muy bien montada- dijo con una sonrisa volteando a ver a su hija y mirando por el retrovisor. Después de unos minutos de silencio, Hani habló.
-Ah Joonie, ¡Estoy tan emocionada pero por lo que pasará despues! ¿A qué restaurante van a ir tu y Jeon?
-Ah, a ningún restaurante, sólo saldremos a pasear al Mall Lotte- Dijo con las palabras casi arrastrándose de la vergüenza- No hablemos de eso ¿Si?
-¿Porqué, bebé?- Dijo preocupada la menor, casi en un susurro- ¿Cancelaron la salida?
- No, sólo no quiero hablar de eso.
Después de minutos de silencio el auto entró al estacionamiento del establecimiento.
-Ya llegamos Nam, ¿Bajas tu solo?
La voz masculina del frente del coche le cuestionó sacándole de un trance mirando a la nada.
-Si, no hay problema- respondió el menor.
El auto se estacionó y el chico alto bajó caminando hacia la tienda, dejando su mochila sobre la tapicería del Mercedes Benz.
-Hey Yeon, voy a bajar con él por si necesita algo- Dijo Min a su hija, estacionó el auto y fue a la tienda, dejando a su hija en el auto.
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